jueves, 1 de enero de 2009

LO QUE PERDIMOS EN PIPE

A MIS AMIGOS DE INFANCIA…

A MIS AMORES …

Y a los que entendieron antes que yo que ser diferente, que no ser igual a todos, que elegir con el corazón y la pasión en la naturaleza humana también era parte de la humanidad y no mereció jamás ser negada

Porque alguien tiene que contar sobre la violencia que vivimos en las parroquias caraqueñas mientras el país se desmoronaba, sin filosofías diáfanas, ni guías, ni banderas porque ningún líder quiso dejar a otro en su lugar, quizás por miedo.

Personajes:
1. Zoraida...................................16 años.
2. Arquímedes.............................16 años.
3. Catire......................................15 años.
4. Moravia..................................15 años.
5. Fernando................................16 años
6. Morela....................................14 años.
7. Carlitos.................................. 12 años.
8. Cacique.................................. 20 años.
9. Gavilán................................. 18 años.
10. Corcho................................... 21 años.
11. Voz En Off De La Mujer Del Baúl














PREFASIO
El Calor de la Adolescencia

CARICUAO. SUBURBIOS CARAQUEÑOS EN LA ACTUALIDAD. DOS SENITALES NOS DESCUBREN A DOS SOBERBIOS ADOLESCENTES, PARADO EN ACTITUD DEFENSIVA -UNO JUNTO AL OTRO-. ESPACIO VACÍO. MIRAN CON DESPRECIO HACIA LOS ESPECTADORES. SUS EDADES FLUCTÚAN ENTRE 15 Y 16 AÑOS UNO ES MORENO CON LOS OJOS COLOR ACEITUNA Y EL OTRO ES CATIRE RIZADO, CON MECHAS. ZARCILLO Y TATUAJES CON SUS RESPECTIVAS TABLAS. SON HERMOSOS DENTRO DE LA HOSTILIDAD. NINGUNO SE DECIDE A INICIAR LA CONVERSACIÓN. DE PRONTO EL CATIRE.
CATIRE.- ¿Qué? ¿Otra vez?
GRAN PAUSA.
ARQUÍMEDES.- Yo no, de pana… No otra vez…
GRAN PAUSA.
ARQUÍMEDES.- Yo Soy Arquímedes Santander.
CATIRE.- Y yo Eduardo Chacín, pero me dicen Catire…Ya yo dije todo lo que tenía que decir… y no quiero volver a empezar a contar como fue que pasó todo eso… Sí, fuimos a Pipe… a nosotros nadie nos advirtió nada…
ARQUIMEDES.- Nadie dijo que Pipe era un lugar tranquilo.
GRAN PAUSA. CATIRE COMIENZA A LLORAR SIN JIMOTEAR.
CATIRE.- Nosotros sólo queríamos pasear y estar con la gevita… ¿si me entienden?
ARQUÍMEDES LO EMPUJA PARA QUE DEJE LA LLORADERA.
ARQUÍMEDES.- Y el lugar es demasiado bueno… de pana… Claro yo no tenía por qué ponerme con el cuento con el primo de mi geva… pero es que no lo podía ver…
CATIRE.- Ni este…
ARQUÍMEDES.- Nunca le has tenido una arrechera arrecha a alguien sin motivo… porque sí…
CATIRE.- Eso… sin motivo… porque así es que fue…
GRAN SILENCIO.
ARQUIMEDES.- Eso me pasaba con el chamo…
CATIRE.- De pana…
ARQUÍMEDES.- Ahora por ese chamo, soy capaz de dar la vida... porque lo que él hizo por mí no lo hizo nunca nadie…
CATIRE.- Ni por este varón… ni por ninguno de los que fuimos de brejeteros al cerro de Pipe… y ahí perdimos algo que nunca pensamos que nadie nos quitaría antes de tiempo…
ARQUÍMEDES.- Ese chamo es mi héroe… y me sabe a poco lo que piensen… porque yo soy un caballero y al pan, pan… Y yo le tenía arrechera… de gratis pero se la tenía…
CATIRE.- Yo tengo quince años.
ARQUIMEDES.- Yo dieciséis.
CATIRE.- Y ya no somos unos chamos… eso lo perdimos por allá arriba cuando casi se nos violan a las chamas… dígalo ahí… y casi nos matan a todos.
ARQUÍMEDES.- Porque este es el cuento adolescente de cómo casi nos borran del mapa… y si estamos aquí es porque estamos esperando a ver cuál otro quedó vivo…
CATIRE.- Aparte de nosotros dos… y el chamito que nos salvó
SE ILUMINA EL ESPACIO, MONTAÑA INCLINADA Y LOS JÓVENES AGOTADOS ACTÚAN COMO BUSCANDO ALGO PERDIDO.
ARQUIMEDES.- Yo creo que sólo quedamos nosotros tres…
CATIRE.- Y Fernando…
ARQUÍMEDES.- De pana que estoy triste…
CATIRE.- Y ya no hay nada que hacer… Hacemos o nos hacen , mi pana…
ARQUÍMEDES.- Nada…
CATIRE.- Así que a afinar el guargüero y vamos a bebernos nuestro pocillo…
ARQUIMEDES.- Es un pocillo de mierda…
CATIRE.- Pero estamos vivos…
ARQUIMEDES.- Eso creo…
CARLOS.- (OFF) ¡¡Vengan por aquí!!
LOS JÓVENE SALEN A TODA PRISA. ARTICULACION.
I
REVELACIÓN

EN SU HABITACIÓN, CARLITOS, UN CHAMO DE 13 AÑOS, MÁS PEQUEÑO DE LO QUE CORRESPONDE A SU EDAD. JUEGA EMBEBIDO CON SU COMPUTADORA. MIENTRAS TECLEA VEMOS EN LA PANTALLA DERECHA LO QUE LE MUESTRA EL MONITOR Y EN LA IZQUIERDA LO QUE PARECE SER EL PAISAJE DEL MUNDO EXTERIOR. LAS IMÁGENES DE LA COMPUTADORA TRANSCURREN A UNA VELOCIDAD INUSITADA, QUE PODEMOS OBSERVAR EN UNA GIGANTESCA PANTALLA EN LA QUE SE MEZCLA A UNA VELOCIDAD QUE CASI NO NOS PERMITE FIJAR LAS IMÁGENES DE MUJERES EN POSES SUGESTIVAS CON AVIONES, PARACAÍDAS, BARCOS, COMPETENCIAS DE NATACIÓN. INVENTOS DE DA VINCI, PORNOGRAFÍA, COHETES, LA LUNA, MARTES, JÚPITER, PARTIDOS MUNDIALES DE FÚTBOL, LA GUERRA DE LAS GALAXIAS, VIAJE A LAS ESTRELLA, MATRIX, COMPUERTAS AND Y OR CON LENGUAJE BINARIO, CÁLCULOS PARA LOS PROCESOS DE CLONACIÓN Y EL GENOMA HUMANO. CARLITOS DISPARA AGRESIVAMENTE ASESINANDO CUERPOS VIRTUALES QUE SE ACERCAN ACECHANTES. TODA LA SECUENCIA DE IMÁGENES ES SEGUIDA POR UNA ESTRUENDOSA MUSICA “HEAVY METAL” QUE MANTIENE AISLADO AL JOVEN CON EL MUNDO REAL. DE PRONTO LLEGA HASTA UN ESPACIO VIRTUAL Y ENCUENTRA UN BAÚL EN EL QUE DICE “LO QUE TE DEPARA EL FUTURO. NO ABRIR SI NO QUIERES SUFRIR”. FRENAZO.
CARLITOS.- por aquí si es… (MIRANDO LA GRAN PANTALLA COMO SI FUERA EL MONITOR) ¡Perro!
INESPERADAMENTE SE ESCUCHA QUE LO LLAMAN.
ZORAIDA.- ¡Carlitos...! ¡Carlitos...!
RAPIDAMENTE CARLITOS CAMBIA LA VELOCIDA, ESCONDE LA IMAGEN DEL BAÚL Y PONE UN INOFENSIVO JUEGO DE CARTAS EN LA PANTALLA ANTES DE RESPONDER. LA MÚSICA PASA A POP. LLEGA ZORAIDA, UNA LINDA ADOLESCENTE DE UNOS 16 AÑOS, MESTIZA, DE OJOS DE MIEL.
ZORAIDA.- Carlitos, niño... ¿tú como que estás sordo? Te va a tragar la computadora.
CARLITOS.- A lo mejor.
ZORAIDA.- Te está llamando mi mamá.
CARLITOS.- ¡Ladrillo! ¿Qué?
ZORAIDA.- Te llama mi mamá.
CARLITOS.- ¿Para qué?
ZORAIDA.- Quiere que bajes a comprar el pan y pedirte un favor... Toma le das a Arquímedes cuando lo veas...
CARLITOS.- Tú sabes bien en lo que quedamos –No fastidies-
ZORAIDA.- Pero es la única manera en la que me dejen tranquila un rato sin vigiladera… Arquímedes va a terminar por dejarme...
CARLITOS:- Favor que te hace el tarado ese... ¿Qué le ves tu a ese tipo?
ZORAIDA.- Eso no es problema tuyo.
CARLITOS.- Ojalá no lo fuera... pero el chaperón soy yo... el que se tiene que calar los papi sí... mami, no... y todo ese revoltillo, es este que está aquí... ¿qué me va a decir la tía, además de bajar a comprar el pan?
ZORAIDA.- Qué quiere que me acompañes a un paseo que van a hacer los muchachos a las cataratas de Pipe.
CARLITOS.- ¡¿A qué?!...
ZORAIDA.- ¡Ay, tú entendiste...! Va a ser bien chévere... vamos caminando, en contacto con la naturaleza... las guayabitas silvestres, el viento
CARLITOS.- Y con los monos de tu novio y sus amigotes... tratando de joderme todo el tiempo...
ZORAIDA.- De pana que yo hablé con él y le expliqué... y él sabe que si no vas tú... no voy yo...
CARLITOS.- Pues te vas a quedar en casita...
ZORAIDA.- Cónfiro, Carlitos, no me hagas eso... Todos van... Morela y Moravia ya tienen listos los morrales, las cantinfloras y todo... Además Euri le dio una patada en la espinilla a Fernando y le hizo un chichón y queremos demostrarle que ella no le pega a un pana de nosotros... además es la oportunidad para empatarlo con Morela Padrón... Anda... dile a la vieja que sí.
CARLITOS.- No estoy seguro.
ZORAIDA.- Arquímedes me prometió que no se iba a meter contigo.
CARLITOS.- Esa se la haces creer a mi tía... no a mí...
ZORAIDA.- ¡Es verdad!
CARLITOS.- Ese tipo me odia... y si me pudiera borrar del mapa -por no dejarlo que abuse contigo a placer-, lo haría sin remordimiento de conciencia... él quiere una sola cosa contigo, prima... y hasta que no lo consiga no se va achantar... y menos conmigo... como si yo tuviera la culpa, que se le notaran las costuras por encima de la ropa...
ZORAIDA.- (EN VÍCTIMA)Pero tú piensas muy mal de mí entonces también.
CARLITOS.- Yo soy un carajito y tú una chama de 16 años... el imbécil soy yo...
ZORAIDA.- Anda, primo... no me van a dejar ir, vale...
CARLITOS.- Ojalá no te dejaran.
DE PRONTO EL BAÚL DE FORMA ALIATORIA APARECE EN LA PANTALLA DE LA COMPUTADORA CON UN RUIDO DE PRESENTACIÓN MUY ATRACTIVO QUE LE LLAMA LA ATENCIÓN A ZORAIDA.
ZORAIDA.- ¿Y qué juego es ese?
CARLITOS.- No sé... Lo acabo de descubrir. No lo había visto antes.
ZORAIDA Y LA VOZ DEL BAÚL.- (LEYENDO) “Lo que te depara el futuro. No abrir si no quieres sufrir”. ¡¡Vamos a ver qué es!!
CARLITOS.- No; no quiero sufrir más de lo que he sufrido... creo que ya estuvo suficiente...
ZORAIDA.- De pana que eres chimbo.
CARLITOS.- De pana que mejor vamos a ver qué quiere tía...
ZORAIDA.- Yo quiero ver qué pasa si abro el baúl
CARLITOS.- Te dije que no....
OSCURO.

ARTICULACIÓN.




II
PREPARANDO TERRENO.
PLAZA DEL BLOQUE 11 DE LA REDOMA DE RUIZ PINEDA. TRES ADOLESCENTES VESTIDOS A LA MODA VIENEN PLANEANDO.
CATIRE.- Claro que viene... ¿Tú crees que se va a perder esta dureza que tiene su papi?
FERNANDO.- Pero la mamá no le ha dado permiso. Sabes cómo es esa vieja.
ARQUÍMEDES.- El que te puede decir cómo es la vieja soy yo.
MIRAN LOS TRES A TODOS LADOS, SACAN UNA CAJA DE CIGARRILLO CADA UNO Y LOS PRENDEN COREOGRÁFICAMENTE AL MISMO TIEMPO. ECHAN HUMO CON PLACER.
CATIRE.- ¿No me digas que vas a arrugar?
FERNANDO.- No sé... Hay que caminar más que un perdido para llegar a un piche chorrito de agua.
ARQUÍMEDES.- Pero Catire no te dijo que vinieras para que te bañaras en el piche chorrito... te dijo que vinieras con Morela, que a lo mejor termina siendo tu geva, para que la pasáramos un día full, compartiendo cariñitos. (SE TOCA EL BULTO QUE SE LE NOTA EN EL PANTALÓN)
CATIRE.- Tú con la tuya, que es la Morelita que está como quiere; él con la suya y yo con la mía...
ARQUIMEDES.- ¿Entendiste? Hasta parece una clase de ortografía pero con biología y puericultura.
ARQUÍMEDES Y CATIRE HACEN GESTOS LASCIVOS.
FERNANDO.- Tengo que pensarlo, de pana… Todavía me duele el chichón que me hizo Euri en la pierna…
CATIRE.- Ya arrugó.
ARQUÍMEDES.- De pana.
FERNANDO.- No he dicho que no. Dije que iba a pensarlo... ¿Además, no sé cuál es el estrile del Arquímedes, si sabe que no van a dejar a ir a la Zora, si no se viene con el primito.
ARQUÍMEDES.- Negativo. Eso es nega...
FERNANDO.- Siempre va a ser así... Hasta que te cases... La Zora no sale a ningún sitio con permiso de su mamá si no lleva de chaperón al Carlitos.
CATIRE.- De pana... pero ya inventaremos una para dejar al chamo botado.
FERNANDO.-Búsquenle una carajita para que se distraiga.
ARQUÍMEDES.- A ese chamo no le gustan las carajitas... tiene una pinta de geva que no se la quita su mamá.
CATIRE.- A lo mejor lo que le hace falta es unos golpecitos, para que salga de la gaveta y nos demuestre que es un verdadero putico.
ARQUÍMEDES.- Porque ese carajito es o de jarra y de bandeja.
FERNANDO.- Bueno... ¿y si es gay qué...?
CATIRE.- Cierto. Más carne para bajar la calentura.
ARQUÍMEDES.- y para descargar sin miedo si te faltan las gomitas.
FERNANDO.- Quien come lenteja es porque le gustan las lentejas.
ARQUÍMEDES.- ¿Cuál es el güiro, Fernando?
CARLOS.- ¿Tú nos estás llamando parcha?
FERNANDO.- No, escúchense bien, son ustedes los que están llamando parcha al primito de la Zoraida.
ARQUÍMEDES.-¿Y lo vas a defender?
FERNANDO.- Nega, pero tampoco quiero ser el causante de la desgracia del chamo ¿Estamos?
CATIRE.- No hay güiro.
ARQUÍMEDES.- Lo mismo digo... sin güiro.
CATIRE.- ¿Entonces, te vienes con nosotros a Pipe?
FERNANDO.- Sí va.
PAUSA. PASA CON MUCHO MIEDO CARLITOS CON LA BOLSA DE PAN QUE ACABA DE COMPRAR Y LOS MUCHACHOS LO VEN. CARLITOS TRATA DE DEVOLVERSE PARA NO TOPARSE CON ELLOS PERO ELLOS LE BLOQUENA EL PASO Y EL CHAMO SALE CORRIENDO ASUSTADO.
CATIRE.- Vamos entonces a arreglar los morrales, Arquí.
ARQUÍMEDES.- Dale.
SALEN CORRIENDO DETRÁS DEL CHAMO. FERNANDO LOS SIGUE FASTIDIADO PAR VER LO QUE VAN A HACER. ARTICULACIÓN.


III
CACIQUE
CACIQUE CON LA FOTO DE ZORAIDA EN BREVÍSIMO TRAJE DE BAÑO SE LA MORBOSEA.
CACIQUE.- Yo quiero esta princesa para mí.
GAVILÁN.- Pero es una chamita, Cacique.
CACIQUE.- ¿Quién te dijo que las princesas eran viejas y aguadas?
GAVILÁN.- Sí, pero es una chamita que hemos visto desde niña... Es como si fuera familia de uno... y con la familia no se juega... y si se juega ten cuidao...
CACIQUE.- Ella está apartada desde chama.
GAVILÁN.- Pero está empatadísima con Arquímedes, el sobrino de Corcho.
CACIQUE.- Lo siento por el Corcho... pero esa chama tiene dueño.
GAVILÁN.- Es todavía una adolescente.
CACIQUE.- ¿Y?
GAVILÁN.- Te puedes meter en sendo lío legal...
CACIQUE.- Yo primero le voy a enseñar lo que tengo... hasta que la envicie... y luego ella solita va a saber pa’ dónde tiene que coger.
GAVILAN.- A mí me parece burda de lo peligroso.
CACIQUE.- A mí me parece burda de entretenido... y eso es para ya...
LLEGA CORCHO CON UNA COMPUTADORA PORTÁTIL.
CORCHO.- ¡Listo! ¡Ya averigüé pa’ donde es que van a coger los carajitos! Me hice pasar por el baúl del futuro y me soltó todo la Zoraida
CACIQUE.- Dame pista.
CORCHO.- Los chamos se van pa’ Pipe de paseo, mañana bien temprano.
CACIQUE.- ¿Qué te dije, tipo?
GAVILÁN.- Bueno, pero hay que estar mosca...
CORCHO.- Esos chamos me van a servir el negocio en bandeja de plata ¿Malo? Malo no es... Vengan, están llamando otra vez al baúl…
ABRE LA LAPTOP Y TODOS MIRAN DIVERTIDOS.
OSCURO

ARTICULACIÓN
IV
EL CONJURO
OTRO ÁNGULO DE LA CALLE. ARQUÍMEDES Y CATIRES VIENE ABUSANDO DE CARLITOS. EL NIÑO ESTÁ ATEMORIZADO. FERNANDO LOS SIGUE. BAILAN LA AGRESIÓN.
CARLITOS.- (OFF) ¡¡¿Qué les pasa?!! ¡¿Se volvieron locos?! ¡¡Ese es el pan de la tía!!
COMEN DEL PAN. FERNANDO LES QUITA LA BOLSA Y SE LA DEVUELVE A CARLITOS. CATIRE SE ACERCA A CARLITOS Y LE SOBA LAS NALGAS.
FERNANDO.- Dejen a ese muchacho tranquilo.
CARLITOS.- (EMPUJANDO FUERTE AL CATIRE) ¡¡Ya te dije!! ¡¡No quiero que me toques el culo!!
FERNANDO.- (RETENIENDO A ARQUÍMEDES) ¿Qué lo dejes te dije!
ARQUÍMEDES.- ¿Tú como que eres novio de este chamo? ¿O lo quieres pa’ ti solo?
FERNANDO.- Tú sabes que no me gustan las injusticias.
CATIRE.- Injusticias las que se tiene que calar el pana Arquímedes por culpa de esta mariquita... No lo dejan ni a sol ni a sombra con Zoraida.
CARLITOS.- Se lo voy a decir a mi tía.
CATIRE.- Mira, peazo’e marico... si tu tía se entera de esto te vas a morir (SACA UNA PISTOLA QUE TENIA EN EL PANTALÓN) con esta....
FERNANDO.- Eh, eh, eh... Ya te pasaste Catire.
CATIRE.- ¡¡Te pasaste un carajo!! ¡¡Lo que quiero es que este carajito entienda que si no deja en paz al pana Arquímedes con su geva, la va pagar pero con la vida o con el culo!! Aunque pensándolo bien... podría bien darnos un gustico.
CARLITOS.- Por favor... yo no tengo la culpa. A mí me mandan.
FERNANDO.- Ok. ¡Dame el tiro a mí! ¡Dámelo! ¡Pero no se comporten como dos mente’e pollos! ¿Qué va a pasar si le das un tiro? ¿Se van a mejorar las vainas entre Arquímedes y Zoraida? ¿Se la va a poder coger sin que el chamo intervenga? ¿o esté obligado a seguirla como perro faldero porque si no son capaces de regresarlo al orfanato de donde lo sacaron cuando su mamá y su papá se murieron?
ARQUÍMEDES.- De pana. Guarda el yerro. Se te puede escapar una yesca...
CATIRE.- ¿Vas a arrugar?
ARQUÏMEDES.- Yo no arrugo... pero se me puede enchavar la geva si le pasa algo a la mariquita esta.
CATIRE.- Entonces explícale tú que no lo quieres cerca... mucho menos cuando vayamos a Pipe.
CARLITOS.- ¿Pipe, no? Pues le cuento: no van a dejar ir a Zoraida si yo no voy... y les voy a decir más: yo siendo ustedes no iría a Pipe. La vida de todos los que vayan a ese paseo corre peligro. Menos la mía
ARQUÍMEDES.- ¿Cómo es la vaina?
CARLITOS.- Que quien vaya a Pipe corre peligro de muerte... y si llevan a Zoraida yo voy con ella, porque soy la única persona del plano real, que le asegura la salvación a mi prima.
CATIRE.- Este como que lo que se fumó estaba piche...
ARQUÍMEDES.- Cállate… eso fue lo que le dijo el Cacho desde el baúl del futuro…
CATIRE.- Ah, bestia que somos, verdad… ¿Y qué más te dijo?
CARLITOS.- Pregúntenle a Zoraida, ella sabe que lo que digo es verdad.
CARLITOS LE QUITA EL PAN A LOS MALANDROS Y SALE CORRIENDO.
CATIRE.- Entonces fue el Cacho el que le dijo…

OSCURO. ARTICULACIÓN












V
MIEDO
ZORAIDA LLEGA CORRIENDO AL CUARTO DE MORELA QUE TERMINA DE ARREGLAR SU MORRAL PARA EL PASEO.
MORELA.- Muchacha, ¿qué fue?
ZORAIDA.- Ay, manita, qué miedo...
MORELA.- ¿Miedo de qué?
ZORAIDA.- Carlitos..
MORELA.- Otra vez el chamo bobo...
ZORAIDA.- ¿y Moravia?
MORELA.- Allá abajo, peleando con la mamá, porque ella está acostumbrada a usar franelillas debajo de la ropa y la vieja loca quiere que se ponga un sostén que le compró que le levanta las lolas como si fuera Afrodita la compañera de Masinger Z.
ZORAIDA.- ¡Qué fastidio con el asunto de las Lolas!
MORELA.- De pana.
ZORAIDA.- De pana. Yo no sé porque a nosotras las mujeres nos tienen que crecer estás cosas tan fastidiosas... no puedes jugar bien básquet ni voleibol, ni nadas con la misma comodidad que los muchachos...
MORELA.- Mira cuéntame qué pasó con tu primito... Porque seguro que inventó alguna de las de él...
ZORAIDA.- Bueno, otra vez no, porque es la primera vez que me asusto tanto como él... Y él no sabía lo que estaba pasando.... Fue horrible, chamita...
MORELA.- Mira, siéntate... respira hondo y echa pa’ fuera...
ZORAIDA.- Yo fui a buscar al chamo a su cuarto, para que mi mamá le pidiera que nos acompañara a Pipe, por que desde que le regalaron el aparato ese no hace sino estar metido todo el día navegando...
MORELA.- Por lo menos ha dejado de seguirte como perro faldero a todos lados.
ZORAIDA.- Sí, pero tratando de persuadirlo para que viniera a hablar con mi mamá, se abrió de repente, en la pantalla del computador del chamo una foto con un baúl muy extraño, rodeado de una especie de bruma y un letrero que decía...
ZORAIDA Y LA VOZ DEL BAÚL.- (LEYENDO) “Lo que te depara el futuro. No abrir si no quieres sufrir”.
MORELA.- ¡Uy, me ericé! Pero me parece interesante... Podríamos enterarnos de algunas cosas que quisiéramos...
ZORAIDA.- Eso me pareció a mí... y hasta insistí para meternos...
MORELA.- ¿Es como una especie de Ouija?
ZORAIDA.- No esto no tiene letras ni nada de eso... tú haces clic en el seguro del baúl con la flechita del mouse y se abre y aparece una mujer vestida como una bailarina árabe... bellísima... y la muñequita hasta sabía mi nombre...
MORELA.- ¡No!
ZORAIDA.- De pana.
MORELA.- La mujer nos saludó así:
ACORDES DE MIEDO.
VOZ EN OFF DE CORCHO COMO LA MUJER DEL BAÚL.- Hola Zoraida... Hola Carlitos
ZORAIDA.- Y yo le respondí... y el chamo también...
VOZ EN OFF DE CORCHO COMO LA MUJER DEL BAÚL.-¿Están seguros que quieren saber lo que va a suceder en su futuro inmediato?
ZORAIDA.- Y yo echándomela de dura le dije “Claro tipa, echa pa fuera, ¿cómo nos va a ir en el paseo a Pipe?”... Y la mujer me dijo
VOZ EN OFF DE CORCHO COMO LA MUJER DEL BAÚL.- “Pero pueden sufrir con lo que les voy a decir”.
ZORAIDA.- Y yo le respondí... ¿y eso qué? ¿No somos latinoamericanos? Nosotros estamos acostumbrados a sufrir y padecer injusticias... por eso todos de este lado del mundo nos ganamos el cielo.
MORELA.- De pana.
ZORAIDA.- Entonces la tipa nos dijo...
VOZ EN OFF DE CORCHO COMO LA MUJER DEL BAÚL.- “Carlitos no dejes ir sola a tu prima Zoraida a Pipe, porque si lo haces ella no regresa con vida. Porque todos los que vayan a ese paseo, corren riesgo de muerte”
LA LUZ DEL CUARTO TITILA COMO SI SE FUERA A APAGAR. ACORDES DE MIEDO.
ZORAIDA Y MORELA.- ¡¡Aghhh!!
ZORAIDA.- ¿Viste que es verdad!
MORELA.- ¡¿Quéééé?! ¡Cancelado y transmutado y pa’l otro lado echado!
ZORAIDA.- De pana...
MORELA.- De pana que si la cosa es así yo no me muevo de mi casa ¡¡La pizuña!!
ZORAIDA.- No manita... no puedes dejar de ir... porque puede ser peor... porque una vez que el plan está hecho el que trate de romperlo puede ocasionar daños mayores...
MORELA.- ¡¿Daño mayores que morirnos?! ¿Se te fundió el coco? ¿Qué daño puede ser mayor que eso?
ZORAIDA.- Lo llamó pajadora, pajarado, paradoja... sí paradoja… o algo parecido.... no puedes quedarte aquí, porque tienes que estar allá y afrontar con nosotros nuestro destino.
MORELA.- ¿De qué estas hablando? ¡¿Qué tengo que morirme?!
ZORAIDA.- Puede que mueran muchos más inocentes... O pase una catástrofe.
MORELA.- Pero eso quiere decir que estamos atrapadas.
ZORAIDA.- Tú, yo... y todos... Los que vamos al paseo de Pipe.
MORELA.- Dime más...


OSCURO. ARTICULACIÓN











VI
LA PARTIDA
ESCENA COREOGRÁFICA A RITMO DE REGGAETON FUSIÓN. LA LLEGADA DE MORAVIA CON SUS NUEVOS SOSTENES QUE LE LEVANTAN DEMASIADO LOS SENOS ES EVIDENTE. ELLA VIENE CON FERNANDO QUE INTENTA QUE SE CUBRA CON UN SWETER.

Mi mamá quiere que guarde mis limones
En esta bolsa nueva que levanta tentaciones
Yo me pongo... pongo... me pongo mi sostén
Y mis chichis dicen toronjas de tonel

Mis limones, mis limones, toronjas de tonel
Levantan tentaciones y morbo a granel

Mis limones, mis limones toronjas de tonel
Y cuando se levantan no me las dejas de ver.

Caminando por allí
Con mi bolsa de limones
Un bello chico del lugar
me hizo corazones

Y lo que impresionó
De toda su atención
Es que Santa Bárbara
Con su boca me llamó

Y cuando pregunté
Por qué decía así
Me dijo por santa arriba
Y Bárbara por aquí.

Mis limones, tus limones toronjas de tonel
Levantan tentaciones y morbo a granel

Mis limones, tus limones toronjas de tonel
Y cuando se levantan no me dejas de ver.

LAS MUCHACHAS SE HORRORIZAN Y LOS MALANDRINES ARQUÍMEDES Y CATIRE LO CELEBRAN. FERNANDO LOS ENFRENTA Y LOS MUCHACHOS SE CALMAN. CARLITOS APARTADO JUEGA CON UNA MASCOTA VIRTUAL. MIRA. TODOS BAILAN Y CANTAN DEJANDO VER SU JUVENTUD. CARLITOS ESTÁ PREOCUPADO.
ARQUÍMEDES.- ¿Estamos listos?
CATIRE.- Listos estamos para Pipe, panita.
ARQUÍMEDES.- (REFIERE A CARLITOS) ¿Y quien se cala esa ladillita?
ZORAIDA.- Tú sabes que es mi primo... y si no va él no me van a dejar ir a mí. Así que cálmate. No seas bruto, chico.... Tú sabes que yo sé cómo manejarlo...
ARQUÍMEDES.- Bien. Pero que camine bien lejos del grupo.
CATIRE.- Porque a lo mejor se van a decir…
ARQUÍMEDES.- o hacer…
ARQUÍMEDES Y CATIRE.- Groserías grandes y vulgares y él no está acostumbrado.
MORELA.- Catire, deja a Carlitos...
FERNANDO.- Ya no sé cómo repetírselo a los dos... parecen medio pendejos...
ARQUÍMEDES.- Ya te dije que cuidaras que tu novio no se me acercara mucho... porque sí no... no respondo
FERNANDO.- chamo, vente... vas a subir conmigo y punto.
MORELA.- ¿Y yo?
FERNANDO.- También...
MORELA.- Ah.
FERNANDO.- Y si quieres te sueltas un pelo ese sostén, porque si alguno de esos pendejotes te dice algo sobre tus... limones, me voy a molestar full.
MORELA.- Ay, eso es porque me quieres... porque cuando un hombre se molesta por algo que te dicen unos malandros, es porque algo siente su corazoncito. Arquímedes ¿tú te molestarías si encontraras un zagaletón diciéndole algo a la Zora?
ARQUÍMEDES.- Sería capaz de exprimirlo como una naranja.
MORELA.- Catire... y tú ¿Si alguien le dice algo sucio a Moravia, qué haces?
CARTIRE.- Le preguntaría que cuál es el guarinei y que de este lado esa pachanga suena a Charanga
MORAVIA.- ¿Y tú...?
FERNANDO.- ¿Qué quieres que te diga, si conoces la respuesta?
MORELA.- Siempre es importante estar segura de algunas cosas.
ZORAIDA.- Porque para las mujeres es necesario un ramo de rosa.
MORAVIA.- O una canción o alguna otra cosa...
MORELA.- Necesitamos saber que nos quieren... y si lo hacen florecemos...
ZORAIDA Y MORAVIA.- Y si no nos marchitamos y perecemos de incertidumbre
MORELA.- O de desamor... ¿Tú me quieres?
TODOS RÍEN.
FERNANDO.- Morela, no empieces por favor...
MORELA.- ¿Tú me amas?
FERNANDO.- Es hora de subir... Vamos a Pipe...
TODOS.- ¡¡A Pipe...!! (Salen felices)
ZORAIDA MIRA DE UN MODO PARTICULAR A SU PRIMITO.
ARQUÍMEDES.- Deja ya a esa mariquita tranquila...
ZORAIDA.- Respétalo, Arquímedes, quién sabe y algún día te salve la vida
ARQUÍMEDES LA TIRA Y SE LA LLEVA.
MORAVIA.- (SE PERSIGNA) ¡Qué sea lo que Dios quiera!!
Y SALE CON CATIRE.
CARLITOS.- Sí, vamos a morir a Pipe.


ACORDES DE TENSIÓN. ARTICULACIÓN.



VII
LA SUBIDA.
LOS MUCHACHOS SUBEN UNA CUESTA EMPINADA CON CUERDAS E INDUMENTARIA PARA LA ESCALADA. ELLOS VEN LA URBANIZACIÓN.
MORELA.- Aquella es mi edificio. Y Zoraida vive en aquel que está allá.
MORAVIA.- Y yo en aquel.
DETENIÉNDOSE EN UN SALIENTE DEL CERRO.
FERNANDO.- ¿Quieren agua?
TODAS.- Sí.
MORAVIA.- Manitos, qué subidera.
FERNANDO.- Todavía falta un pelo...
MORELA.- Será una peluca… porque falta como una hora de escalada y otra de camino.
MORAVIA.- Yo tengo sudada hasta la cédula de identidad.
CARLITOS SE REBALA Y FERNANDO LO RETIENE PARA QUE NO SE CAIGA.
ZORAIDA.- Carlitos, no te quedes tan atrás... te puedes perder...
FERNANDO.- Tranquila que yo lo tengo pillao.
CATIRE.- Ojalá, ese carajito se termine de perder de una vez.
ARQUÍMEDES.- eso está perdido de nacimiento, lo que pasa es que todavía no ha descubierto sus virtudes.
SE RÍEN LASCIVOS.
CATIRE.- Y todavía no tiene pelitos en ningún lado.
CARLITOS.- Déjenme. No vayan a empezar.
ARQUÍMEDES.- (SIN QUE ZORAIDA ESCUCHE) Debes tener un culito sabroso.
CATIRES SE RÍE DESCARADO Y TRATA DE TOCARLE LAS NALGAS AL CHAMO QUE SE MOLESTA.
CARLITOS.- ¡¿Qué fue?! Cómo que los patos de verdad son ustedes dos, porque todo el tiempo me están morboseando y tocándome el rabo... será que son maricas, que yo les gusto y no lo quieren reconocer...
ARQUÍMEDES.- ¿Qué picadera tiene el carajito este hoy? ¿Cómo que te soltaron del closet de tu tía?
ZORAIDA.- ¡¡Arquímedes, noooo!!
ARQUÍMEDES.- Ya te dije que no quiero a esa mierda cerca de nosotros.
FERNANDO.- Y ya yo te dije que él viene conmigo... así que ni lo mires...
ZORAIDA- Arquímedes, Carlitos es mi primo, yo lo quiero…. Él me quiere como su prima y si tiene que estar cuidándome es culpa de mi mamá, no de él.
FERNANDO.- Vamos a apurarnos en subir es lo que tenemos que hacer, porque el cielo está pintando lluvia.
MORELA.- Ay, no te pongas como mi papá, que cuando no quiere salir con nosotros siempre ve el cielo gris y está a punto de llover…
MORAVIA.- De pana, que el mío también.
CATIRE.- Aprendieron en la misma escuela.
ZORAIDA.- ¿Qué dices? ¿Te vas a seguir metiendo con él?
CARLITOS.- ¿Tú no le contaste que si no me llevas puedes morir?
ZORAIDA.- ¡¡¡Carlitos!!!
CARLITOS.- ¡Perdón…! ¡lo sé, lo prometí…!
FERNANDO.- ¿Cómo es eso que si no él no va te vas a morir?
ZORAIDA NO SABE QUÉ RESPONDER
ZORAIDA.- Nada… un juego… un invento de Carlitos para no dejarme sola…
APARTE DE ARQUIMEDES Y CATIRE.
ARQUIMEDES.- Le pusiste al agua lo que te dije.
CATIRE.- No a toda.
ARQUÍMEDES.- Ofrécele al carajito, a ver si nos lo volamos de una.
CATIRE.- En lo que se descuide…
MORAVIA.- ¡Bueno, vamos a subir o me regreso para mi casa!
MORELA.- Y la otra.
ARQUIMEDES.- Vámonos…. Que todavía hay mucho que sudar…
CAE UN TRUENO.
ZORAIDA.- Y yo o quiero que vayamos subiendo cuando empiece a llover…
ARQUIMEDES.- Si es que llueve, mami.
CATIRE.- ¿Quién quiera agua, es conmigo…? ¿Quieres agua, Carlitos?
CARLITOS.- Yo traje mi cantinflora.
RETOMAN LA SUBIDA. CATIRE CONTRARIADO MIRA CON ODIO A CARLITOS. ARTICULACIÓN.
VIII
LA CIMA
CAE OTRO RAYO, VAMOS LA CENTELLA Y SUENA CON ESTREPITO EL TRUENO. EL CACIQUE Y GAVILÁN SE ESTÁN FUMANDO GRANDES TABACOS DE MARIGUANA, MIENTRAS CORCHO BEBE DE SU BOTELLA DE ANIS CON YOGOURT.
CORCHO.- (AVISANDO) ¡¡Mosca, mosca!! que ahí viene un grupito de chamos. Son de los bloques de allá abajo… con el carajito de mi hermana…
CACIQUE.- Tranquilo, Corcho, que aquí no se nota la nota…
GAVILÁN.- Vuelo planeado.
CORCHO.- Y la buena que te tengo es que viene la Zoraidita con el grupo.
CACIQUE.- La Princesa… como está escrito… Ella es mía y la misma muerte no es nada.
GAVILÁN.- Zape.
CACIQUE.- ahora sí que vale la pena llegar a la catarata antes de que comience a llover… para colocarnos en una cueva estratégica…. Donde nos nos pillen hasta que estén en el sitio. ¡Trajiste el puñal que te pedí?
GAVILÁN.- Aquí lo tengo.
CACIQUE.- No lo saques todavía… que lo vamos a usar más adelante..
CORCHO.- Me siento como un ladrón al acecho… y me da vaina con el sobrino…
CACIQUE.- ¿Y te molesta…?
CORCHO.- A nadie le disgusta sentirse poderoso… sobre todo si no lo es…
GAVILAN.- Tas aprendiendo, Corchito… tas aprendiendo…
CAICQUE.- Cuidao si no eres tú el que sale volando de aquí a la redoma. ¡Vamos subiendo!
GAVILÁN.- Subiendo…
LOS MALANDROS SUBEN LA CUESTA POR OTRO LADO

ARTICULACIÓN



XIX
COMO UN ACCIDENTE
.ZORAIDA SENTADA EN UN SILLA BAJO UN CENITAL.
ZORAIDA.- ¿Entonces? ¿Nadie me va a responder…? ¿Qué lugar es este? ¿Qué hago aquí? ¿Estoy muerta? ¿Alguien puede responderme…? No. Yo no puedo morirme, tengo que regresar Lo último que recuerdo es que me caí desde la subida junto a la catarata.
MORELA BAJO OTRO CENITAL.
MORAVIA.- Yo se lo dije… que nos quedáramos, que no subiéramos a la catarata, pero nada… definitivamente nadie puede cambiar su destino.
CORCHO.- Hay mentiras que se convierten en verdades… y hay verdades que aparecen a través de las mentiras que vamos dibujando creyendo que somos grandes estrategas… qué asco…
EN UN PARAJE DEL CAMINO. LLEGA MORELA CON FERNANDO., NO SE DAN CUENTA QUE HUBO ALGUIEN ANTES QUE ELLOS EN EL LUGAR. SE DETIENEN.
MORELA.- A que no me alcanzas…
FERNANDO.- No corras… No es necesario…
MORELA.- Eres un flojo.
FERNANDO.- No… es que me gusta disfrutar de la naturaleza con calmita… no te vayas…
MORELA.- Si me alcanzas…
FERNANDO.- Está bien confieso… me duele aún el morado que me hizo Euri
MORELA.- Confesión aceptada como justificación….
FERNANDO VA A SEGUIRLA PERO PREFIERE QUEDARSE Y LLEGA CARLITOS CANSADO Y SE SIENTA A SU LADO A VER EL HORIZONTE.
MORELA.- ¿Todavía te gusta Euri?
FERNANDO.- no; creo que nunca me gustó realmente… lo que pasó es que era tan impulsiva que me gustó por un instante y ella lo confundió.
MORELA.- ¿Te pegó porque no la querías?
FERNANDO.- Me pegó porque me quería pegar y no sabía cómo hacer para que le prestara atención… ¿Por qué lo preguntas? ¿Tú me pegarías?
ARTICULACIÓN
X
PREMONICIÓN
LOS MUCHACHOS SE DETIENEN CANSADOS ANTE UN PASADIZO EN LA CIMA. MORELA SIENTE COMO UNA CORAZONADA Y SE PONE NERVIOSA.
MORELA.- Dicen que es la curva peligrosa… ¿Dónde estará Fer…? El venía detrás de mí…
CATIRE.- Segurito que está con el patico… ayudándolo a subir… por el culito
ZORAIDA.- Respeta a mi primo, Catire.
CATIRE.- No sé cómo va a hacer para pasar por ahí… porque eso está alto de más.
ARQUÍMEDES.- No pasa de ahí… y mejor, así él está seguro y nosotros solitos…
CATIRE.- Porque quien se atreve a subir puede caerse…
ZORAIDA.- Yo como que llego hasta aquí
MORAVIA.- Y yo… (SE RÍE)
MORELA.- Yo no… yo no llegué hasta aquí para devolverme… Yo me moneo hasta el otro lado como que me llamo Morela… Y con o sin Fer…
ARQUÍMEDES.- Así me gustan las hembras… Decididas..
CATIRE.- Lástima que esté tan enamorada de Mister experiencia…
ARQUIMEDES.- Ese chamo debe ser de un aburrido…
CATIRE.- ¿Y de aquello?
ARQUÍMEDES.- No sé, pero no tiene cara de estar muy contenta y mucho menos satisfecha.
ZORAIDA.- ¡¡Arquímedes!! ¡O respetas a Morela o me devuelvo inmediatamente para mi casa!
ARQUÍMEDES.- Tranquila… que quería hacerle un cumplido, nada más…
ZORAIDA.- Abusador.
COMIENZAN A SUBIR. ZORAIDA, ARQUÍMEDES Y MORAVIA VAN DE ÚLTIMOS.

ARTICULACIÓN.

XI
SINCERIDAD.
CARLITOS Y FERNANDO SIGUEN VIENDO EL HORIZONTE.
FERNANDO.- Allá está el bloque… ¿Lo ves?
CARLITOS.- Sí… y allá esta el abasto y la escuela… y el club de danza…
FERNANDO.- Se ven chiquiticos y eso que no estamos todavía tan altos…
CARLITOS.- Fernando…
FERNANDO.- ¿Sí?
CARLITOS.- ¿Tú crees que en verdad sea malo?
FERNANDO.- ¿A qué te refieres, carajito?
CARLITOS.- A eso… A mí… ¿Crees que yo sea marico?
FERNANDO.- Bueno, eres muy amanerado, pero todavía eres muy chamo y eso se te va a quitar con el tiempo…
CARLITOS.- ¿Y si fuera verdad?
FERNANDO.- ¿Qué? ¿Qué eres pato?
CARLITOS.- Umjú… si fuera verdad…
FERNANDO.- ¿Y lo eres?
CARLITOS.- No lo sé… Pero a mí no me gusta nadie en este momento… ni las niñas ni los niños… todos me huelen a restos de lápiz rayado en el sacapunta… pero es que ese pajúo me ha echado tanta viana con lo de marico y se mete tanto conmigo que me estoy preguntando si es que lo soy y no me he dado cuenta.(LLORA)
FERNANDO.- Pero no tienes por qué llorar…
CARLITOS.- No estoy llorando…es… la alergia
FERNANDO.- ¿Y qué pasaría si te das cuenta que te gustan los chamos y no las chamas?
CARLITOS.- Tremendo coñazo para mi tía…En el orfanato había un chamito que se dejaba coger por los otros… y a mí me daba asco… Mi pobre tía…
FERNANDO.- ¿Por qué ella no va a dejar de ser tu tía porque te gusten las cosas de otra manera?
CARLITOS.- ¿Tú estás muy claro en eso, verdad?
FERNANDO.- ¿En qué?
CARLITOS.- En que cada quien debe ser feliz siendo como es…
FERNANDO.- Lo tuve que vivir con un primo… que yo quiero mucho… pero desde chamo era muy hembrita… y mi tía decía que era que él era un muchacho serio y decente y por eso no decía groserías ni se reunía con todo el mundo… y lo fue anulando progresivamente como varón para convertirlo en otra hijita más... hasta que pasó lo que iba a pasar… lo encontraron clavadísimo con un compañerito, en su propia cama; su mamá no se dio cuenta porque tenían una canción del Rey King a todo volumen Epitafio y cuando entró al cuarto a llevarles unos dulcitos y café… ¡Sorpresa!
CARLITOS.- ¿Será que Dios se olvida de los maricos?
FERNANDO.- ¿Qué tiene que ver Dios en todo eso?
CARLITOS.- Como siempre dicen que es castigo de Dios.
FERNANDO.- No seas guebón Carlitos… Dios tiene que querernos por igual… si no, no es Dios
CARLITOS.- Es verdad… soy sendo pajúo… ¿sabes? Yo sí creo saber quien soy.
FERNANDO.- ¿A dónde vas?
CARLITOS.- A seguir a los muchachos… no quiero que le pase nada malo a mi prima… ni que se deje meter mano de más por ese sucio.
FERNANDO.- Carlitos…
CARLITOS.- ¿Sí…?
FERNANDO.- ¿Eres marico?
CARLITOS.- No; ojala que no; porque entonces me gustaría que tú me cojieras…
SILENCIO PROSEGUIDO DE ESTALLIDO DE RISAS.
FERNANDO.- ¿Cómo es la vaina?
CARLITOS.- Nada… paja… voy a buscar a los muchachos…
SE ESCUCHA UN GRITO DESGARRADO DE ZORAIDA.
ZORAIDA.- ¡¡Agghhh!!
TODOS:- ¡¡Zoraidaaa!!
CARLITOS.- ¡¡¡Te lo dije!!!
FERNANDO.- ¡¡Espérame, carajito…!!
CARLITOS.- ¡¡Prima…!!
SALEN CORRIENDO. ARTICULACIÓN.
X
URGENCIA
TIRADOS EN EL PISO SIN SENTIDO Y AMARRADOS, ESTAN ARQUÍMEDES Y CATIRE Y LAS MUCHACHAS –MORELA, MORAVIA Y ZORAIDA- ESTÁN ATERRORIZADAS ANTE LA AMENAZA DE GAVILÁN, CORCHO Y CACIQUE. LAS TIENEN ARRINCONADAS CUCHILLOS EN MANO. ADEMÁS ZORAIDA SE HA CAIDO Y SE SOBA.
ZORAIDA.- ¡Ahora sí; me va a salir un morado!
MORAVIA.- Mira Cacique, por toda la venta de caballos que te hice y ganaron y no me diste propina ni nada, dile a este pajarraco que se me quite de encima y deje la sobadera, porque no quiero problemas…
CORCHO.- Esa tipa si revira…en cambio esta morenita linda esta calladita.
MORELA.- Es… es q... que no… pu pu…
GAVILAN.- Te jodiste Corcho… se va a hacer pupo…
MORELA.- Nono… es queque… no no pupuelo…(LLORA) Mamáááá…
ZORAIDA.- Déjenla… no ven que no puede hablar de lo nerviosa que está.
CACIQUE.- Y tú… muy valiente…
ZORAIDA.- ¿Qué piensan hacer? ¿Matarnos? No tienen cara…
CACIQUE.- Bueno, ya liquidamos a estos dos pajarracos… que me impedían estar contigo… Y aunque es familia del Corcho… se puso en el medio y le dimos su quieto.
LOS OTROS DOS LO CELEBRAN.
ZORAIDA.- ¿Y entonces? Ay, sí… les pegaron y se desmayaron… gran cosota… qué chiste…
MORAVIA.- Cacique, me está pasando el cuchillo por el brazo y me va a cortar…
CACIQUE.- Es que está enamorado de ti… y él cree que eres como las gatas… que hay que morderlas para poder amarlas…
RISOTADAS. LAS MUCHACHAS SEPARAN A LOS MALANDROS A EMPUJONES Y COMIENZA UNA ESPECIE DE COREOGRAFÍA EN LAS QUE ELLOS INTENTAN VIOLARLAS Y ELLAS LOS MANTIENEN A RAYA, HASTA QUE LOS GOLPEAN EN LOS SEXOS Y LOGRAN HUIR CADA UNA POR SU LADO.
ZORAIDA.- ¡¡Corran muchachas, por sus vidas y sus honras!!
MORAVIA LO PIENSA Y LUEGO ARRANCA A CORRER. LOS MALANDROS SE RECUPERAN Y SALEN TRAS DE ELLAS MUERTOS DE LA RISA COMO SI FUERA UNA INVITACIÓN INFERNAL. FERNANDO SE HACE PRESENTE Y DESATA A LOS MUCHACHOS MIENTRAS CARLITOS LE SACA LA PISTOLA A ARQUÍMEDES Y CON UN PALO EN LA MANO CORRE DETRAS DE CACIQUE QUE SE HA IDO DETRÁS DE SU PRIMA ZORAIDA.
CARLITOS.- ¡¡Zoraida, Cuidado!! ¡¡Voy a matarlos!!
SALE COMO UNA FIERA.
FERNANDO.- ¡¡Carlitos!! ¡¡Carlos!! ¡Coño, se fue solo! ¡¡Vamos despiértense y ayuden! ¡¡Que se van a violar a las gevitas, coño…!! ¡¡Catire!! ¡¡Arquímedes!!
ARQUIMEDES.- ¿Qué paso, viejo? ¡¡Me duele el coco!!
LOS GRITOS DE LAS MUCHACHAS SE HACEN MÁS LEJANOS.
MORELA, MORAVIA Y ZORAIDA.
FERNANDO ¡¡Chola, que violan a las chamas!!
CATIRE.-¡¡Coño!! ¡¿Quién me dio ese coñozote en la cabeza?!
FERNANDO.-Los mismos que están siguiendo a las chamas para violarlas… así que a moverse!!
ARQUÍMEDES.- ¡¡LA CHAMA!! ¡¡Mi geva!! ¡¡Zoraaa!!
LOS MUCHACHOS AÚN ATURDIDOS CORREN DETRÁS DE FERNANDO.

ARTICULACIÓN.











XI
NINGÚN HOMBRE HACE EL MAL POR PROPIA VOLUNTAD
BAJO UN CENIT CARLITOS.

CARLITOS.- Yo no quise… pero pasó…Estaba amenazando a mi prima con un puñal, obligándola a que se quitara la ropita que traía puesta. Fue allí donde yo comprendí que ningún hombre hace mal por voluntad propia… yo no lo hice… Yo estaba ciego…
VEMOS LA ESCENA EN LA PUNTA DE UN BARRANCO QUE DEJA MIRAR LA URBANIZACIÓN.
CACIQUE.- Vamos baby, ve quitándote el trapito ese que tienes cubriéndote las teticas.
ZORAIDA.- No; por favor…
CACIQUER.- ¡Qué rica te ves!
ZORAIDA.- ¡Cuidado con lo que vas a hacer, sádico asqueroso!!
CACIQUE.- Te vas a ver bien fea si te pones bruta y se me va este puñal que tengo reservado para un corpacho como el tuyo…
ZORAIDA.- (AGARRANDO UN PEÑÓN) Le dije que me dejara en paz o…
CACIQUE.- ¿O qué? ¿Qué me vas a hacer con esa peñona? ¿me vas a pegar?
ZORAIDA.- Déjame en paz, Cacique.
CACIQUE.- Qué bonito se escucha cuando dices mi nombre…
ZORAIDA.- Cacique, por favor… Somos vecinos, chico… respeta eso por lo menos…
CACIQUE.- Por eso mismo… el material bueno de la zona lo pruebo primero yo… Y yo te tengo ganas desde hace rato… porque hace rato decidí que eras mía… y el pajúo del novio que tienes lo que estaba haciendo era cuidándote para mí… ¡ñau!
ZORAIDA.- ¡¡No te me acerques!!
CACIQUE.- (LASCIVO) ¡¡Ñau! ¡Ñau!
ZORAIDA.- ¡¡Auxilio!! ¡¡mamááá!!
CARLOS.- Cuando él tiró el cuchillo en el piso y se le fue encima a mi prima y terminar de romperle la ropa para desnudarla… yo corrí… como un loco y recogí el cuchillo y se lo clavé…
CARLITOS REALIZA LA ACCIÓN QUE NARRO. POR CADA GOLPE DE CUCHILLO UN GOLPE DE TAMBOR. EL ROSTRO DE CACIQUE SE VA TRANSFORMANDO DE SORPRESA A DOLOR Y MUERTE
ARQUÍMEDES- (OFF)Once veces… once puñaladas…
CATIRE.- (OFF) Once modos de morir… De acabar con el sádico…
CARLITOS.- He podido clavarle muchas más… porque no lo hice consciente… Después saqué la pistola y disparé…
DISPARO.
ZORAIDA.- ¡¡Carlitos, ya!! ¡¡Está muerto!! ¡¡Eres un asesino!!
LE VUELVE A DISPARAR. ZORAIDA HUYE HORRORIZADA.
CARLITOS.- ¿Zoraida? (TRANSICIÓN) Yo sólo quería cumplir con la tarea que me puso mi tía… cuidar y velar por el bienestar de mi prima, que eres tú…
CARLOS LE DA UNA PATADA AL CADAVER DE CACIQUE Y SALE CORRIENDO DETRÁS DE SU PRIMA
CARLITOS.- ¡¡Zoraida!!

ARTICULACIÓN













XII
NINGÚN JUSTO A TIEMPO
MORAVIA Y MORELA CHOCAN DE UN MODO MUY RIDÍCULO MIENTRAS INTENTAN HUIR DE LOS DELINCUENTES QUE QUIEREN VIOLARLAS.
AMBAS.- ¡¡Aghhh!!
MORAVIA.- Chica.
MORELA.- Nos quieren violar… los trogloditas esos.
MORAVIA.- Yo siempre pensé que el día que perdiera la virginidad iba a ser una cosa para no olvidarla nunca… pero no por esto… ¿escuchaste los tiros?
MORELA.- Sí.
MORAVIA.- Fueron de verdad.
MORELA.- ¿A quién le habrán disparado?
MORAVIA.- ¡A quien sería? ¿Por qué esta pasando esto?
MORELA.- Eso nos pasa por no escuchar… yo no sé por que vine a pesar de que Zoraida me contó lo del baúl. Yo no quería pasar por gafa y me hice la que no le creyó… lo juro… yo se lo dije a Fernando… pero no me paró…
MORAVIA.- (AGARRA UN TRONCO QUE PUEDE USAR COMO BATE) Shh…
MORELA.- (POR SEÑAS) ¿Qué pasa?
MORAVIA.- (POR SEÑAS) Por ahí viene…
MORELA.- (POR SEÑAS) ¿Quién…?
MORAVIA.- (POR SEÑAS) El violador… ¡¡Agáchate!!
MORELA SE AGACHA MORAVIA TIRA EL PALAZO
MORAVIA.- ¡¡Aghh!!
Y LE DA A FERNANDO QUIEN CAE SIN SENTIDO.
MORAVIA.- ¡¡Lo maté, lo maté!! ¡¡Justo a tiempo lo maté!!
MORELA.- ¡Sí, pero este es Fernando, pedazo de estúpida!
MORAVIA.- ¡¿Qué?!
MORELA.- ¡¡Mataste a Fernando!!
MORAVIA.- ¡Nooo!!
MORELA.- Sí, así que cállate… Ningún Justo a Tiempo
MORAVIA.- (LLORANDO) ¡¡Lo matééé!!
MORELA.- Vamos a esconderlo ara que no lo consigan a él ni a nosotras…
ARRASTRAN A FERNANDO ENTRE LAS RAMAS. ARTICULACIÓN.
XIII
SUCIEDAD
CATIRE INCONCIENTE CON UNA VENDA EN LOS OJOS Y ARQUÍMEDES LLORANDO TIRADO EN EL PISO CON LOS PANTALONES ABAJO HASTA LA RODILLA Y AMARRADO PÓR LAS MUÑECAS A UNA MATA. CORCHO Y GAVILÁN SE SUBEN ASQUEROSAMENTE LOS CIERRES DE SU PANTALONES.
CORCHO.-¿Oíste el pepazo?
GAVILAN.- Mosca, que no queremos difuntos… lo que queremos en goce… ja.
ARQUÍMEDES.- Ya pana… Tío, yo soy el hijo de tu hermana… ¿Por qué me están haciendo esto si yo soy su pana…?
CORCHO.- Yo se lo advertí a tu madre; que no me echara de su casa porque se lo iba a cobrar con lo que más quería… y eso eres tú, sobrinito.
GAVILÁN.- Además eso es pa’ que aprendas…que con las mujeres del Cacique… No se me te nadie…
ARQUÍMEDES.- pero Zoraida es mi geva desde que somos chamitos… y tú eres mi sangre…
CORCHO.- Peor para ti… Ve al cementerio y acúsame con tu abuela…
GAVILÁN.- Están metido en medio de fuego cruzado…
CORCHO.- además no estás tan mal darle una lección a la familia de vez en cuando…
GAVILÁN.- Tienes un culito pedilón…
CELEBRAN EL COMENTARIO
ARQUÍMEDES.- Coño, mis panas, ya está… ya me hicieron el daño…
GAVILÁN.- Y te quedó el nido picado de pájaro…
ARQUIMEDES.- Que no se entere el pana Catire, ni ninguno de los chamos que anda con nosotros…
GAVILÁN.- ¿Y eso por qué? Si la pasamos tan bien… A ti hasta te gustó… ¿Fue lo que nos dijo, diablo, no?
CORCHO.- Dicho.
ARQUÍMEDES.- No quiero que me señalen… ni que me dejen de respetar…
Gavilán.-Al contrario… a lo mejor ahora te aprenden a querer, pero de otra manera…
ARQUÍMEDES.- Súbanme los pantalones… coño tío….Te lo ruego…
GAVILÁN.- Tiene miedo que dejen de quererlo…
CORCHO.- Tremenda hembrita me salió el sobrino…
ARQUÍMEDES.- ¿Por qué no le hicieron esto al chamo que venía con nosotros? Ese si que es una mami… no yo…
GAVILÁN.- Por eso mismo… porque a ti se te somete… a él a lo mejor se le complace…
CORCHO.- Y nosotros no hacemos gozar…
GAVILÁN.- Nosotros sólo sabemos hacer daño…
ARQUÍMEDES.- Lo sé… pro súbanme el pantalón. Coño…
CORCHO.- A menos que a ti también te esté gustando la vaina
GAVILÁN.- Porque te podemos dar otra pasada, para que nos recuerdes y nos busques cuando nos necesites…
ARQUÍMEDES.- No… no, de pana… está bien… me han hecho full daño… no me sigan jodiendo, por favor… coño… yo soy un varón… súbanme el pantalón… de pana… yo soy un tipo..
CORCHO.- Y nosotros tus machos de ahora en adelante… sobrinito…
ARQUÍMEDES.- Por favor… el pana se va a dar cuenta
CORCHO.- Tranquilo que tu pana no despierta sino hasta el siglo que viene, porque le di bien duro para que se lo llevaran los angelitos un rato…
ARQUÍMEDES.- ¿Lo mataron?
GAVILÁN.- Muerto no está.
CORCHO.- Casi.
GAVILÁN.- Pero dormidito sí…
CORCHO.- Piremos que el mal ya está hecho…
GAVILAN.- Dale. Vamos por el Cacique…
CORCHO.- Sí va. (SE VAN)
ARQUÍMEDES.- Viejos… El pantalón… coño… no me dejen así… súbanme el pantalón… de pana… coño… todos se van a dar cuenta de lo que me hicieron…
UNA IMAGEN HACE QUE LE ROSTRO DE ARQUÍMEDES CAMBIE.
ARQUÍMEDES.- ¿Tú? ¡¿Lo viste todo?!

ARTICULACIÓN
XIV
MORAVIA Y MORELA ASUSTADAS FERNANDO APENAS REACCIONA DEL GOLPE QUE LE DIERON.
MORELA.- ¿Te duele mucho?
FERNANDO.- ¿Qué animal me pego?
MORAVIA.- Fue yo de Brunilda… sin querer.
FERNANDO.- Tenemos que buscar a Zoraida y a Carlos… El chamo se fue armando. Tiene la pistola…
MORELA.- Acabamos de escuchar un disparo.
FERNANDO.- Eso fue ese chamo…
MORAVIA.- seguro aniquiló con sus propias manos a los delincuentes.
FERNANDO.- Ojala no haya cometido una locura.
ZORAIDA.- Pues la cometió.
MORELA Y MORAVIA.- Zora…
FERNANDO.- ¿Te encuentras bien?
ZORAIDA.- Pues no lo sé… estoy viva… y el desgraciado ese no se aprovechó de mí gracias a mi primito… pero Carlitos está vuelto una fiera… Yo salí huyendo, asustada… era como un animal pero que los delincuentes que nos están persiguiendo…
MORELA.- ¿Carlitos?
MORAVIA.- ¿El… niñito?
ZORAIDA.- Ningún niñito…Se comportó como todo un hombre…
FERNANDO.- Cuando escuchó tu grito se volvió como loco y salió corriendo y yo no pude alcanzarlo… y cuando creí que estaba cerca me dieron un palazo y quedé sin sentido…
MORAVIA.- Yo creí que era uno de los sádicos…
MORAVIA.- ¿Y tú dejaste al chamo con uno de los malandros?
ZORAIDA.- Pero ahora lamento haberlo dejado solo… Y cuando regresé a buscarlo ya no estaba… ni él, ni el cuerpo del Cacique…
MORELA.- ¿Cómo que el cuerpo del Cacique?
MORAVIA.- Ay, mamita, a nosotros como que nos van a dar bollo…
FERNANDO.- Ya va… barájala más lento… ¿Qué paso?
ZORAIDA.- Carlitos me salvó de las manos del Cacique… y yo he debido quedarme ayudando a mi primo… El no tuvo la culpa… La culpa fue mía por no escuchar a la voz del baúl..
MORELA.- Eso mismo dije yo…
MORAVIA.- Nosotras escuchamos unos plomazos colaos y nos asustamos…
MORELA.- Pensamos que habían matado a los delincuentes…
FERNANDO.- Di que no es verdad lo que estoy pensando.
ZORAIDA.- No puedo... no puedo mentir… Carlitos le dio dos tiros a Cacique y lo mató… después de haberle dado once puñaladas…
MORAVIA.- Jesús, María y José…
MORELA.- ¿Once puñaladas?
ZORAIDA.- Yo las conté…
MORAVIA.- Pero el tipo quedó como un colador… Ahora si que nos fuñimos…
MORELA.- Bien hecho…
ZORAIDA.- No; bien hecho nada…. Porque ahora mi primo va a ir a la cárcel por asesino…
MORAVIA.- Dicen que el que mata una vez, le coge el gustico…
MORELA.- Si no tienes nada mejor que decir cállate, Moravia… Esto no es juego…
MORAVIA.- ¡Qué carácter!
FERNANDO.- Yo sabía que algo así iba a pasar…por eso no quería que ese chamo se quedara con la pistola…
ZORAIDA.- ¿Y qué vamos a hacer para salvar a mi primo? Tenemos que ayudarlo…
FERNANDO.- Lo primero es encontrarlo…
ZORAIDA.- ¡Encontrarlo, sí…
FERNANDO.- Y evitar que cometa otra locura…
MORAVIA.- ¿Qué fastidio!
MORELA- ¿Por qué no se nos ocurrió ir al Ávila, a quebrada Chacaito?
MORAVIA.- No; tuvo que ser aquí… en Caricuao… Perder la inocencia en Pipe…

ARTICULACIÓN.
XV
El Pacto.
CENITAL SOBRE CARLITOS.
CARLOS.- Yo lo vi todo… Venía persiguiendo a Zora, cuando vi lo que los malandros –su propio tío y el Gavilán- le hicieron a Arquímedes… y esperé y hasta sentí lástima del modo en el que lo dejaron tirado así en el piso… y vi a su compañero y creí que estaba muerto, pero lo que estaba era desmayado. Él subió la mirada y supo que yo lo vi mientras lo violaban… me vio aterrorizado, pero no dijo nada hasta que se fueron los delincuentes y me acerqué a desatarlo
ARQUÍMEDES.- ¿Tú?
CARLOS.- …Él sabía que yo había visto lo que le pasó.
ARQUÍMEDES.- Suéltame, chamo que tengo que ir a buscar a mi geva… tu prima…
CARLOS.- (TRANSICIÓN) ¿Te dieron sopa de tu propia cosecha, no?
ARQUÍMEDES.- ¿Qué estas diciendo pedazo de mariquito?
CARLOS.- ¿Marico, yo…?
PAUSA. TERROR EN LOS OJOS DE ARQUÍMEDES.
ARQUÍMEDES.- ¿Qué estás insinuando? Mira que te doy tu coñazo… Desátame de aquí…
CARLOS.- ¿Te subo primero los pantalones o lo haces tú mismo?
ARQUÍMEDES.- No. Tú no. Yo… me los subo solo… desátame…
CARLOS.- Como digas, bebé.
LO MIRA SIN MOVERSE.
ARQUÍMEDES.- ¿Por qué me miras así? No es lo que crees… así que no vayas a decir lo que no es.
CARLITOS.- Lo que no es… o lo que no fue…
ARQUÍMEDES.- Desátame.
CARLOS.- ¿Por eso me tratas así, verdad?
ARQUÍMEDES.- ¿Qué?
CARLOS.- ¿Para esconder lo que te pasa a ti?
ARQUIMEDES.- ¿Que dices muchacho pajúo? Suéltame de esta vaina.
CARLOS.- Digo que no hay nada oculto entre cielo y tierra… ¿Desde Cuándo te hacen eso a ti?
ARQUIMEDES.- Me lo hicieron en contra de mi voluntad.
CARLOS.- ¿Viste?
ARQUÍMEDES.- ¿Ý esto te divierte?... ¡Te divierte, verdad!
CARLOS.- Yo no soy tú… y nunca lo seré… Y te prometo que si me respetas, nadie se va a enterar del modo en el que te encontré con tu tío y el Gavilán.
ARQUÍMEDES.- Yo no quería, pero me amenazaron con matarme…
CARLOS.- Tranquilo.
ARQUÍMEDES.- ¿De pana?
CARLOS.- De caballero, porque yo soy un caballero…
ARQUÍMEDES.- Pero tenemos que joder a esos malditos.
CATIRE.- (DESPERTANDO) Ayy, mi coco… tengo un chichón que se me sale del pelo…
ARQUÍMEDES.- No vayas a…
CARLOS.- Cállate tú… que yo no he abierto la boca.
CATIRE.- ¿Qué pasó, Panita?
ARQUÍMEDES.- Este chamo nos salvó la vida…
CATIRE.- La muchachita…
ARQUÍMEDES.- No lo vuelvas a llamar así… que este chamo es más varón que mucho tipo con bigote.
CATIRE.- Bestia… me dio hasta sed.
CARLOS.- Toma de mi cantimplora
ARQUÍMEDES.- Desde ahora en adelante el chamo Carlos es mi protegido y nuestro pana… ¿entendido?
CATIRE.- Entendíito, pues…
CARLOS.- Vamos a buscar a la prima y a las otras chamas que de seguro están en problemas…
CATIRE.- Sí vamos…
CATIRE SALE ADELANTE. ARQUÍMEDES Y CARLOS CHOCAN LAS PLAMAS Y ARQUIMEDES SALE DETRÁS DE ESTE Y CARLOS QUEDA BAJO UN CENIT DE LUZ.
CARLOS.- Más nunca Arquímedes se metería conmigo… y yo le guardé el secreto para siempre y por toda la vida… hasta ahora…
ARQUÍMEDES.- (OFF) ¡¡Chamos, no te quedes atrás!!
CARLOS.- Voy….
LOS SIGUE.

ARTICULACIÓN.


























XVI
¿DÓNDE ESTÁ CACIQUE?

ZORAIDA DESESPERADA TRATA DE CONVENCER A LOS DEMÁS.
ZORAIDA.- Estaba aquí… El cuerpo muerto del degenerado ese quedó tirado aquí y yo salí corriendo y Carlitos detrás de mí… ¿Y ahora…? ¿Donde esta?
FERNANDO.- A lo mejor lo encontraron sus compañeros y se lo llevaron…
ZORAIDA.- Es que si lo hubieran encontrado ahora estaríamos todos muertos como él… porque esos hombres son unos asesinos…
MORAVIA.- Ay, mixta… cálmate que me está temblando hasta la pepa del ojo… no chica…. Vamos a bajar… vamos a regresar a la casa otras vez… por fa…
MORELA.- Lo mejor es tener paciencia y calma…
FERNANDO.- Así es, porque si no… somos presas fáciles de los delincuentes estos… y tenemos que movernos entre el monte como animales, para que no nos pillen y nos vayan a medio matar.
ZORAIDA.- ¿Entonces me creen?
FERNANADO.- Claro que te creemos… pero ya les dije… hay que hablar bajito y movernos como animales por el monte…
MORELA.- Se escucha un ruido por ahí.
FERNANDO.- ¡Al piso!
TODAS.- Aghhh.
ZORAIDA.- Ay, santísima que sea mi primo con Arquímedes y el Catire.
MORAVIA.- Ahora sí que me voy a graduar de culebra con esta arrastradera…
FERANDO.- ¡Escóndanse donde no las vean!
MORELA.- ¡Donde no nos vean!
MORAVIA Y ZORAIDA.- ¡¡Corran a esconderse!!
FERNANDO SE ESCONDE PERO LAS CHICAS NO LOGRAN HACERLO
CORCHO.- ¿Pa qué se van a esconder si lo que más queremos en verlas, verdad Cacique?
GAVILÁN.- ¡Arriba culebras que aquí está el Gavilán!
CAICIQUE.- Hola baby blue…
ZORAIDA.- El muerto…
CACIQUE.- Un muerto que camina
ZORAIDA.- Fueron once puñaladas… ¡¿cómo esta vivo?!
CACIQUE.- Once puñaladas y dos disparos contra mi chaleco anti-balas.
MORAVIA.- Tiene una suerte la bestia.
MORELA.- O es un extraterrestre.
GAVILÁN.- El jefe es un Rey, mamita.
MORELA.- Respeta.
CORCHO.- Un ser supremo… pero del mal…
CACIQUE.- Tengo Que admitir que me dolió y hasta me dejaron como pocillo’e loco el chaleco, pero hasta ahí, baby.
ZORAIDA.- ¿Qué piensas hacer?
CACIQUE.- Como no está tu primito, del que me voy a encargar en cualquier momento… Estoy listo para ti… como nuevo...
ZORAIDA.- ¡¡Mamááá!!
MORAVIA.- A relajarse, chicas…
CACIQUE.- Compadres… cada oveja con su pareja…
GAVILAN.- ¡Yahuja!
CORCHO.- Esta la vamos a disfrutar juntos… como en el cine, mi pana…
MORAVIA.- Eso y la cara de Dios, no lo verás nunca…
NERVIOS. TENSIÓN EN LA RESPIRACIÓN DE LOS JÓVENES. LOS DELNCUENTES LE CIERRAN AL PASO A CADA CHICA. CAOS. FERNANDO ESTÁ ESPERANDO PARA ATACAR.
CARLOS.- (OFF) ¡Suéltalas! ¿O te vuelvo a matar, degenerado!
CACIQUE AGARRA A ZORAIDA POR EL CUELLO AHORCÁNDOLA.
CACIQUE.- Si intentas algo ella va a salir perjudicada, cachorro.
CARLOS.- ¡¡Cachorro es el que nunca tendrás!!
SE ESCUCHA UN DISPARO QUE LE DA A CORCHO EN UN HOMBRO.
MUJERES.- Aghhh.
CACIQUE DESCOCERTADO NO SE DA CUENTA QUE ARQUÍMEDES Y EL CATIRE LE DAN CON PALOS POR LA CABEZA DEJÁNDOLO INCONSCIENTE MIENTRAS FERNANDO HACE LO MISMO CON GAVILÁN

ARTICULACIÓN.
XVII
RECONOCIMIENTO

EN LA PLAZA DEL EDIFICIO.
ZORAIDA.- Gracias a la policía pudimos deshacernos de esos tres vándalos.
MORAVIA.- Yo casi me morí del susto.
FERNANDO.- Y estuve detenido hasta que se supo que el Corcho no murió del balazo que le di.
CARLOS.- Que le di yo… y tú y Arquímedes se echaron la culpa…
CATIRE.- Y cuando yo quise echármela también, no me creyeron, me dieron un planazo y me mandaron pa mi casa..
CARLOS.- Ellos son mis héroes.
ARQUÍMEDES.- Y tú el nuestro, chamito.
ZORAIDA.- Al fin lo reconoces
MORELA.- Era lo mínimo que podían hacer después que hiciste todo eso por nosotros.
ARQUÍMEDES.- Te teníamos que defender, chamín… y te vamos a defender siempre.
MORALE.- Pero nadie debe saber nunca que fuiste tú el que disparó…
ZORAIDA.- Yo tengo miedo que los malandros esos lo vayan a coger con Carlitos.
MORAVIA.- Bueno, pero de aquí a que salgan de la prisión no van a recordar ni cómo se llaman…
FERNANDO.- Habían cometido demasiados crímenes… le habían hecho tanto daño que la comunidad se reunió y fueron a apoyar la denuncia en grupo.
ZORAIDA.- Bueno, verdad…
MORELA.- Fernando y yo nos vamos a casar en diciembre, porque descubrí que sí era el hombre justo con el que siempre soñé
ZORAIDA.- Arquímedes y yo decidimos mantener una bonita amistad… pero cada quien por su lado… porque la vida es bella y siempre tiene oportunidades para cada uno de nosotros.
CATIRE.- Y yo quiero anuncia que si ella lo desea estoy dispuesto a enseriarme con Moravia…
MORAVIA.- Amiguis, todo quedo más bueno que ni pintado.
ZORAIDA.- Como dijo el baúl: Todos corrimos riesgos de muerte… y a lo mejor… de algún modo lo hicimos… morimos un poco… porque dejar la niñez es como morirse un poco… porque hoy veo que todos cambiamos..
ARQUÍMEDES.- Cambiamos nosotros, pero dudo que los delincuentes eso hayan cambiado…
FERNANDO.- Vamos a olvidarnos de ellos para siempre.
TODOS.- Para siempre.
ZORAIDA.- (DULCE)Yo tengo que darle las gracias a mi primo porque él no me dejó sola y por eso estamos vivos y juntos…
FERNANDO.- Y crecimos… Los invito a mi casa a escuchar música y a prepararnos una merienda para celebrar…
CATIRE.- El último se vuelve piedra y le toca lavar los platos…
TODOS.- Vamos.
ARQUÍMEDES QUEDA SOLO BAJO UN CENITAL.
ARQUÍMEDES.- Así fue… Así se me cambió la vida… es decir, se nos cambió la vida. De otro modo no lo hubiera hecho y hubiera pasado toda la vida torturando al chamito…
CARLOS REGRESA A BUSCARLO.
CARLOS.- Tipo, te estamos esperando… porque no queremos pensar que te perdiste en Pipe.
ARQUÍMEDES.- Voy…
CARLITOS SE VA CON LOS OTROS.
ARQUÍMEDES.- ¿qué fue lo que perdimos en Pipe? No estoy muy seguro… pero dejamos de ser unos niños a partir de ese momento y ya nunca más vimos la vida con tanto desgano… aprendimos a querer cada instante de nuestra existencia, a luchar por lo que queremos y a no acusar y atormentar a los otros por lo que nos atormenta en secreto… Eso fue lo que perdimos en Pipe…
Fin
SACVEN 3669
10-04-2008.

UN AMOR COMO DE WALT DISNEY

I
La llegada de Renato y Saúl.


LA LLEGADA DEL PÚBLICO DESCUBRIMOS UN ESPACIO QUE PRETENDE IMITAR EL INTERIOR DE UNA MODESTA CASA DE LA PASTORA. NO HAY PAREDES, TODO ESTA DELIMITADO POR UNA ESPECIE DE TIRRO QUE PRETENDE INDICAR EL INTERIOR (SALA COMEDOR DE LA CASA)Y EL EXTERIOR (TEATRO) ORDENANDO EL ESPACIO. SE ESCUCHA LA MUSICA CON LA QUE SE INICIAN TODAS LAS PELICULAS PRODUCIDAS POR WALT DISNEY (LA ESTRELLA AZUL DEL FILM PINOCHO). APARECE UN NIÑO, VESTIDO GRACIOSAMENTE COMO EL FAMOSO PERSONAJE PEPE GRILLO.
NARRADOR.- Desde el mundo de la ilusión y la Fantasía “Un amor como de Walt Disney” (Pausa) Caracas, 1960. Casa de techos rojos del Boulevard Penichez, en El Silencio. Es el hogar de Ugueta Meneses. Pocos Muebles, pero arreglados con un particular gusto femenino. Una Puerta. Una ventana. Una mesita con algunas fotografías de Alfredo, Maria Eugenia, su pequeño hijo, Ugueta con un hombre y una niña (su esposo y su hija), y H.E. y Chaurita con su pequeño hijo. Este espectáculo ha sido patrocinado gracias a la colaboración de: (Nombra patrocinantes. Va hasta su lugar a un lado del escenario e inicia las acciones que se verán en la pieza). La Puerta se abre lentamente y aparece una imponente figura masculina. Es Renato Meneses, el primogénito de Alfredo y Maria Eugenia. Viene llegando de Timotes a la casa de su tía Ugueta. Deja su equipaje en el centro del escenario como años atrás lo hizo su tía Ugueta cuando llegaba a Timotes con su madre.
RENE.- ¡Por fin llegué!¡Pasa!
NARRADOR.-Entra el tímido Saúl Villarino, hijo de Chaura y Hector Enrique.
SAUL.-¿Aquí?
RENE.- Esta es la dirección que me indico Papá en esta tarjeta de presentación.
NARRADOR.-Saúl mira la casa. Descubre las fotografías.
SAUL.-Sí, aquí es. Este es Don Alfredo y Doña Maria Eugenia, esta debe ser la señora Ugueta con una familia y aquí hasta estamos papá, mamá y yo chiquitico.
RENE.- Es cierto. Entonces sí, es aquí. Por fin salimos de ese pueblo.
SAUL.- No seas ingrato. En ese pueblo nacimos y allá se quedaron nuestros padres.
RENE.- Pero tía Ugueta está aquí, en Caracas, en la capital, en la civilización y la cultura. “Lo demás es monte y culebra”.
SAUL.- Sin embargo Penichez no me parece parte de la civilización, y si lo es no será de la parte de adelante, porque queda detrás de los bloques de El Silencio.
NARRADOR.- Renato, también conocido como René, haciando caso omiso al comentario del amigo.
RENE.- Yo sé que tía Ugueta nos va a tratar muy bien.
SAUL.-¿Dónde estará? ¿Por qué nadie habrá salido a saludarnos?
RENE.- Seguro estará en la calle, codeándose con lo último en información, con la actualidad, con la moda.
SAUL.- ¿Y si es que no nos quiere recibir? ¿Si no nos trata como esperamos?
RENE.- Somos bien jóvenes y tenemos suficiente vigor y energía. Estamos como de comercial ¿Sí o no? Si nos trata mal podemos irnos con nuestra música a otra parte.
SAUL.- Eso no deja de preocuparme.
RENE.- Yo no le tengo miedo a la vida ni al trabajo
SAUL.- Ni yo, pero...
RENE.-Con dinero puedes comprar lo que se te antoje...Tú y yo nos vinimos a hacer fortuna...Y si la tía se pone fastidiosa volamos a otro cielo y ya.
SAUL.- Eso quería escuchar...Yo no quiero volverme a Timotes porque allá esta la bandola que me hace mal.
RENE.- No vayas a empezar con ese pasodoble otra vez... Rosa se va a arrepentir de haberse casado con Chucho el de la cochinera... Tengo que verla pidiéndote perdón.
SAUL.-Renato Meneses, yo no quiero mencionar más a Rosa Higuera de Secas. Te agradezco que no la nombres en mi presencia nunca más...Me hace mucho daño.
RENE.- Lo siento.
SAUL.- Yo también. Hablemos de otra cosa.
RENE.-Tengo hambre.
SAUL.- ¡Qué raro!
RENE.- El viaje me abrió el apetito
SAUL.- Debo confesar que a mí también.
RENE.- Cuando pasamos por el final de la subida vi que al lado del banco hay un Hotel que llaman Presidente y venden un plato de espaguetis por cinco bolívares.
SAUL.-¡Por cinco Bolívares!¡Estás loco!
RENE.- En este momento pagaría hasta cien, con tal de quitarme esta sensación de vacío doloroso en mi estómago.
SAUL.- Ni porque tuvieran diamantes. Dos bolívares y va bien.
RENE.- Estás en Caracas.
SAUL.-¿Y qué?
RENE.- Aquí todo es más caro.
SAUL.-¡Qué va! Te propongo una cosa: cuando veníamos vi unos lugares en los que servían barato. Vamos a darnos una “vueltecilla” de Amgelitos a Jesús.
RENE.- Pero si son solamente tres bolívares.
SAUL.- Queremos ser millonarios.
RENE.- ¿Y por eso debo pasar hambre?
SAUL.- Hazme caso o pagas tú.
RENE.- Me haz convencido Saúl.¡Qué persuasivo! Vamos, de Angelitos a Jesús.
NARRADOR.- Saúl -refiriéndose a las maletas-.
SAUL.-¿Y esto?
RENE.-Vamos a dejarlo ahí mismo. Así la tía va saber que llegamos, si llegas antes de nosotros.
SAUL.- Vamos.
NARRADOR.-Hacen mutis. De una de las puertas que da hacia una habitación aparece una linda jovencita. Es Milagros Chaffarder Meneses, la hija secreta de Ugueta. Con mucha precaución verifica que los jóvenes no permanezcan en la casa y regresa para informar a su madre.
MILAGROS.- ¡Ya se fueron, mamá!
NARRADOR.- Aparece Ugueta Meneses, hoy viuda de Chaffarder. Viene muy perturbada con su traje oscuro, su abanico y su pañuelito azul.
UGUETA.-¿Salieron?
MILAGROS.- Parece que desfallecían de hambre.
UGUETA.- Esto me da algunos minutos para que podamos hablar.
MILAGROS.- Habla, madre.
UGUETA.- Hija, me siento tan avergonzada. No sé qué debo hacer en este caso.
MILAGROS.-No es necesario que ocultes la verdad, madre.
UGUETA.-¡Qué va a decir mi hermano Alfredo y M.E., cuando se enteren de esta terrible realidad
NARRADOR.- Lloran. Con Murine también nuestras actrices tienen ese llanto como de Walt Disney.
MILAGROS.- Me haces sentir muy mal, madre...
UGUETA.-No; hija de mis amores...si tú me entendieras.
MILAGROS.- Yo te entiendo madre. Yo también soy una mujer.
UGUETA.- No puedo dejarte de ver como una niña.
MILAGROS.-¿Mamá, tú amaste a mi padre?
UGUETA.-Como una desquiciada. Fue un amor tumultuoso, tórrido, repentino. Como se aman solamente los desesperados...Los locos. Fue, quizás, como una premonición, que lo presentí...Sin conciencia supe que la tragedia nos circundaba, de un modo inexplicable...¿Qué pasó? No lo sé. Un día amaneció y él no se movió, no se despertó más...Estaba dormido. Y con su sueño se llevó mi vida, mi amor y me quedé sola, en silencio, desconcertada, en silencio y contigo en mi vientre de tan solo dos meses.
MILAGROS.- ¿Cuánto tiempo estuviste con papá?
UGUETA.- Fue un amor a primera vista que sólo duró tres meses, como si la vida le hubiera dado ese último regalo. Nadie se enteró. No puedo decir que fue un secreto, porque no lo oculté jamás. Pero como nunca pude mencionarlo a los míos, porque Timotes queda muy lejos, ellos deben creer que sigo siendo una solterona ridícula.
MILAGROS.-Ocultaste mi nacimiento.
UGUETA.- No, hija, no lo oculté. Solamente no lo mencioné y ellos no se preocuparon por preguntarme. Al principio me sentí desleal hacia ti, pero poco a poco me fui acostumbrando a ese hueco mudo entre ellos y tú, y que me hacía esperar con desesperación que esto pasara .
MILAGROS.- Ahora ha llegado el hijo de tío Alfredo y tía M.E.
UGUETA.- Lo sé.
MILAGROS.- ¿Quién es su acompañante?
NARRADOR.- Ugueta le muestra la foto de los Villarino.
UGUETA.—Es él. Se llama Saúl, el hijo de Chaurita y H.E.
MILAGROS.- O sea que es también como tu sobrino.
UGUETA.- Creo.
MILAGROS.- ¿Qué piensas hacer, mamá?
UGUETA.- Asumir las cosas. Tú eres mi hija, mi vida. El fruto de mi única oportunidad con el amor verdadero y no voy a ocultarlo.
MILAGROS.-Madre. Pensé que iba a morir de dolor.
UGUETA.-¿Dolor?
MILAGROS.- Pensé que me negarías.
UGUETA.-Hija, yo te amo.
MILAGROS.- Y yo a ti mamá.
NARRADOR.- Tocan la puerta.
UGUETA.- ¿Quién será? Abre. Seguro son los muchachos. Yo voy a retocarme a mi cuarto.
NARRADOR.-Ugueta se dirige a su cuarto y Milagros abre. Es Coromoto Hernández, la hija de El Pollo, el verdulero. Viene a “curiosear” y a informarse de las últimas noticias.
MILAGROS.- ¡Coro!
COROMOTO.-¡Mili!
MILAGROS.-¿Y esa sorpresa?
COROMOTO.-Eres una egoista. ¿Tú crees que yo no vi esas cosas que llegaron a esta casa?
MILAGROS.-¿Cosa?
COROMOTO.-Me sentí, en un momento, como en el infierno, porque los dos dejan fuego por donde pasan.
MILAGROS.- No seas tan frasquitera, Coromoto.
COROMOTO.- Frasquitera y refistolera si te da la gana, pero yo no quedo sin por lo menos tocarles las manotas a esos muchachones ¿Cómo se llaman?¿Para dónde salieron?¿Dónde van a dormir?¿A qué se dedican?¿Van a estar mucho tiempo en esta casa?¡Habla mujer que me angustia tu “evasividad”!
NARRADOR.-Pausa.
MILAGROS.- Es mi primo Renato y su amigo Saúl.
COROMOTO.-¿Por qué habré escuchado campanitas de cristal?
MILAGROS.- Porque está de moda, boba.
COROMOTO.-¿Y cuándo me vas a presentar a esas “melcochas”?
MILAGROS.- Creo que no se va a poder.
COROMOTO.-Si Betancourt derrocó a Perez Jiménez, aquí todo se puede, ingrata.
MILAGRO.- No se debe a mi voluntad.
COROMOTO.-Explícame.
MILAGROS.-Ellos desconocen mi existencia
COROMOTO.- ¿Qué?
MILAGROS.- Hoy, después de dieciocho años, el secreto va a develarse y yo voy a ser presentada en familia, si puede llamarse así.
COROMOTO.-¿Y tu madre?
MILAGROS.- Arreglándose para el acontecimiento.
COROMOTO.- Entonces el mangazo no te conoce.
MILAGROS.- Ni yo a él.
NARRADOR.- Coromoto tiene una idea.
COROMOTO.-Milagros, distrae a doña Ugueta, mientras yo arreglo algunas cosas para divertirnos un poco mientrs conocemos a tus invitados. Una ocasión ideal para demostrar quién es el sexo más inteligente. A lo mejor y hasta llegamos a ser presidentas de la República.
MILAGROS.- ¿Qué vas a inventar, Coro?
COROMOTO.- ¿Qué “vamos” a inventar Mili? ¿Qué vamos a inventar?
Narrador.- Oscuro. Final del primer cuadro de “Un amor como de Walt Disney”.

Un amor como de Walt Disney.
Autor: César Eduardo Rojas Márquez.

II
UN TIRO POR LA CULATA.

NARRADOR.- Segundo cuadro de “Un amor como de Walt Disney”. Horas después. Ugueta sale de su habita-ción y se encuentra con Milagros y Coromoto. Las jóvenes se notan muy nerviosas y Ugueta finge no notar la intranquilidad.
UGUETA.- ¿Aún no regresan los muchachos?
MILAGROS.-Que raro.
COROMOTO.-¿Será que se perideron?
UGUETA.-No creo. René es hijo de Alfredo y Maria Eugenia.
COROMOTO.-¿Y qué con eso?
UGUETA.-Mi hermano es un hombre de mundo, querida. Anduvo por Europa diez años y no se perdió jamás.
COROMOTO.- Pero su mamá, no salió casi nunca de Caracas y casi se pierde con papá.
UGUETA.- Igualada. Ese señor que llaman El Pollo y que es tu padre, no le da ni por las medias a mi hermano Alfredo.
NARRADOR.- Ugueta va a hacer mutis muy molesta.
MILAGROS.- ¿Para dónde vas mamá?
UGUETA.- A la iglesia. A pedirle un consejo al Señor.
COROMOTO.- ¿Sobre qué, si puede saberse?
UGUETA.-Milagritos, hija, tú amiga Coromotico sabe que detesto a la gente curiosa.
COROMOTO.- ¿Y entonces por qué habla incompleto frente a la curiosa? Eso es morbosidad.
UGUETA.-Descarada. No la soporto. Espero que cuando regrese mi casa esté despejada de vecinos impertinentes.
MILAGROS.- Ve tranquila, mamá.
COROMOTO.-Ojalá pueda conseguir en algún lado la tranquilidad que anda buscando.
MILAGROS.-¡Coromoto, respeta a mi mamá!
NARRADOR.- Ugueta parte indignada y se asoma a escuchar por la ventana. Milagros mantiene la actitud molesta hasta que sale la madre. De pronto comienzan a reir de un modo extraño y comienzan a ponerse atuendos utilizados por las sirvientas de las casas de gente de buena posición. Las muchachas comienzan a hablar como gente muy inculta. Música.
COROMOTO.- Este trabajo de silvienta me va a permitil conocel mejor a los muchachones.
MILAGROS.-Tenemos que sabel que’s lo que plefieren comel, porque si no no voy a sabel que debe una cocinal.
COROMOTO.- ¿Llevamos el equipaje a la habitación?
MILAGROS.-¡Ni muelta! Las camas están hechas y y las habitaciones limpias. Pero calgal maletas jamás.
COROMOTO.- Vas a tener que pelar y picar papas igual.
MILAGROS.- Por un tiempo y sin que se entere mamá.
NARRADOR.- Coromoto, cierra. la ventana y le habla con más tranquilidad a Coromoto. Ugueta no puede seguir espiando y decide irse del lugar.
MILAGROS.-¿Por qué no nos cambiamos los nombres?
COROMOTO.-¿Cambiarnos los nombres?¿Y para qué?
MILAGROS.- Para que no nos reconozcan, boba, como en las radionovelas.
COROMOTO.- ¡Ah! ¡Bueno sí!
MILAGROS.- Tú eres Mili, que es diminutivo de Milagros, que es mi nombre.
COROMOTO.- Y tú Corito, que es Coromoto pero chiquito.
MILAGROS.- Así nos cuidamos en salud, por si acaso
COROMOTO.- Sí, señorita. ¿Hoy que se come en esta casa?
MILAGROS.- Pabellón criollo con barandas.
COROMOTO.-¡Qué bueno, porque tengo una hambruna!
MILAGROS.- Las criadas comen de últinmo, si queda comida de la que se les sirve a los señores. O se cocinan aparte.
COROMOTO.- ¡Qué desdicha! Esclava y muelta de hambre. Ojalá algún galán se apiade de mi sufirimiento.
Puede dalme una curumbeta o un PTT ¿Con que fuelza voy a pasal coleto?¿Cómo voy a podel arreglal el cualto a los jóvenes?
NARRADOR.- Y finge llorar. Milagros finge que se conmueve. Con Murine nuestras actrices tienen llanto de heroinas. Si quiere llorar, Murine en su hogar.
MILAGROS.-Me convenciste, mujel.
COROMOTO.- ¿Una pitanza por lo menos?
MILAGROS.- No dije eso. Dije que me convenciste.
COROMOTO.- Esclavista. Nazi.
MILAGROS.- Lo que quieras...Aunque si me ayudas a terminal de arreglal la comida a lo mejol me apiado.
COROMOTO.- Es que hay que recibil a los rorines como se merecen.
NARRADOR.- Hacen mutis hacia la cocina. De pronto y con mucha cautela Ugueta regresa al interior de la casa.
UGUETA.- Con que esa tenemos. Se van a llevar una sorprecita. Sólo tengo que interceptar a los muchachos antes de que las zafias los vean. Coromoto quiere ser viva.
Creo que todo va a ser más divertido de lo que ellas esperan.
NARRADOR.- Llegan los muchachos.
RENE.- Buenas.
UGUETA.- Buenas.
SAUL.- Permiso.
UGUETA.-¿Sí?
RENE.-¿Usted es la señora Ugueta Meneses?
UGUETA.- Creo.
SAUL.- Es tu tía, tu mama dijo que era así que iba a te iba a responder.
RENE.- Yo soy Renato, el hijo de Alfredo y M.E., pero puede llamarme René
UGUETA.- Entonces eres mi sobrino. Y si no me equivoco este atractivo mozo debe ser el hijo de H.E. y Chaurita.
SAUL.- Me llaman Saúl.
UGUETA.- ¡Qué gusto tan grande tener hombres tan guapos en esta casa!
RENE.- Gracias, tía Ugueta.
UGUETA.- Puedes llamarme Ugueta. El tía me parece demasiado formal.
RENE.- Como digas.
UGUETA.- Pero ahora no hablemos muy alto.
SAUL.-¿Y eso por qué?
UGUETA.- No quiero que escuchen que ustedes están ya en la casa. René, Saúl, soy una dama en desgracia, una victima y necesito que alguien me de una ayudita para poder deshacerme de un grave problema que tengo.
RENE.- ¿Es muy grave?
UGUETA.- Mucho.
SAUL.- Cuente con nosotros para lo que sea.
UGUETA.- Está bien, pero no hablemos aquí, las causantes de mis problemas podrían aparecer y no me parece conveniente que estén al tanto de lo que les quiero pedir. Porque esto es un gran secreto y todo debe mantenerse así. ¿Está bien?
AMBOS.- Muy bien
NARRADOR.- Hacen mutis, pero antes de salir, Ugueta deja una carta en el umbral de la puerta. Oscuro. Final del segundo cuadro de “Un amor como de Walt Disney”.


Un amor como de Walt Disney.
Autor: César Eduardo Rojas Márquez.
III
EL PELIGRO DE UNA BROMA.

NARRADOR.-Pocos minutos después. Aparecen Milagros y Coromoto, con mucho cuidado. Se les nota asustadas. Salen de la cocina utilizando la escoba como protector.
MILAGROS.- Nada
COROMOTO.- Te aseguro que escuché ruidos en esta sala.
MILAGROS.-¿No será la conciencia que te está traicio-nando?
COROMOTO.-¡Deja la guarandinga, chica!
NARRADOR.- Coromoto descubre la carta que dejó Ugueta.
COROMOTO.- ¡Oh!¡Ah!¡Mira! ¡Un sobre! ¿Es para ti?
NARRADOR.- Milagros se la quita y la revisa.
MILAGROS.- Es de mamá.
COROMOTO.- ¿De doña Ugueta? Pero si ella estaba aquí hace...
MILAGROS.-Vamos a leerla...Yo creo saber que dice el contenido de esta carta.
NARRADOR.- Ugueta aparece y nos narra lo que dice la carta mientras las muchachas la leen.
CONTENIDO DE LA CARTA DE UGUETA.- Querida hija. Milagros, perdona que no haya tenido el valor para
Hablar contigo... para explicarte que es demasiado duro para mí, admitir ante mi sobrino y su amigo, mi desliz con tu padre. Al que seguiré amando hasta el final de la eternidad, cuando nos toque partir del planeta para seguir buscando la felicidad. Es tan duro ser una mujer sola. Ahora quiero escapar, evadirme como una cobarde, ordenar mis ideas y recuperar la confianza que siempre he tenido en mí misma. Necesito cuidados médicos. En estos momentos siento la lengua dormida y mis manos están prácticamente engarrotadas...Voy a case un amigo doctor, para que no tenga que quedarme muda y entumecida por el resto de mi existencia...Y a lo mejor, así, quizás pueda pararme ante el mundo para gritar mi verdad...Aunque no creo que a muchos le importe, porque podrían considerarlo una pasjuatada de un ser débil, noble y doblegada por la fuerza del amor...¡Qué desgraciada soy! Te dejo sola por ahora. En compañía de tu primo y su amigo Saúl y lo único que te pido es que no dejes que se meta en la casa todo el día la moscamuerta hija del Pollo Carlos Hernández, porque si sale con una barriga que sea en otro lado, porque mi casa es de gente decente. Trata de no oirla. Yo sé que tú eres una mujer correcta, sería y que te darás tu puesto ante cualquier dificultad. Te ama y detesto a la metida. Tú madre. Post data: Si la muchachita esa lee esta carta, pues conozco sus inclinaciones, te agradezco que antes de levantar cualquier improperio contra mí piense en su madre, pues le pedí a Santa Marta para que le devuelva a su mamá el doble de lo que desee para mí. Tu mamá Ugueta Meneses viuda de Chaffarder.
NARRADOR.-Ugueta desaparece. Milagro queda golpeada y sorprendida. Coromoto, que había quedado boquia-bierta reacciona.
COROMOTO.-El hado nos ha dado chance. Ahora podemos llevar a cabo nuestro plan sin la interferencia de la bruja, es decir: tu mamita.
MILAGROS.-ahora me parece peligroso. Sobre todo entendiendo que no sabemos cómo son esos muchachos.
COROMOTO.-¡No seas ridícula, mujer!¿Cómo van a ser? Jóvenes, fuertes, viriles, llenos de hormonas y con una idea entre ceja y ceja.
MILAGROS.-¿Cuál?
COROMOTO.-Amar.
MILAGROS.-¿Amar?
COROMOTO.-Pero no nos hagamos ilusiones. Aunque es el mismo verbo el “amar” para las hombres no es lo mismo que para nosotras las mujeres.
MILAGROS.- ¿De verdad?
COROMOTO.- Abre los ojos, chica. Acabamos de subirnos a la montaña Rusa
NARRADOR.- Se escuchan golpes a la puerta.
MILAGROS.- Son ellos.
COROMOTO.-¿Todo preparado?
MILAGROS.- Umjú.
COROMOTO.- ¡Abre!
NARRADOR.-Milagros se dirige a abrir, mientras que Coromoto finge estar muy atareada con la limpieza de la casa. Entra Saúl con un revolver en la mano y trayendo casi a rastras a René, el cual cae desmayado inmediatamente luego de entrar a la casa. Las mujeres se aterrorizan y gritan.
MILAGROS.-¿Qué es esto?
COROMOTO.-¿Quién es usted?
SAUL.-Auxilio...Ayúdenme, por favor. Es una emergencia.
Necesitamos unas vendas. No sé qué le han hecho a mi amigo René. Yo soy Saúl Villarino y este es mi amigo René. Sobrino de la sra. Ugueta. ¿Ustedes deben ser sus sirvientas, verdad?
AMBAS.- Sí.
SAUL.-Llegamos hace pocas horas de Timotes, y el viaje se nos hizo tan largo que llegamos completamente famélicos...
COROMOTO.-¡No diga groserías en esta casa!
MILAGROS.-¡Chica, esa no es una grosería!
COROMOTO.- Yo leí en Selecciones que ellos llamaban a lo suyo de un modo muy parecido.
MILAGROS.-¡Famélico es hambriento!
COROMOTO.-¡Ah!¡Bueno, pero cuidado con una cosa rara!
SAUL.-Renato estaba tan hambriento que decidió que fuéramos a comer en alguna taguara de las que hay de Angelitos a Jesús. La cosa es que nos fuimos, disfrutando del transito y la contaminación caraqueña. Porque allá en Timotes la cosa no es como aquí... y de pronto salió de no sé dónde un hombre como de dos metros y medio, y le clavo una inyectadora a René.
COROMOTO.-Mire, espere un momento ¿quién es Renato?
SAUL.-El.
COROMOTO.-¿Y René?
SAUL.-El.
COROMOTO.-Hágame el favor y lo llama por un solo nombre, porque con esa cambiadera de nombres voy a terminar pensando que se tratas como de diez mil hombres, cuando es uno solo.
NARRADOR.-Milagros toma la palabra y Saúl queda prendado de la muchacha mientras que René aprovecha para meterle el ojo a Coromoto.
MILAGROS.-Disculpe.
SAUL.- Lo que usted quiera, joven.
NARRADOR.- Milagros miente.
MILAGROS.- Yo soy Corito.
NARRADOR.- Saúl no lo nota.
SAUL.- Yo Saúl.
MILAGRO.-Que hermoso nombre.
SAUL.-Que hermosos labios.
MILAGROS.-Gracias.
SAUL.- Las suyas que deben ser muchas.
MILAGROS.- Es muy galante.
SAUL.-Créame, yo soy más bien tímido. Estoy perturbado con su presencia.
MILAGROS.-Me pone nerviosa.
SAUL.- Somos dos.
COROMOTO.-No; somos tres.¿Me puedes explicar el numerito, esta niña?
NARRADOR.- Milagros no le presta atención a Coromoto.
COROMOTO.-Caballero, Doña Ugueta es muy estricta con el trato que le damos a los extraños. Mucho más cuando traen consigo un arma que pueda causarle la muerte a cual quiera.
SAUL.- La señora Ugueta entenderá perfectamente que Corito me llame Saúl. Usted puede llamarme Señor Villarino.
NARRADOR.-Saúl va a revisar a René. Coromoto quiere golpear al muchacho, pero Milagros se lo impide.
COROMOTO.-¡Es un imbécil!
MILAGROS.- Es adorable.
NARRADOR.- Saúl escucha el comentario de Milagros y cuando se va a acercar a la muchacha nota que René le está metiendo el ojo a Coromoto. Saúl le da un golpe en la cabeza y lo desmaya.
SAUL.-Deben indicarme la habitación dispuesta para mi amigo. Hay que llevarlo a descansar. No está en condiciones de permanecer sin que lo vea un doctor.
MILAGROS.-Vamos a llamar uno.
SAUL.- Hemos traido a uno. Está parando su carro bajo el samán de Penichez.
COROMOTO.-¿Cómo lo habrán conocido? Porque los doctores a domicilio son carísimos.
SAUL.- Fue casual. El iba llevando a una señora que venía de aquí para su clínica de reposo y nosotros la ayudamos a meterla en su auto y se la llevó. Casualmente, cuando pasó lo del hombre que inyectó a Renté, él venía de regreso y nos auxilió. Hasta nos prestó el arma para auyentar al extraño.
COROMOTO.-¿Y por eso tría esa pistola en la mano?
SAUL.-Por eso mismo.
MILAGROS.-¡Viste!¡Tú siempre de mal pensada!Traígalo por aquí, Saúl.
SAUL.-¡Amigo tu si pesas!
NARRADOR.-Hacen mutis hacia la habitación asignada a los jóvenes. Y entonces hace su magistral entrada Ugueta, vestida como el Dr. Dominguez Sisco. Música.
UGUETA.-¡Ay, hijita, aquí estoy de nuevo y tú nunca vas a saber que soy yo. Vamos a ver quién se lleva una sorpresita!
NARRADOR.- Oscuro. Final del tercer cuadro de “Un amor como de Walt Disney. Escrita y dirigida por su autor director César Rojas. Les narra para ustedes Yo.

Un amor como de Walt Disney.
César eduardo rojas marquez-
IV
Sufrir de amor.
NARRADOR.-Continuamos. Cuadro número cuatro de “Un amor como de Walt Disney”.Ugueta, haciéndose pasar por doctor y en complicidad con los recién llegados, sale de la habitación de Renato, acompañada por las dos muchachas. Viene con un aspecto bastante preocupado.
MILAGROS.-¿Es muy grave?
UGUETA.-Debo tener los resultados de los exámenes. Pero les confieso que estoy muy preocupado. Son los mismos síntomas de una paciente que debido a su cuadro psíquico perdió la posibilidad de hablar y de mover las manos, por lo que se encuentra totalmente incomunicada con el mundo exterior. Como está por ahora el Sr. Renato.
COROMOTO.-¿Cómo es eso?
UGUETA.-La pobre cristiana no puede tener ningún vínculo con el mundo exterior. Por cierto que me dijo que, por lo que pudo medio comunicarme, su familia debe vivir por los alrededores.
COROMOTO.-Por estos lados las mujeres son muy sanas. No hay ninguna que esté enferma.
UGUETA.-Pues le aseguro que esta vive por aquí. Su apellido de soltera es Meneses. Como el del joven Renato.
MILAGROS.-¿Meneses?
UGUETA.-Así es...Y tiene un nombre poco común pero muy adecuado al porte de la mujer.
MILAGROS.- ¿Recuerda el nombre de la mujer?
UGUETA.-En estos momentos creo que no.
MILAGROS.-¿Será Ugueta?
UGUETA.-El mismo. Ugueta. ¡Cómo pude olvidarlo? Ugueta Meneses viuda de Chaffarder.
MILAGROS.-¡Mi madre!
COROMOTO.-¡La bruja!
NARRADOR.-Milagros siente que va a desmayarse, pero su fuerza de voluntad la mantiene de pie.
UGUETA.-Pobre mujer. Tiene los días contados, si no sale pronto de ese estado. Ahora debo regresar al hospital.
MILAGROS.-¡Doctor, la mujer de la que acaba de mencionar es mi madre!
UGUETA.-¿Su madre?
COROMOTO.-Sí, como lo oye, la mamá de esta joven.
UGUETA.-Yo pensé que a nadie de su familia le interesaba el estado de salud de esta señora. La pobre ha sufrido tanto.
MILAGROS.-Doctor, me creería si le digo que yo desconocía totalmente el estado de salud de mi madre.
UGUETA.-Inaudito, pero puedo creerle.
COROMOTO.-No, créale. Esa señora se comporta a veces de un modo extraño...Yo siempre supe que era medio loquita.
MILAGROS.- Doctor, dígame cómo puedo llegar al lugar en el que se encuentra mi madre.
UGUETA.-Bueno, ella no puede recibir visitas en este momento y yo no me dirijo al sanatorio en el que ella se encuentra, pero puedo dejarlas en camino, para que pregunten.
MILAGROS.-Se lo agradecería en el alma.
NARRADOR.-Milagros y Coromoto se quitan el atuendo de sirvientan
UGUETA.-En camino.
NARRADOR.-y hacen mutis con Ugueta. Saúl sale de la habitación. Viene seguido por Renato.
SAUL.- Amigo, estoy locamente enamorado de Cori.
RENE.-¿Cori?
SAUL.-La amiga de tu prima Milagros.
RENE.-Sólo conocimos dos jóvenes que se presentaron como Mili y Cori. Mili es la del picón.
SAUL.-Esa es tu prima.
RENE.-¿Mi prima es Mili?
SAUL.-Muy simple: ¿Diminutivo de Milagros?
RENE.-Supongo que Mili.
SAUL.-¿Diminutivo de Coromoto?
RENE.-Supongo que Cori.
SAUL.-Supones muy bien. Cori, es una chica encantadora.
RENE.-Mucho cuidado, mi llave, no vaya a ser que me vayas a buscar un lío con la tía.
SAUL.-Cuidado tienes que tener tú. Te vi metiéndole el ojo a la primita.
RENE.-No sabía que tenía primita, pero ni repitas que yo le estaba mirando el alma. ¿Tú crees que las muchachas se van a comer el cuento?
SAUL.-En Timotes la realidad y la fantasía son una sola cosa. En Caracas no debe ser muy diferente. Si mi papá dice que tu mamá vuela es porque él la vio.
RENE.-Ese es un cuento, Saúl.
SAUL.-Cuento o no, hoy te toca volar a ti.
RENE.-Eso es como de cine.
SAUL.-Como de cine es lo que me está pasando con Cori. Quiero verle la cara; que me sonría; que me mire con esos ojitos; que me haga sentir como el príncipe que viene a salvarla.
RENE.-Mira, yo nunca te había hablando así.¿Tú como que estás enfermo?
SAUL.-Yo admito que estoy enfermo. De amor.
RENE.-¿Quién será el papá de la susodicha?
SAUL.-¿Quién? El hombre con el que tengo que hablar para que apruebe mi relación con esa muchacha.
RENE.-Dicen que hizo sufrir mucho a mi mamá antes de que conociera a mi padre, que por esa razón tía Ugueta se la llevó a Timotes. Muchos creen que está muerto.
SAUL.-Historia Patria. Ella es hija del famoso Pollo.
RENE.-Así es.
SAUL.-No importa, estoy enamorado y el amor supera cualquier obstáculo.
NARRADOR.-De repente los jóvenes escuchan ruidos. Son Milagros-quien se hace llamar Corito- y Coromoto
• quien ha adoptado el mote de Mili-. Quieren escuchar el tema sobre el cual discuten los muchachos, sin sospechar que René y Saúl tienen un plan.
Saúl.-(Sotovoce)¡Son ellas!
NARRADOR.-Todos los textos dichos a partir de este momento tendrán un cursilísimo tono teatral.
SAUL.-¿René, qué te sucede?¿Por qué te comportas así?
RENE.-¿Dónde está Mili?
SAUL.-¿Quién es Mili?
RENE.-La sirvientica de tía Ugueta.
SAUL.-¿Qué pasa con ella?
RENE.-¡La voy a violar!
NARRADOR.-Coromoto va a gritar, pero Milagros le tapa la boca y la persuade para quedarse y seguir escuchando.
SAUL.-¡Eso podría traernos consecuencias nefastas con la señora Ugueta!
RENE.-¡Es sólo una sirvienta! Todos saben que las sirvientas son carne fresca para los hombres de la casa
SAUL.-¿Y si habla con tu tía?
RENE.-La asesino. A ella y a su compañera. Y después echo sus cuerpos en algún valle del Cerro del Avila.
NARRADOR.-Coromoto trata de gritar y nuevamente es retenida por Milagros. Ambas lloran de miedo, en silencio y con Murine, el milagro de la lágrima artificial.
SAUL.-¿A Corito también?
RENE.-Y a cuantos se me atraviesen. Después que me pusieron esa inyección en la Avenida San Martín he sentido que mis instintos animales se han desbordado. ¡Soy un animal...!¡y la Mili va a sentir mi fuerza!
NARRADOR.-Coromoto se zafa de Milagros y sale huyendo a toda prisa.
RENE.-¿Qué es eso? Escuché un ruido.
NARRADOR.-Milagros va a huir, pero René abre la puerta y evidencia su presencia.
RENE.-¡Nos estabas espiando!
SAUL.-¡Corito!
NARRADOR.-Epica, de terror.
MILAGROS.-Señores... Iba a entrar y escuché voces y preferí esperar. Iba a aprovechar para ir casel verdulero...
Cuando usted abrió como si yo fuera una fisgona...
NARRADOR.-Llora de miedo.
SAUL.-Por favor, no llores Corito. Yo te creo.
MILAGROS.-Gracias, señor Saúl.
SAUL.-Dime Saúl, a secas.
MILAGROS.-Está bien, señor Saúl, a secas.
RENE.-¡No seas burra! ¡Qué le digas Saúl nada más!
MILAGROS.-¡Está bien señor Saúl nada más!
SAUL.-No la grites.
RENE.-¿Corito, dónde está Mili?
MILAGROS.- No lo sé, señor. Hoy es su día libre y creo que fue a visitar a su papá.
RENE.-¿Y tiene papá?
MILAGROS.-Un señor muy extraño, que da miedo. Con decirle que hay gente que cree que ese señor es un vampiro chupa-sangre.
RENE.-¡Y yo le voy a chupar a ella otra cosa!
MILAGROS.-¡Oh!
SAUL.-¡René, respeta a Corito!
RENE.-¡Que venga a mi cuarto en lo que llegue!
NARRADOR.-Hace mutis hacia su habitación.
MILAGROS.-Creo que debemos llamar a la policía.
SAUL.-No te preocupes. Yo estoy aquí. Contigo.
MILAGROS.-Por favor, señor Saúl-nada-más, no me diga esas cosas.
SAUL.-¿Crees en el amor?
MILAGROS.-Yo soy muy joven para estar pensando en esas bolserías. Las señoritas decentes pensamos en otras cosas.
SAUL.-Perdóname, Corito; tienes razón. Soy un iluso.
MILAGROS.-¿Por qué?
SAUL.-Dirás que soy un loco. O que me quiero aprovechar de ti. Pero algo muy extraño está pasando en todo mi ser desde el momento que te vi. Te va a parecer precipitado y prematuro...Pero yo...
MILAGROS.-¿Usted?
SAUL.-¿No te vas a burlar de mí, verdad?
MILAGROS.-¿Burlarme?¿Por qué?
SAUL.-Porque yo...
MILAGROS.-¿Si?
SAUL.-Yo estoy locamente...
NARRADOR.-Un grito de René interrumpe la escena.
RENE.-¡Saúl, ven inmediatamente!
SAUL.-Debo ir.
MILAGROS.-Lo sé.
SAUL.-¿Me vas a esperar?
MILAGROS.-El tiempo que sea necesario.
SAUL.-Regreso de inmediato.
NARRADOR.-Hace mutis.
MILAGROS.-¡Oh, Señor!¿Qué debo hacer? Creo que me estoy enamorando como una tonta de Saúl. Súbito. Como se enamoró mi madre de mi padre. Y ni siquiera mamá está cerca para que pueda darme un consejo. ¿Dónde estará mi madre, Virgencita? Ayúdame a encontrarla con bien donde quiera que esté. Ojalá mi primo no le haga nada a Coromoto. ¿Dios mío, qué prueba es esta? Lo que comenzó como un juego se está transformando en una terrible pesadilla. Ayúdanos a salir de buen modo de esta a todos. Si supiera cantar te ofrecería mi voz...Saúl...¿Qué está pasando en mí?¿Por qué no puedo dejar de pensar en Saúl? Mi cabeza me dice que es una locura, pero mi corazón parece que quisiera salirse de mi pecho con sólo pensar en ese hombre. No; no debo escuchar lo que quiere decirme. No está bien.
NARRADOR.-Milagros huye a su habitación. Regresa Ugueta, vestida como el Doctor Dominguez y no se percata que tras de si está Coromoto con una escopeta y en actitud de ataque. Sigilosa, pasa a la habitación de Ugueta sin que ella pueda descubrirla.
UGUETA.-Es hora que la señora Ugueta regrese a su hogar.
NARRADOR.-Saúl, sale y se sorprende.
SAUL.-¡Doctor!¿Por qué ha regresado?
UGUETA.-Porque aquí hay algo raro y quiero saber qué es. Espero que hayan auyentado a la curiosa y le hayan metido miedo a mi hijita, para que más nunca crean que son más inteligentes que su madre.
SAUL.-Le hemos aterrorizado a Mili, pero Corito sigue todavía por estos lados.
UGUETA.-Voy a tener que encargarme yo,personalmente.
SAUL.-Si usted lo dice.
UGUETA.-Yo lo digo.
NARRADOR.-Oscuro. Final del cuadro número cuatro ¿Saúl podrá declararle su amor a Milagros?¿Ella lo aceptará?¿ René cumplirá su amenaza?¿Qué va a hacer Coromoto con el arma que trajo?¿Atacará a Ugueta? Estas y otras respuestas en el próximo cuadro –el de desenlace- de“Un amor como de Walt Disney”, gracias a La casa de la Cultura de Baruta, La Alcaldía de Baruta y Murine.




Un amor como de Walt Disney.
Autor: César Eduardo Rojas Márquez.
V
El Amor

NARRADOR.-Cuadro Quinto. En la madrugada se desli-za la figura de Saúl preocupado. Viene seguido de René.
SAUL.-Ahora regresó tu tía. Ella quiere que le haga daño a Corito...Y yo no puedo...Ella es tan dulce, se ve tan inocente. Prefiero irme a otro lugar...y si es necesario me la llevo a ella.
RENE.-Estás completamente loco, mi llave. ¿A dónde te vas a ir? Tú no conoces Caracas.
SAUL.-Tú nunca me habías visto así, ¿cierto?
RENE.-Nunca.
SAUL.-Yo mismo estoy sorprendido de esto que siento. Pensé que nunca me podía pasar.
RENE.-¿Qué te pasa, viejo?
SAUL.-Estoy enamorado de Corito.
RENE.-¡Por favor, Saúl, la acabas de conocer.
SAUL.-Amor a primera vista.
RENE.-No seas infantil. Vienes saliendo del asunto con la mujer del dueño de la cochinera,que te hizo hasta llorar- y te vas a sumergir en esta ridiculez.
SAUL.-No es una ridiculez...No le voy a hacer daño a Corito, y si a ti se te ocurre ponerle un dedo encima te las vas a ver conmigo.
RENE.-¿Me estás amenazando?
SAUL.-Tómalo como quieras.
NARRADOR.-Saúl va a hacer mutis hacia la calle.
RENE.-¿A dónde vas a esta hora?
SAUL.-Necesito caminar.
RENE.-Esto no es Timotes, mi llave.
SAUL.-Ya lo sé.
NARRADOR.-Hace mutis. Una imagen masculina sale de la habitación de Ugueta y golpea en la cabeza a René y lo deja inconsciente. Es Coromoto.
COROMOTO.-Conmigo no se puede así como así.
NARRADOR.-La muchacha amarra a René y le pone
Un pañuelo en la boca. Luego sale y regresa apuntando a Ugueta, quien está maniatada y amordazada también.
COROMOTO.-Vamos. A caminar. Así que me querían dar otro sustico para que no regresara.
UGUETA.-Umjú.
COROMOTO.-Vamos a esperar que llegue el otro cristiano para que aclaremos esta guarandiga.
NARRADOR.-Milagros sale de su cuarto.
MILAGROS.-¡Qué es esto!
COROMOTO.-¡Dejate de “faramayerías”, que vamos a aclarar este asunto ya!
MILAGROS.-¿Qué asunto?
COROMOTO.-¡El del hombre que inyectaron y que me quería violar! Quiero decirte que todo esto es idea de la doñita Ugueta, para darnos un “sustico” por “brinconas”.
MILAGROS.-¿Por qué? ¡Mamá! ¿Dónde estabas? Nos dijeron que estabas hospitalizada.
COROMOTO.-Nos los dijo ella misma vestida de doctor, bolsa.
MILAGROS.-¡Mamá!
NARRADOR.- Saúl regresa, ve a Coromoto con el arma en la mano, cree que es un ladrón y cuando se le va a lanzar encima a la muchacha, se le escapa un disparo y Ugueta se tira en el piso haciéndose la muerta.
UGUETA.-¡Oh!
RENE.-¿Dónde estoy?
SAUL.-¿Qué hiciste, mujer del demonio?
MILAGROS.-¡Coromoto, has matado a mi madre!
RENE.-¿Por qué estoy amarrado...?¡Uff mi cabeza!
COROMOTO.-Es cierto. ¡Soy una asesina!
SAUL.-¡Te voy a ...!
MILAGROS.-No, Saúl, por favor, todo esto tiene una explicación.
SAUL.-Como tu digas, mi amor.
NARRADOR.-Ugueta se incorpora.
UGUETA.-Ahora me van a escuchar a mí.
TODOS.-¡Ugueta!
COROMOTO.-¡La muerta!
UGUETA.-Todo este lío lo he ocasionado yo...Porque tenía que decirle definitivamente a mi familia, que yo no me había quedado soltera, como todos pensaban allá, en Timotes. Yo me casé y del fruto de ese amor nació mi hija, Milagros.
SAUL.-Corito.
RENE.-Que buena noticia tía.
UGUETA.-No tan buena, porque poco después de mi matrimonio, Caffarder murió y yo tuve que criar sola a mi pequeña.
RENE.-Y entonces llegamos nosotros y tú te sentiste descubierta.
UGUETA.-Y me di cuenta que mi hija y una vecinita curiosa, estaban muy entusiasmadas con la llegada de ustedes.
MILAGROS.-Y entonces decidimos hacernos pasar por sirvientas.
COROMOTO.-Y hasta nos cambiamos los nombres, para que todo fuera más verídico y la bruja, es decir doña Ugueta, no nos delatara facilmente.
SAUL.-Así yo creí que eras Coromoto, cuando realmente eres Milagros.
RENE.-O sea que a quien le miré las bragas no era mi prima.
COROMOTO.-¿Qué bragas?
SAUL.-No le hagas mucho caso a René, es muy bromista
RENE.-Tía Ugueta nos pidió que las asustáramos, para que no siguieran inventando y a nosotros nos pareció bien mientras nos acostumbrábamos a la vida de Caracas.
SAUL.-Y entonces ocurrió lo que ninguno de nosotros podía sospechar.
RENE.-El amor llegó a esta casa.
UGUETA Y COROMOTO.-¿El amor?
MILAGROS.-Sí, mamá. Sí, Coromoto: El amor.
UGUETA.-¿El amor de quién con quién?
SAUL.-El amor de su hija Milagros, a quien yo conocí como Corito, con este servidor.
UGUETA.-¿Cómo?
COROMOTO.-Con razón estabas tan ridícula.
MILAGROS.-Madre, yo también estoy enamorada de Saúl Villarino.
NARRADOR.-Las mujeres se conmueven y lloran. Murine lacrimal, para el llanto del final.
SAUL.-Y queremos que usted nos dé su autorización.
UGUETA.-Pero si tu acabas de llegar, mijito.
MILAGROS.-Madre, recuerda cómo fue tu relación con mi padre.
UGUETA.- Es verdad. Sí, acepto Saúl. Pero mucho fundamento que estamos todos en la misma casa.
Y quiero aprovechar para pedirle disculpas a Coromoto por el mal rato que le hice pasar.
COROMOTO.-Y yo por las altanerías.
RENE.-Hoy es un día de celebraciones. Porque otra vez tenemos la oportunidad de ver la felicidad acercarse a nustra familia.
SAUL.-Y nosotros queremos decirles, que aunque pueda parecerles dificil y confuso. El amor a primera vista existe.
MILAGROS.-Y es un amor...
TODOS.-“Un amor como de Walt Disney”.
NARRADOR.-Oscuro. Final de la pieza. Pueden aplaudir.
Fin.
Cesar eduardo rojas Márquez.

6 de septiembre de 1998.


Un amor como de Walt Disney.
Autor: César Eduardo Rojas Márquez.

PERSONAJES:


NARRADOR.
MILAGROS CHAFFARDER MENESES.
SAÚL VILLARINO.
RENE MENESES.
COROMOTO HERNÁNDEZ.
UGUETA MENESES VIUDA DE CHAFFARDER.



Esta pieza pertenece a la trilogia “ iconos de norteamerica” ( aspiraciones latinoamerica-nas), compuesta por:

1.-Como en las peliculas de hollywood.
2.-Vampiros como de broadway.
3.-Un amor como de walt disney.


Sigo penSando que hemos querido ser como de broadway, de hollywood o de walt disney, y hemos terminado siendo una mueca, una imitación muy deficiente...un sainete.


Cesar eduardo rojas marquez.
A love like of Walt Disney.
Author: Caesar Red Eduardo Márquez.
I
The arrival of Renato and Saúl.


THE Public's ARRIVAL DISCOVERS A SPACE THAT SEEKS to IMITATE THE INTERIOR OF THE SHEPHERDESS'S MODEST HOUSE. There are not WALLS, ALL THIS DEFINED FOR AN ESPECIE DE TIRRO THAT SEEKS to INDICATE THE INTERIOR (it SALTS DINING ROOM OF THE CASA)Y THE EXTERIOR (THEATER) ORDERING THE SPACE. THE MUSIC is LISTENED WITH THE ONE THAT ALL THE PRODUCED MOVIES BEGIN FOR WALT DISNEY (THE BLUE STAR OF THE FILM PINOCHO). A BOY APPEARS, DRESSED GRACEFULLY AS THE FAMOUS PERSONAJE PEPE GRILLO.
NARRATOR. - From the world of the illusion and the Fantasy “A love like of Walt Disney” (it Pauses) Caracas, 1960. House of red roofs of the Boulevard Penichez, in The Silence. It is Ugueta Meneses's home. Few Furniture, but orderly with a matter feminine pleasure. A Door. A window. A table with Alfredo's pictures, María Eugenia, their small son, Ugueta with a man and a girl (their husband and their daughter), and H.E. and Chaurita with their small son. This show has been sponsored thanks to the collaboration of: (it Names sponsors. She/he goes until their place to a side of the scenario and it begins the actions that will be seen in the piece). The Door opens up slowly and an imposing masculine figure appears. She/he is Renato Meneses, Alfredo's first-born and María Eugenia. She/he comes arriving from Timotes to their aunt's house Ugueta. She/he leaves their baggage behind in the center of the scenario like years she/he made it their aunt Ugueta when it arrived to Timotes with their mother.
RENE. - I finally arrived! Happen!
NARRATOR. - She/he enters the shy Saúl Villarino, son of Chaura and Hector Enrique.
SAUL. - Here?
RENE. - This is the address that I indicate myself Papá in this presentation card.
NARRATOR. - Saúl looks at the house. She/he discovers the pictures.
SAUL. - Yes, here it is. This is Don Alfredo and Mrs. María Eugenia, this it should be Mrs. Ugueta with a family and here until we are dad, mom and me chiquitico.
RENE. - It is certain. Then yes, it is here. We finally leave that town.
SAUL. - Be not ingrate. In that town we were born and there our parents stayed.
RENE. - But aunt Ugueta is here, in Caracas, in the capital, in the civilization and the culture. “The rest is mount and snake.”
SAUL. - However I don't find Penichez part of the civilization, and if it is it it won't be of the part of ahead, because it is behind the blocks of The Silence.
NARRATOR. - Renato, also well-known as René, haciando remiss case to the friend's comment.
RENE. - I know that aunt Ugueta will be very well.
SAUL. - Where will it be? Why will nobody have come out to greet us?
RENE. - Insurance will be in the street, rubbing shoulders with the last thing in information, with the present time, with the fashion.
SAUL. - And if it is that she/he doesn't want to receive us? If it doesn't treat us like we wait?
RENE. - We are very young and we have enough vigor and energy. Are we as of commercial Yes or not? If it treats us wrong we can leave with our music to another part.
SAUL. - That doesn't stop to worry.
RENE. - I am not him afraid to the life neither the work
SAUL. - Neither me, but...
RENE. - With money you can buy what you are fancied... You and I came us to make fortune... And if the aunt becomes annoying we fly to another sky and already.
SAUL. - That wanted to listen... I don't want to return to Timotes because there this the bandola that makes me bad.
RENE. - You won't begin with that paso doble another time... Rosa will regret to be had married with Dog that of the cochinera... I have to see it asking you for forgiveness.
SAUL. - Renato Meneses, I don't want to mention to Rosa Higuera more of Dry. I thank you you to never name her in my presence more... She/he harms me a lot of.
RENE. - I sit down it.
SAUL. - Me also. Let us speak of another thing.
RENE. - I am hungry.
SAUL. - How strange!
RENE. - The trip opened me the appetite
SAUL. - I should admit that to me also.
RENE. - When we go by the end of the ascent I saw that beside the bank there is a Hotel that you/they call President and they sell a spaghetti plate for five bolivars.
SAUL. - For five Bolivars! You are crazy!
RENE. - At this time she/he would pay up to a hundred, with such of taking off this sensation of painful hole in my stomach.
SAUL. - Neither because they had diamonds. Two bolivars and she/he goes well.
RENE. - You are in Caracas.
SAUL. - And what?
RENE. - Here everything is more expensive.
SAUL. - What she/he goes! I propose you a thing: when we came I saw some places in those that served cheap. We will give ourselves a “vueltecilla” of Amgelitos to Jesus.
RENE. - But if they are only three bolivars.
SAUL. - We want to be millionaire.
RENE. - And for that reason I should pass hunger?
SAUL. - Make I marry or pays you.
RENE. - Make me convinced Saúl. How persuasive! We go, of Angelitos to Jesus.
NARRATOR. - Saúl -refiriéndose to the suitcases -.
SAUL. - And this?
RENE. - We will leave it there same. The aunt goes this way to know that we arrive, if you arrive before us.
SAUL. - We go.
NARRATOR. - They make mutis. Of one of the doors that gives toward a room a pretty young boy she/he appears. It is Milagros Chaffarder Meneses, the secret daughter of Ugueta. With a lot of caution it verifies that the youths don't remain in the house and she/he returns to inform their mother.
MIRACLES. - They already left, mom!
NARRATOR. - Ugueta Meneses, today appears widow of Chaffarder. She/he comes very perturbed with their dark suit, their fan and their blue handkerchief.
UGUETA. - Did they leave?
MIRACLES. - It seems that they fainted of hunger.
UGUETA. - This gives me some minutes so that we can speak.
MIRACLES. - She/he speaks, mother.
UGUETA. - Daughter, I feel so embarrassed. I don't know what I should make in this case.
MIRACLES. - It is not necessary that you hide the truth, mother.
UGUETA. - What my brother Alfredo and M.E will say., when they find out this terrible reality
NARRATOR. - They cry. With Murine our actresses also have that cry like of Walt Disney.
MIRACLES. - You make me feel very bad, mother...
UGUETA. - No; daughter of my loves... if you understood me.
MIRACLES. - I understand you mother. I am also a woman.
UGUETA. - I can not stop you to see like a girl.
MIRACLES. - Mom, did you love my father?
UGUETA. - Like one unhinged. It was a tumultuous, torrid, sudden love. As they only love each other the desperate ones... The lunatics. It was, maybe, like a premonition that I foresaw it... Without conscience I knew that the tragedy surrounded us, in an inexplicable way... What did it happen? I don't know it. One day it dawned and he didn't move, she/he didn't wake up more... It was sleeping. And with their dream my life, my love was taken and I was alone, in silence, confused, in silence and with you in my stomach of so single two months.
MIRACLES. - How long were you with dad?
UGUETA. - It was a love at first sight that it only lasted three months, as if the life had given him that last gift. Nobody found out. I can not say that it was a secret, because I didn't never hide it. But I eat I could never mention it to mine, because Timotes is very far, they should believe that I continue being a ridiculous spinster.
MIRACLES. - You hid my birth.
UGUETA. - No, daughter, I didn't hide it. I didn't only mention it and they didn't worry to wonder. At the beginning I felt disloyal toward you, but little by little I went getting used to that silent hole between them and you, and that she/he made me wait with desperation that this happened.
MIRACLES. - Now uncle's son has arrived Alfredo and aunt M.E.
UGUETA. - I know it.
MIRACLES. - Who is their companion?
NARRATOR. - Ugueta shows him the picture of the Villarino.
UGUETA.— It is him. She/he calls himself Saúl, the son of Chaurita and H.E.
MIRACLES. - That is to say that is also as your nephew.
UGUETA. - I believe.
MIRACLES. - What do you plan to make, mom?
UGUETA. - To assume the things. You are my daughter, my life. The fruit of my only opportunity with the true love and I won't hide it.
MIRACLES. - Mother. I thought that she/he will die from pain.
UGUETA. - Pain?
MIRACLES. - I thought that you would deny me.
UGUETA. - Daughter, I love you.
MIRACLES. - And me to you mom.
NARRATOR. - They knock on the door.
UGUETA. - Who will be? She/he opens up. Insurance is the boys. I will alter myself to my room.
NARRATOR. - Ugueta goes to its room and Miracles she/he opens up. It is Coromoto Hernández, the daughter of The Chicken, the greengrocer. She/he comes to “to snoop” and to be informed of the last news.
MIRACLES. - Choir!
COROMOTO. - Mili!
MIRACLES. - And that surprise?
COROMOTO. - You are a selfish person. Do you believe that I didn't see those things that arrived at this house?
MIRACLES. - Do sew?
COROMOTO. - I felt, in a moment, like in the hell, because both leave fire for where they happen.
MIRACLES. - Be not so frasquitera, Coromoto.
COROMOTO. - Frasquitera and refistolera if she/he gives you the desire, but I am not without at least to play them the manotas to those muchachones How they call themselves? For where did they leave? Where will they sleep? To what are they devoted? Will they be a lot of time in this house? Woman that anguishes me your speaks “evasividad!”
NARRATOR. - It pauses.
MIRACLES. - She/he is my cousin Renato and their friend Saúl.
COROMOTO. - Why will I have listened glass bells?
MIRACLES. - Because it is in fashion, fool.
COROMOTO. - And when will you present me to those “taffies?”
MIRACLES. - I believe that she/he won't be possible.
COROMOTO. - If Betancourt overthrew Pérez Jiménez, here everything one can, ingrate.
MIRACLE. - She/he is not due to my will.
COROMOTO. - Explain to me.
MIRACLES. - They ignore my existence
COROMOTO. - What?
MIRACLES. - Today, after eighteen years, the secret goes to develarse and me I will be presented in family, if she/he can call this way himself.
COROMOTO. - And your mother?
MIRACLES. - Getting ready for the event.
COROMOTO. - Then the mangazo doesn't know you.
MIRACLES. - Neither me to him.
NARRATOR. - Coromoto has an idea.
COROMOTO. - Miracles, it distracts Mrs. Ugueta, while I fix some things to have a good time mientrs a little we know to your companies. An ideal occasion to demonstrate who the most intelligent sex is. Perhaps and until we end up being presidents of the Republic.
MIRACLES. - What will you invent, Choir?
COROMOTO. - What “do we go” to invent Mili? What will we invent?
Narrator. - Dark. Final of the first square of “A love like of Walt Disney.”

A love like of Walt Disney.
Author: Caesar Red Eduardo Márquez.

II
A SHOT FOR THE BREECH.

NARRATOR. - Second square of “A love like of Walt Disney.” Hours later. Ugueta leaves its inhabit-ción and she/he meets with Miracles and Coromoto. The youths are noticed very nervous and Ugueta fakes to not notice the uneasiness.
UGUETA. - Don't the boys still return?
MIRACLES. - That strange.
COROMOTO. - Will it be that you perideron?
UGUETA. - I don't believe. René is son of Alfredo and María Eugenia.
COROMOTO. - And what with that?
UGUETA. - My brother is a world man, dear. She/he walked for Europe ten years and she/he didn't never get lost.
COROMOTO. - But her mom, didn't hardly ever leave Caracas and almost she gets lost with dad.
UGUETA. - Even. That gentleman that you/they call The Chicken and that she/he is your father, she/he doesn't give him neither for the stockings to my brother Alfredo.
NARRATOR. - Ugueta will make very bothersome mutis.
MIRACLES. - For where do you go mom?
UGUETA. - To the church. To request an advice to the Mr..
COROMOTO. - Do have more than enough what, if it can be known?
UGUETA. - Miracles, daughter, you friend Coromotico knows that I hate curious people.
COROMOTO. - And then why she/he speaks incomplete in front of the onlooker? That is morbidity.
UGUETA. - Shameless. I don't support it. I hope when my house returns it is clear of impertinent neighbors.
MIRACLES. - You go calm, mom.
COROMOTO. - God willing it can get in some side the tranquility that she/he is looking for.
MIRACLES. - Coromoto, respects my mom!
NARRATOR. - Ugueta leaves indignant and she/he leans out to listen for the window. Miracles maintain the bothersome attitude until the mother leaves. Suddenly they begin to laugh in a strange way and they begin to put on attires used by the maids of people's of good position houses. The girls begin to speak as very uncultured people. Music.
COROMOTO. - This silvienta work goes me to permitil better conocel to the muchachones.
MIRACLES. - We have that sabel que's that that plefieren comel, because if not I don't go to sabel that owes a cocinal.
COROMOTO. - Do we take the baggage to the room?
MIRACLES. - Neither muelta! The beds are made and and the clean rooms. But calgal suitcases never.
COROMOTO. - You will have to peel and to chop potatoes equally.
MIRACLES. - For a while and without mom finds out.
NARRATOR. - Coromoto, closes. the window and she/he speaks to him with more tranquility to Coromoto. Ugueta can not continue spying and she/he decides to leave the place.
MIRACLES. - Why don't we change ourselves the names?
COROMOTO. - To change us the names? And for what reason?
MIRACLES. - So that they don't recognize us, fool, like in the radionovelas.
COROMOTO. - Ah! Good yes!
MIRACLES. - You are Mili that is diminutive of Miracles that is my name.
COROMOTO. - And you Choir that is Coromoto but tiny.
MIRACLES. - We take care this way in health, just in case
COROMOTO. - Yes, young lady. Today that eats up in this house?
MIRACLES. - Creole pavilion with rails.
COROMOTO. - How good, because I have a famine!
MIRACLES. - The maids eat of últinmo, if it is food of which you/they are served the gentlemen. Or they are cooked separated.
COROMOTO. - What misfortune! Slave and muelta of hunger. God willing some gallant pities of my sufirimiento.
Is she/he able to dalme a curumbeta or a PTT with which fuelza goes to pasal coleto? How do I go to podel arreglal the cualto to the youths?
NARRATOR. - And she/he fakes to cry. Miracles fake that it is moved. With our Murine actresses they have cry of heroines. If she/he wants to cry, Murine in their home.
MIRACLES. - You convinced me, mujel.
COROMOTO. - A pittance at least?
MIRACLES. - I didn't say that. I said that you convinced me.
COROMOTO. - Pro-slavery. Nazi.
MIRACLES. - What you want... Although if you help me to arreglal terminal the food to the mejol I pity.
COROMOTO. - It is that there is that recibil to the rorines like they deserve.
NARRATOR. - They make mutis toward the kitchen. Suddenly and with a lot of caution Ugueta returns to the interior of the house.
UGUETA. - With which that has. They will take a sorprecita. I only have to intercept the boys before the clownish ones see them. Coromoto wants to be alive.
I believe that everything will be more amusing of it than them they wait.
NARRATOR. - The boys arrive.
RENE. - Good.
UGUETA. - Good.
SAUL. - Permission.
UGUETA. - Yes?
RENE. - You Mrs. Ugueta Meneses is?
UGUETA. - I believe.
SAUL. - She/he is your aunt, your she/he suckles she/he said that it was so she/he went to she/he will respond you.
RENE. - I am Renato, Alfredo's son and M.E., but René can call me
UGUETA. - Then you are my nephew. And if I don't make a mistake this attractive waiter she/he should be the son of H.E. and Chaurita.
SAUL. - They call me Saúl.
UGUETA. - What pleasure so big to have men so handsome in this house!
RENE. - Thank you, aunt Ugueta.
UGUETA. - You can call me Ugueta. I find the aunt too formal.
RENE. - Like say.
UGUETA. - But now don't speak very high.
SAUL. - And that why?
UGUETA. - I don't want them to listen that you are already in the house. René, Saúl, I am a lady in misfortune, one kills and I need that somebody me of a help to be able to come undone of a serious problem that I have.
RENE. - Is it very serious?
UGUETA. - A lot.
SAUL. - Count on us for what is.
UGUETA. - It is well, but let us don't speak here, the causing of my problems could appear and I don't find convenient that are to the so much of what I want to request them. Because this is a great secret and everything should stay this way. Is it well?
BOTH. - Very well
NARRATOR. - They make mutis, but before leaving, Ugueta leaves a letter in the threshold of the door. Dark. Final of the second square of “A love like of Walt Disney.”


A love like of Walt Disney.
Author: Caesar Red Eduardo Márquez.
III
THE DANGER OF A JOKE.

NARRATOR. - Few minutes later. Miracles and Coromoto appear, with much care. They are noticed scared. They leave the kitchen using the broom like protective.
MIRACLES. - Anything
COROMOTO. - I assure you that I listened noises in this room.
MIRACLES. - Won't the conscience that is you traicio-nando be?
COROMOTO. - Leave the guarandinga, girl!
NARRATOR. - Coromoto discovers the letter that Ugueta left.
COROMOTO. - Oh! Ah! Look! An envelope! Is it for you?
NARRATOR. - Miracles take off it and it revises it.
MIRACLES. - It belongs to mom.
COROMOTO. - Of Mrs. Ugueta? But if she was here she/he makes...
MIRACLES. - We will read it... I believe to know that she/he says the content of this letter.
NARRATOR. - Ugueta appears and she/he narrates us what says the letter while the girls read it.
CONTENT OF THE CARTA DE UGUETA. - Dear daughter. Miracles, she/he forgives that she/he has not had the value for
To speak with you... to explain to you that it is too hard for me, to admit before my nephew and their friend, my slip with your father. To the one that will continue loving until the end of the eternity, when she/he plays us to leave of the planet to continue looking for the happiness. It is so hard to be an alone woman. Now I want to escape, to escape like a coward, to order my ideas and to recover the trust that I have always had in myself. I need cares doctors. In these moments I sit down the sleeping language and my hands engarrotadas are practically... I go to a friend doctor she/he marries, so that she/he doesn't have to be it moves and numbed by the rest of my existence... And perhaps, this way, maybe I can stop before the world to scream my truth... Although I don't believe that many care it, because they could consider it a pasjuatada of a weak being, nobleman and given in by the force of the love... How unfortunate I am! I leave you alone for the time being. In your cousin's company and their friend Saúl and the only thing that I request you are that you don't leave that she/he enters in the house the whole day the moscamuerta daughter of the Pollo Carlos Hernández, because if it goes out with a belly that is in another side, because my house belongs to decent people. She/he tries to not hear it. I know that you are a correct woman, it would be and that you will give yourself your position before any difficulty. She/he loves you and I hate the one put. You mother. Post it dates: If the lassie that reads this letter, because I know their inclinations, I thank you that before lifting any insult against me she/he thinks of their mother, because I requested to Santa Marta so that it returns their mom double what wants for me. Your mom Ugueta Meneses widow of Chaffarder.
NARRATOR. - Ugueta disappears. Miracle is hit and surprised. Coromoto that had been boquia-bierta reacts.
COROMOTO. - The fate has given us chance. Now we can take to our end plan without the witch's interference, that is to say: your mom.
MIRACLES. - now I find dangerous. Mainly understanding that we don't know how they are those boys.
COROMOTO. - Be not ridiculous, woman! How will they be? Young, strong, virile, full with hormones and with an idea among brow and it slacks.
MIRACLES. - Which?
COROMOTO. - To love.
MIRACLES. - To love?
COROMOTO. - But we don't make ourselves illusions. Although it is the same verb the “to love” for the men it is not the same thing that stops us the women.
MIRACLES. - Really?
COROMOTO. - She/he opens the eyes, girl. We have just gone up ourselves to the Russian mountain
NARRATOR. - Blows are listened to the door.
MIRACLES. - They are them.
COROMOTO. - All preparation?
MIRACLES. - Umjú.
COROMOTO. - Open up!
NARRATOR. - Miracles go to open up, while Coromoto fakes to be very busy with the cleaning of the house. Saúl enters with a to revolve in the hand and bringing almost to trails to René, which falls faint immediately after entering to the house. The women are terrified and they scream.
MIRACLES. - What is this?
COROMOTO. - Who are you?
SAUL. - It aids... Help me, please. It is an emergency.
We need some bandages. I don't know what they have made my friend René. I am Saúl Villarino and this she/he is my friend René. Nephew of the sra. Ugueta. Should you be their maids, truth?
BOTH. - Yes.
SAUL. - We have arrived for few hours of Timotes, and the trip was taken so long that we arrive totally starving...
COROMOTO. - Don't say grossness in this house!
MIRACLES. - Girl, that is not a grossness!
COROMOTO. - I read in Selections that they called it his in a very similar way.
MIRACLES. - Starving it is hungry!
COROMOTO. - Ah! Good, but care with a strange thing!
SAUL. - Renato was so hungry that she/he decided that we will eat in some taguara of those that there is from Angelitos to Jesus. The thing is that we left, enjoying of the I traffic and the contamination from Caracas. Because there in Timotes the thing is not I eat here... and suddenly it left of I don't know where a man like of two meters and half, and I nail him an inyectadora to René.
COROMOTO. - Do look, do wait a moment who Renato is?
SAUL. - The.
COROMOTO. - And René?
SAUL. - The.
COROMOTO. - Does me the favor and she/he calls it for a single name, because with that cambiadera of names I will finish thinking that you are as of ten thousand men, when it is one alone.
NARRATOR. - Miracles taking the word and Saúl are been captivated of the girl while René takes advantage to put him the eye to Coromoto.
MIRACLES. - Excuse.
SAUL. - What you want, young.
NARRATOR. - Miracles lie.
MIRACLES. - I am Choir.
NARRATOR. - Saúl doesn't notice it.
SAUL. - Me Saúl.
MIRACLE. - That beautiful name.
SAUL. - That beautiful lips.
MIRACLES. - Thank you.
SAUL. - His that should be many.
MIRACLES. - It is very gallant.
SAUL. - Believe me, I am rather shy. I am perturbed with their presence.
MIRACLES. - It puts me nervous.
SAUL. - We are two.
COROMOTO. - No; we are three. Can you explain to me the number, this girl?
NARRATOR. - Miracles don't pay attention to Coromoto.
COROMOTO. - Gentleman, Mrs. Ugueta is very strict with the treatment that we give to the strangers. Much more when they bring I get an it arms that it can cause him the death to which want.
SAUL. - Mrs. Ugueta will understand perfectly that Choir calls me Saúl. You can call me Mr. Villarino.
NARRATOR. - Saúl will revise René. Coromoto wants to hit to the boy, but Miracles it impedes it to him.
COROMOTO. - She/he is an imbecile!
MIRACLES. - It is adorable.
NARRATOR. - Saúl listens the comment of Miracles and when she/he will come closer to the girl she/he notices that René is putting him the eye to Coromoto. Saúl gives him a blow in the head and it dismays him.
SAUL. - They should indicate me the willing room for my friend. It is necessary to take it to rest. It is not under conditions of remaining without she/he sees it a doctor.
MIRACLES. - We will call one.
SAUL. - We have brought to one. It is stopping their low car the samán of Penichez.
COROMOTO. - How will they have known it? Because the doctors to home are expensive.
SAUL. - It was casual. He went taking to a lady that came of here for their clinic of rest and we help her to put it in their car and it took it to him. Accidentally, when that of the man that injected happened to I Produced, he came from return and it aided us. Until she/he lent us the weapon for auyentar to the stranger.
COROMOTO. - And for that reason selection that gun in the hand?
SAUL. - For that reason.
MIRACLES. - You dressed! You always of bad pensada!Traígalo here, Saúl.
SAUL. - Friend your if you weigh!
NARRATOR. - They make mutis toward the room assigned to the youths. And then she/he makes their masterful entrance Ugueta, dressed as the Dr. Dominguez Sisco. Music.
UGUETA. - Oh, daughter, here I am again and you never go that is that I am me. We will see who a surprise is taken!
NARRATOR. - Dark. Final of the third square of “A love like of Walt Disney. Written and directed by their managing author Red Caesar. She/he narrates them for you Me.

A love like of Walt Disney.
Caesar eduardo red marquez -
IV
To suffer of love.
NARRATOR. - We continue. I square number four of “A love like of Walt Disney” .Ugueta, making you to go by doctor and in complicity with those recently arrived ones, it leaves the room of Renato, accompanied by the two girls. She/he comes with a quite concerned aspect.
MIRACLES. - Is it very serious?
UGUETA. - I should have the results of the exams. But I admit them that I am very concerned. They are the same symptoms of a patient that it lost the possibility to speak due to their psychic square and of moving the hands, for what is completely isolated with the external world. As the is for the time being Mr. Renato.
COROMOTO. - How is that?
UGUETA. - The Christian poor person can not have any bond with the external world. By the way that she/he told me that, for what could means to communicate, their family should live for the surroundings.
COROMOTO. - For these sides the women are very healthy. There is not none that is sick.
UGUETA. - Because I assure him that this she/he lives here. Their single last name is Meneses. As that of the young Renato.
MIRACLES. - Meneses?
UGUETA. - It is this way... And she/he has a not very common but very appropriate name to the woman's behavior.
MIRACLES. - Does she/he remember the woman's name?
UGUETA. - In these moments I believe that not.
MIRACLES. - Will Ugueta be?
UGUETA. - The same one. Ugueta. How could I forget it? Ugueta Meneses widow of Chaffarder.
MIRACLES. - My mother!
COROMOTO. - The witch!
NARRATOR. - Miracles feel that she/he will faint, but their willpower maintains it of foot.
UGUETA. - Poor woman. She/he has the counted days, if it doesn't leave that state soon. Now I should return to the hospital.
MIRACLES. - Doctor, the woman of which has just mentioned is my mother!
UGUETA. - Their mother?
COROMOTO. - Yes, as she/he hears it, this youth's mom.
UGUETA. - I thought that to anybody of their family it interested him the state of this lady's health. The poor person has suffered so much.
MIRACLES. - Doctor, would believe me if I tell him that I ignored the state of my mother's health totally.
UGUETA. - Unheard, but I can believe him.
COROMOTO. - No, believe him. That lady sometimes behaves in a strange way... I always knew that it was half loquita.
MIRACLES. - Doctor, tell me how I can arrive to the place in which my mother is.
UGUETA. - Good, she can not receive visits at this time and I don't go to the sanatorium in which she is, but I can leave them in road, so that they ask.
MIRACLES. - She/he would thank it to him in the soul.
NARRATOR. - Miracles and Coromoto take off the sirvientan attire
UGUETA. - In road.
NARRATOR. - and they make mutis with Ugueta. Saúl leaves the room. She/he comes continued by Renato.
SAUL. - Friend, I am crazily in love with Cori.
RENE. - Cori?
SAUL. - The friend of your cousin Miracles.
RENE. - Two youths that were presented as Mili and Cori only knew. Mili is that of the picón.
SAUL. - That is your cousin.
RENE. - My cousin Mili is?
SAUL. - Very simple: Diminutive of Miracles?
RENE. - I suppose that Mili.
SAUL. - Diminutive of Coromoto?
RENE. - I suppose that Cori.
SAUL. - You suppose very well. Cori, is a charming girl.
RENE. - Much care, my key, won't be that you will look for a mess with the aunt.
SAUL. - Care has to have you. I saw you putting him the eye to the cousin.
RENE. - She/he didn't know that she/he had cousin, but neither repeat that I was looking him the soul. Do you believe that the girls will eat up the story?
SAUL. - In Timotes the reality and the fantasy are a single thing. In Caracas it should not be very different. If my dad says that your mom flies you/he/she is because he saw it.
RENE. - That is a story, Saúl.
SAUL. - I count or not, today she/he plays you to fly to you.
RENE. - That is as of cinema.
SAUL. - As of cinema it is what is happening to me with Cori. I want to see him the face; that smile; that looks me with those eyes; that makes me feel as the prince that comes to save her.
RENE. - She/he looks, I never had you speaking this way. Do you eat that you are sick?
SAUL. - I admit that I am sick. Of love.
RENE. - Who will the dad of the aforenamed one be?
SAUL. - Who? The man with which I have to speak so that it approves my relationship with that girl.
RENE. - They say that she/he made my mom suffer a lot before she/he knew my father that for that reason aunt Ugueta took it to Timotes. Many believe that it is dead.
SAUL. - Native history. She is daughter of the famous Chicken.
RENE. - It is this way.
SAUL. - It doesn't care, I am in love and the love overcomes any obstacle.
NARRATOR. - Suddenly the youths listen noises. They are Miracle-who is made call Choir - and Coromoto
• who has adopted the motto of Mili -. They want to listen the topic on which the boys discuss, without suspecting that René and Saúl have a plan.
Saúl. - (Sotovoce)¡Son them!
NARRATOR. - All the this texts starting from this moment will have a cursilísimo theatrical tone.
SAUL. - René, what does it happen you? Why do you behave this way?
RENE. - Where is Mili?
SAUL. - Who is Mili?
RENE. - Aunt's sirvientica Ugueta.
SAUL. - What does it pass with her?
RENE. - I will violate it!
NARRATOR. - Coromoto will scream, but Miracles cover him the mouth and it persuades it to stay and to continue listening.
SAUL. - That could bring us disastrous consequences with Mrs. Ugueta!
RENE. - She/he is only a maid! All know that the maids are fresh meat for the men of the house
SAUL. - And if she/he speaks with your aunt?
RENE. - The murderer. To her and their partner. And later I toss their bodies in some valley of the Hill of the Avila.
NARRATOR. - Coromoto tries to scream and again it is retained by Miracles. Both cry of fear, in silence and with Murine, the miracle of the artificial tear.
SAUL. - To Choir also?
RENE. - And to how many they are crossed. After they put me that injection in the Avenue San Martin I have felt that my animal instincts have overflowed. I am an animal...! and the Mili will feel my force!
NARRATOR. - Coromoto is released of Miracles and it leaves escaping as quickly as possible.
RENE. - What is that? I listened a noise.
NARRATOR. - Miracles will escape, but René opens the door and evidence its presence.
RENE. - You were spying us!
SAUL. - Choir!
NARRATOR. - Epic poetry, of terror.
MIRACLES. - Gentlemen... She/he will enter and I listened voices and I preferred to wait. She/he will take advantage to go casel greengrocer...
When you opened up as if I was a snooping one...
NARRATOR. - She/he cries of fear.
SAUL. - Please, don't cry Choir. I believe you.
MIRACLES. - Thank you, Mister Saúl.
SAUL. - Tell me Saúl, to dry.
MIRACLES. - It is well, Mister Saúl, to dry.
RENE. - Be not she-ass! What you tell him Saúl nothing else!
MIRACLES. - Be well Mister Saúl nothing else!
SAUL. - Don't scream her.
RENE. - Choir, where is Mili?
MIRACLES. - I don't know it, Mister. Today is its free day and I believe that she/he went to visit its dad.
RENE. - And does dad have?
MIRACLES. - A very strange gentleman that gives fear. With telling him that there are people that believes that that gentleman is a vampire suck-blood.
RENE. - And I will suck her another thing!
MIRACLES. - Oh!
SAUL. - René, respects to Choir!
RENE. - That comes to my room in what arrives!
NARRATOR. - She/he makes mutis toward their room.
MIRACLES. - I believe that we should call to the police.
SAUL. - Don't worry. I am here. With you.
MIRACLES. - Please, Mister Saúl-anything-more, don't tell me those things.
SAUL. - Do you believe in the love?
MIRACLES. - I am very young to be thinking of those bolserías. The decent young ladies think of other things.
SAUL. - Forgive me, Choir; you are right. I am a dreamer one.
MIRACLES. - Why?
SAUL. - You will say that I am a lunatic. Or that I want to take advantage of you. But something very strange it is passing in all my being from the moment that I saw you. She/he will look like each other precipitate and premature... But me...
MIRACLES. - You?
SAUL. - Won't you make fun of me, truth?
MIRACLES. - To make fun? Why?
SAUL. - Because me...
MIRACLES. - If?
SAUL. - I am crazily...
NARRATOR. - A scream of René interrupts the scene.
RENE. - Saúl, come immediately!
SAUL. - I should go.
MIRACLES. - I know it.
SAUL. - Will you wait for me?
MIRACLES. - The time that is necessary.
SAUL. - I return immediately.
NARRATOR. - She/he makes mutis.
MIRACLES. - Oh, Mr.! What should I make? I believe that I am falling in love like a fool of Saúl. Sudden. As my mother of my father she/he fell in love. And mom is not even close so that she can give me an advice. Where will my mother, Virgencita be? Help me to find it with well where she/he wants him to be. God willing my cousin doesn't make anything to Coromoto. My God, what does it prove this it is? What began as a game is becoming a terrible nightmare. Help us to leave good way from this to all. If she/he knew how to sing you she/he would offer my voice... Saúl... What is it passing in me? Why can not I stop to think of Saúl? My head tells me that it is a madness, but my heart seems that she/he wanted to be left my chest just by thinking of that man. No; I should not listen what loves me. It is not well.
NARRATOR. - Miracles escape to their room. Ugueta returns, dressed as Doctor Dominguez and she/he doesn't notice that after if it is Coromoto with a shotgun and in attack attitude. Secret, it passes to the room of Ugueta without she can discover it.
UGUETA. - It is hour that Mrs. Ugueta returns to its home.
NARRATOR. - Saúl, comes out and it is surprised.
SAUL. - Doctor! Why has she/he returned?
UGUETA. - Because here there is something strange and I want to know what it is. I hope they have auyentado to the onlooker and they have put him fear to my daughter, so that they never believe that they are more intelligent than their mother.
SAUL. - We have terrified Mili, but Choir still continues for these sides.
UGUETA. - I will have to take charge yo,personalmente.
SAUL. - If you say it.
UGUETA. - I say it.
NARRATOR. - Dark. Final of the square number four Saúl will be able to declare its love to Miracles? Will she accept it? Will René complete its threat? What will Coromoto make with the weapon that she/he brought? Will it attack Ugueta? These and other answers in the next square outcome –el - de“Un love like of Walt Disney”, thanks to The house of the Culture of Baruta, The Governorship of Baruta and Murine.




A love like of Walt Disney.
Author: Caesar Red Eduardo Márquez.
V
The Love

NARRATOR. - I square Fifth. In the dawn you desli-za the figure of concerned Saúl. She/he comes followed by René.
SAUL. - Now your aunt returned. She wants him to harm to Choir... And I am not able to... She is so sweet, it is so innocent. I prefer to leave to another place... and if it is necessary I take it to me to her.
RENE. - You are totally crazy, my key. To where will you leave? You don't know Caracas.
SAUL. - Had you seen me never this way, certain?
RENE. - Never.
SAUL. - Myself is surprised of this that I sit down. I thought that I could never spend.
RENE. - What does she/he spend, old?
SAUL. - I am in love with Choir.
RENE. - Please, Saúl, you have just known it.
SAUL. - Love at first sight.
RENE. - Be not infantile. You come going out of the matter with the woman of the owner of the cochinera,que she/he made you until crying - and you will dive in this ridicule.
SAUL. - It is not a ridicule... I won't harm to Choir, and if to you you are happened to put him above a finger you will do them with me.
RENE. - Are you threatening me?
SAUL. - You take it like want.
NARRATOR. - Saúl will make mutis toward the street.
RENE. - To where do you go at this hour?
SAUL. - I need to walk.
RENE. - This is not Timotes, my key.
SAUL. - I already know it.
NARRATOR. - She/he makes mutis. A masculine image leaves the room of Ugueta and it hits in the head to René and she/he leaves it unconscious. It is Coromoto.
COROMOTO. - With me one is not able to just like that.
NARRATOR. - The girl ties to René and you/he/she puts him
A handkerchief in the mouth. Then it leaves and she/he returns pointing to Ugueta who is hundcuffed and also gagged.
COROMOTO. - We go. To walk. So they wanted to give me another sustico so that she/he didn't return.
UGUETA. - Umjú.
COROMOTO. - We will hope the other Christian arrives so that we clarify this guarandiga.
NARRATOR. - Miracles leave their room.
MIRACLES. - What this is!
COROMOTO. - Leave you of “faramayerías” that will already clarify this matter!
MIRACLES. - What matter?
COROMOTO. - That of the man that you/they injected and that she/he wanted to violate me! I love you that all this is idea of the doñita Ugueta, to give us a “sustico” for “brinconas.”
MIRACLES. - Why? Mom! Where were you? They told us that you were hospitalized.
COROMOTO. - She/he told them to us herself dressed of doctor, bag.
MIRACLES. - Mom!
NARRATOR. - Saúl returns, you go to Coromoto with the weapon in the hand, she/he believes that she/he is a thief and when it will throw to the girl above, she/he is escaped a shot and Ugueta it is thrown in the floor being made the dead one.
UGUETA. - Oh!
RENE. - Where am I?
SAUL. - What did you make, the demon's woman?
MIRACLES. - Coromoto, you have killed my mother!
RENE. - Why am I tied...? Uff my head!
COROMOTO. - It is certain. I am a murderess!
SAUL. - I go you to...!
MIRACLES. - No, Saúl, please, all this has an explanation.
SAUL. - As your you say, my love.
NARRATOR. - Ugueta incorporates.
UGUETA. - Now they will listen me.
ALL. - Ugueta!
COROMOTO. - The dead one!
UGUETA. - This whole mess I have caused it... Because she/he had to tell to my family that I had not been single definitively, as all they thought there, in Timotes. I married and of the fruit of that love my daughter, Miracles was born.
SAUL. - Choir.
RENE. - That good news aunt.
UGUETA. - Not so good, because soon after of my marriage, Caffarder died and I had to raise alone to my small one.
RENE. - And then we and you arrive you felt discovered.
UGUETA. - And I realized that my daughter and a curious neighbor, they were very delighted with the arrival of you.
MIRACLES. - And then we decide to make ourselves go by maids.
COROMOTO. - And until we change ourselves the names, so that everything was more truthful and the witch, that is to say Mrs. Ugueta, it didn't accuse us easily.
SAUL. - I believed this way that you were Coromoto, when you are really Miracles.
RENE. - That is to say that was not my cousin to who I looked him the panties.
COROMOTO. - What panties?
SAUL. - Don't pay a lot of attention to René, it is very fond of joking
RENE. - Aunt Ugueta asked us that we scared them, so that they didn't continue inventing and we found it well while we got used to the life of Caracas.
SAUL. - And then what none of us could suspect happened.
RENE. - The love arrived at this house.
UGUETA AND COROMOTO. - The love?
MIRACLES. - Yes, mom. Yes, Coromoto: The love.
UGUETA. - The love of who with who?
SAUL. - The love of their daughter Miracles, to who I knew as Choir, with this servant.
UGUETA. - How?
COROMOTO. - With reason you were so ridiculous.
MIRACLES. - Mother, I am also in love of Saúl Villarino.
NARRATOR. - The women are moved and they cry. Murine lacrimal, for the cry of the end.
SAUL. - And we want you to give us their authorization.
UGUETA. - But if your you have just arrived, millet.
MIRACLES. - Mother, remembers how your relationship was with my father.
UGUETA. - It is true. Yes, I accept Saúl. But a lot of foundation that we are all in the same house.
And I want to take advantage to request him you excuse Coromoto for the bad while that I made him happen.
COROMOTO. - And me for the arrogances.
RENE. - Today is a day of celebrations. Because another time we have the opportunity to see the happiness come closer to nustra family.
SAUL. - And we love them that although it can seem them difficult and confused. The love at first sight exists.
MIRACLES. - And it is a love...
ALL. - “A love like of Walt Disney.”
NARRATOR. - Dark. Final of the piece. They can applaud.
End.
To cease red eduardo Márquez.

September 6 1998.


A love like of Walt Disney.
Author: Cesar Eduardo rojas Márquez.

CHARACTERS:


NARRATOR.
MIracles CHAFFARDER MENESES.
SAÚL VILLARINO diaz.
RENE MENESES.
COROMOTO HERNÁNDEZ.
UGUETA MENESES VIUDA DE CHAFFARDER.



This piece belongs to the trilogy “norteamerica icons” (aspirations latinoamerica-nas), composed for:

1.-Como in the hollywood movies.
2.-Vampiros as of broadway.
3.-Un love like of walt disney.


I continue thinking that we have wanted to be as of broadway, of hollywood or of walt disney, and we have finished being a grimace, a very faulty imitation... a sketch.


To cesar eduardo rojas marquez.
























Un amour aime de Walt Disney.
L'auteur: Caesar Eduardo Márquez Rouge.
I
L'arrivée de Renato et Saúl.


L'ARRIVÉE de LE Public DÉCOUVRE UN ESPACE QUI CHERCHE pour IMITER L'INTÉRIEUR DE la MAISON MODESTE de LA BERGÈRE. Il n'y a pas de MURS, TOUT CELA a DÉFINI POUR UN ESPECIE DE TIRRO QUI CHERCHE pour INDIQUER L'INTÉRIEUR (il SALE DINER PIÈCE DU CASA)Y L'EXTÉRIEUR (THÉATRE) RANGER L'ESPACE. LA MUSIQUE est ÉCOUTÉE AVEC celui que TOUS LES CINÉMAS PRODUITS COMMENCENT POUR WALT DISNEY (LA ÉTOILE BLEUE DU PINOCHO CINÉMATOGRAPHIQUE). Un GARÇON PARAIT, a HABILLÉ COMME LE PERSONAJE PEPE GRILLO CÉLÈBRE AVEC GRACE.
Le NARRATEUR. - Du monde de l'illusion et le Rêve “UN amour aime de Walt Disney” (il Fait une pause) Caracas, 1960. Maison de toits rouges du Boulevard Penichez, dans Le Silence. Il est la maison d'Ugueta Meneses. Le peu de Mobilier, mais aide-infirmier avec une matière plaisir féminin. Une Porte. Une fenêtre. Une table avec les images d'Alfredo, María Eugenia, leur petit fils, Ugueta avec un homme et une fille (leur mari et leur fille), et H.E. et Chaurita avec leur petit fils. Cette exposition a été parrainée grâce à la collaboration de: (il Nomme des garants. She/he va jusqu'à leur place à un côté du scénario et il commence les actions qui seront vues dans le morceau). La Porte s'ouvre lentement et un chiffre masculin imposant paraît. She/he est Renato Meneses, Alfredo premier-né et María Eugenia. She/he s'élève arriver de Timotes à la maison de leur tante Ugueta. She/he laisse leur bagages dans le centre du scénario les mêmes she/he des années l'ont fait leur tante Ugueta quand il est arrivé à Timotes avec leur mère.
RENÉ. - Je suis arrivé finalement! Passez-vous!
Le NARRATEUR. - She/he entre le Saúl Villarino timide, fils de Chaura et Hector Enrique.
SAUL. - Ici?
RENÉ. - C'est l'adresse que je m'indique Papá dans cette carte de la présentation.
Le NARRATEUR. - Saúl regarde la maison. She/he découvre les images.
SAUL. - Oui, ici il est. C'est Don Alfredo et Mme María Eugenia, this it should be Mrs. Ugueta avec une famille et ici jusqu'à ce que nous soyons papa, maman et moi chiquitico.
RENÉ. - Il est certain. Alors oui, il est ici. Nous finalement permission qui ville.
SAUL. - Ne soyez pas ingrate. Dans cette ville nous sommes nés et là nos parents sont restés.
RENÉ. - Mais tante Ugueta est ici, dans Caracas, dans le capital, dans la civilisation et la culture. “Le repos est montagne et serpent.”
SAUL. - Cependant je ne trouve pas Penichez partent de la civilisation, et s'il est il il ne sera pas de la partie de devant, parce qu'il est derrière les blocs de Le Silence.
Le NARRATEUR. - Renato, aussi célèbre comme René, haciando cas négligent au commentaire de l'ami.
RENÉ. - Je sais que tante Ugueta sera très bien.
SAUL. - Où est-ce qu'il sera? Pourquoi est-ce que personne ne sera sorti pour nous saluer?
RENÉ. - L'assurance sera dans la rue, frotter des épaules avec la dernière chose dans l'information, avec le temps présent, avec la mode.
SAUL. - Et s'il est ce she/he ne veut pas nous recevoir? S'il ne nous traite pas comme nous attendez?
RENÉ. - Nous sommes très jeunes et nous avons assez de vigueur et énergie. Est-ce que nous sommes comme d'annonce publicitaire Oui ou pas? S'il nous traite mal nous pouvons partir avec notre musique à une autre partie.
SAUL. - Cela n'arrête pas s'inquiéter.
RENÉ. - Non plus je n'ai pas peur il à la vie le travail
SAUL. - Non plus je, mais...
RENÉ. - Avec l'argent vous pouvez acheter ce que vous êtes eus envie de... Vous et moi nous êtes venus pour faire richesse... Et si la tante devient ennuyer nous volons à un autre ciel et déjà.
SAUL. - Cela voulait écouter... Je ne veux pas revenir à Timotes parce que là ce le bandola qui me fait mauvais.
RENÉ. - Vous ne commencerez pas avec ce doble du paso un autre temps... Rosa regrettera avoir se marier avec Chien qui du cochinera... Je dois le voir vous demander le pardon.
SAUL. - Renato Meneses, je ne veux pas mentionner à Rosa Higuera plus de Sec. Je vous remercie vous pour ne la nommer jamais dans ma présence plus... She/he me fait du mal beaucoup de.
RENÉ. - Je me l'assieds.
SAUL. - J'aussi. Laissez-nous parler d'une autre chose.
RENÉ. - J'ai faim.
SAUL. - Comment étrange!
RENÉ. - Le voyage m'a ouvert l'appétit
SAUL. - Je devrais admettre qu'à moi aussi.
RENÉ. - Quand nous allons par la fin de la montée j'ai vu cela à côté de la banque il y a un hôtel que les you/they appellent le Président et ils vendent une plaque des spaghettis pour cinq bolivars.
SAUL. - Pour cinq Bolivars! Vous êtes fou!
RENÉ. - A ce she/he du temps en paierait cent, avec tel d'enlever cette sensation de trou douloureux dans mon estomac.
SAUL. - Ni l'un ni l'autre parce qu'ils avaient des diamants. Les deux bolivars et le she/he va bien.
RENÉ. - Vous êtes dans Caracas.
SAUL. - Et cela qui?
RENÉ. - Ici tout est plus cher.
SAUL. - Quel she/he va! Je vous propose une chose: quand nous sommes venus j'ai vu des places dans ce qui ont servi bon marché. Nous nous donnerons un “vueltecilla” d'Amgelitos à Jésus.
RENÉ. - Mais si ils sont seulement trois bolivars.
SAUL. - Nous voulons être millionnaire.
RENÉ. - Et pour cette raison je devrais passer faim?
SAUL. - Faites je me marie ou vous paie.
RENÉ. - Faites-moi a convaincu Saúl. Comment persuasif! Nous allons, d'Angelitos à Jésus.
Le NARRATEUR. - Saúl -refiriéndose aux valises -.
SAUL. - Et ce?
RENÉ. - Nous le laisserons même là. La tante va ce chemin pour savoir que nous arrivons, si vous arrivez avant nous.
SAUL. - Nous allons.
Le NARRATEUR. - Ils font le mutis. D'un des portes qui donnent vers une pièce un assez jeune she/he du garçon paraît. Il est Milagros Chaffarder Meneses, la fille secrète d'Ugueta. Avec beaucoup de prudence il vérifie que les jeunesses ne restent pas dans la maison et le she/he revient pour informer leur mère.
Les MIRACLES. - Ils sont déjà partis, maman!
Le NARRATEUR. - Ugueta Meneses, aujourd'hui paraît veuve de Chaffarder. She/he vient très perturbé avec leur costume sombre, leur ventilateur et leur foulard bleu.
UGUETA. - Est-ce qu'ils sont partis?
Les MIRACLES. - Il paraît qu'ils se sont évanouis de faim.
UGUETA. - Cela me donne quelques minutes afin que nous pouvons parler.
Les MIRACLES. - She/he parle, mère.
UGUETA. - Fille, je me sens embarrassé ainsi. Je ne sais pas ce que je devrais faire dans ce cas.
Les MIRACLES. - Il n'est pas nécessaire que vous cachez la vérité, mère.
UGUETA. - Ce que mon frère Alfredo et M.E diront., quand ils trouvent cette réalité terrible
Le NARRATEUR. - Ils pleurent. Avec Murine nos actrices ont aussi cette larme aime de Walt Disney.
Les MIRACLES. - Vous me faites se sentir très mal, mère...
UGUETA. - Aucun; fille de mes amours... si vous me compreniez.
Les MIRACLES. - Je comprends vous pouponnez. Je suis aussi une femme.
UGUETA. - Je ne peux pas vous arrêter pour voir comme une fille.
Les MIRACLES. - Maman, est-ce que vous aimiez mon père?
UGUETA. - Aimez on démonté. Il était un amour tumultueux, torride, soudain. Comme ils aiment l'un l'autre les ceux désespérés seulement... Le lunatics. Il était, peut-être, comme une prémonition que je l'ai prévu... Sans conscience je savais que la tragédie nous a entourés, dans un chemin inexplicable... Qu'est-ce qu'il s'est passé? Je ne le sais pas. L'un jour il a point et il n'a pas déplacé, les she/he n'ont pas réveillé plus... Il dormait. Et avec leur rêve ma vie, mon amour a été pris et j'étais seul, dans silence, confus, dans silence et avec vous dans mon estomac des deux mois si seuls.
Les MIRACLES. - Comment long est-ce que vous étiez avec papa?
UGUETA. - Il était un amour à première vue qu'il a duré trois mois seulement, comme si la vie l'avait donné que dernier cadeau. Personne n'a trouvé. Je ne peux pas dire qu'il était un secret, parce que je ne l'ai pas caché. Mais je mange je ne pourrais jamais le mentionner pour miner, parce que Timotes est très lointain, ils devraient croire que je continue être un célibataire ridicule.
Les MIRACLES. - Vous avez caché ma naissance.
UGUETA. - Non, fille, je ne l'ai pas caché. J'ai fait mention pas seul lui et eux ne se sont pas inquiétés pour se demander. Au commencement je me suis senti déloyal vers vous, mais peu à peu je suis allé été utilisé à ce trou silencieux entre eux et vous, et ces she/he m'ont fait attendre avec désespoir que cela s'est passé.
Les MIRACLES. - Maintenant le fils d'oncle est arrivé Alfredo et tante M.E.
UGUETA. - Je le sais.
Les MIRACLES. - Qui est leur compagnon?
Le NARRATEUR. - Ugueta lui montre l'image du Villarino.
UGUETA.— Il est il. She/he s'appelle Saúl, le fils de Chaurita et H.E.
Les MIRACLES. - C'est dire cela est aussi comme votre neveu.
UGUETA. - Je crois.
Les MIRACLES. - Qu'est-ce que vous organisez faire, maman?
UGUETA. - Supposer les choses. Vous êtes ma fille, ma vie. Le fruit de mon occasion seule avec le vrai amour et je ne le cacherai pas.
Les MIRACLES. - Mère. Je pensais que les she/he mourront de douleur.
UGUETA. - Douleur?
Les MIRACLES. - Je pensais que vous me nieriez.
UGUETA. - Fille, je vous aime.
Les MIRACLES. - Et j'à vous maman.
Le NARRATEUR. - Ils frappent sur la porte.
UGUETA. - Qui sera? She/he s'ouvre. L'assurance est les garçons. Je me changerai à ma pièce.
Le NARRATEUR. - Ugueta va à sa pièce et le she/he des Miracles s'ouvre. Il est Coromoto Hernández, la fille de Le Poulet, le marchand de légumes. She/he vient à “fouiner” et être informé des dernières nouvelles.
Les MIRACLES. - Chorale!
COROMOTO. - Mili!
Les MIRACLES. - Et cette surprise?
COROMOTO. - Vous êtes une personne égoïste. Est-ce que vous croyez que je n'ai pas vu ces choses qui sont arrivées à cette maison?
Les MIRACLES. - Coud?
COROMOTO. - J'ai senti, dans un moment, comme dans l'enfer, parce que les deux feu de la permission pour où ils se passent.
Les MIRACLES. - Ne soyez pas frasquitera, Coromoto, ainsi.
COROMOTO. - Frasquitera et refistolera si le she/he vous donne le désir, mais je ne suis pas sans au moins pour les jouer le manotas à ces muchachones Comment ils s'appellent? Pour où est-ce qu'ils sont partis? Où est-ce qu'ils dormiront? A qu'est-ce qu'ils sont consacrés? Est-ce qu'ils seront beaucoup de temps dans cette maison? La femme qui angoisses je votre parle “evasividad!”
Le NARRATEUR. - Il fait une pause.
Les MIRACLES. - She/he est mon cousin Renato et leur ami Saúl.
COROMOTO. - Pourquoi est-ce que j'aurai écouté cloches du verre?
Les MIRACLES. - Parce qu'il est dans mode, idiot.
COROMOTO. - Et quand est-ce que vous me présenterez à ce “bonbons au caramel?”
Les MIRACLES. - Je crois que les she/he ne seront pas possibles.
COROMOTO. - Si Betancourt avait renversé Pérez Jiménez, ici tout qu'on peut, ingrate.
Le MIRACLE. - She/he n'est pas dû à ma volonté.
COROMOTO. - Expliquez à moi.
Les MIRACLES. - Ils ignorent mon existence
COROMOTO. - Cela qui?
Les MIRACLES. - Aujourd'hui, après dix-huit années, le secret va à develarse et moi je serai présenté dans famille, si les she/he peuvent appeler ce chemin lui-même.
COROMOTO. - Et votre mère?
Les MIRACLES. - Se préparer pour l'événement.
COROMOTO. - Alors le mangazo ne vous connaît pas.
Les MIRACLES. - Non plus j'à lui.
Le NARRATEUR. - Coromoto a une idée.
COROMOTO. - Miracles, il distrait Mme Ugueta, while I fix some things to have a good time mientrs a little we know to your companies. Une occasion idéale démontrer qui le sexe le plus intelligent est. Peut-être et jusqu'à ce que nous finissions être présidents de la République.
Les MIRACLES. - Qu'est-ce que vous inventerez, Chorale?
COROMOTO. - Cela qui “est-ce que nous allons” inventer Mili? Qu'est-ce que nous inventerons?
Le narrateur. - Sombre. Dernier du premier carré de “UN amour aime de Walt Disney.”

Un amour aime de Walt Disney.
L'auteur: Caesar Eduardo Márquez Rouge.

II
Un COUP POUR LA CULASSE.

Le NARRATEUR. - Deuxième carré de “UN amour aime de Walt Disney.” heures plus tard. Ugueta part son habiter-ción et le she/he rencontre avec les Miracles et les Coromoto. Les jeunesses sont remarquées très nerveux et Ugueta truque pour ne pas remarquer le malaise.
UGUETA. - Est-ce que les garçons ne reviennent pas encore?
Les MIRACLES. - Ce étrange.
COROMOTO. - Est-ce qu'il sera que vous perideron?
UGUETA. - Je ne crois pas. René est fils d'Alfredo et María Eugenia.
COROMOTO. - Et cela qui avec cela?
UGUETA. - Mon frère est un homme mondial, cher. She/he a marché pour Europe que dix années et she/he n'ont pas été perdus.
COROMOTO. - Mais sa maman, n'a pas laissé Caracas presque jamais et presque elle est perdue avec papa.
UGUETA. - Même. Ce monsieur que les you/they appellent Le Poulet et ce she/he est votre père, non plus le she/he ne le donne pas pour les bas à mon frère Alfredo.
Le NARRATEUR. - Ugueta fera le mutis très importun.
Les MIRACLES. - Pour où est-ce que vous allez maman?
UGUETA. - A l'église. Demander un conseil au Mr..
COROMOTO. - A plus qu'assez cela qui, s'il peut être su?
UGUETA. - Miracles, fille, vous ami que Coromotico connaît que je déteste des gens curieux.
COROMOTO. - Et alors pourquoi le she/he parle incomplet devant le spectateur? C'est morbidité.
UGUETA. - Effronté. Je ne le supporte pas. J'espère quand ma maison revient il est clair des voisins impertinents.
Les MIRACLES. - Vous allez calme, maman.
COROMOTO. - Dieu qui le veut peut arriver à quelque côté la tranquillité que le she/he cherche.
Les MIRACLES. - Coromoto, respects ma maman!
Le NARRATEUR. - Ugueta part indigné et le she/he s'appuie dehors pour écouter pour la fenêtre. Les miracles maintiennent l'attitude importune jusqu'aux permissions de la mère. Soudainement ils commencent à rire dans un chemin étrange et ils commencent à mettre des habits a utilisé par les bonnes de gens des bonnes maisons de la place. Les filles commencent à parler comme gens très incultes. La musique.
COROMOTO. - Ce travail du silvienta va j'à permitil meilleur conocel au muchachones.
Les MIRACLES. - Nous avons ce que du sabel qui ce comel du plefieren, parce que si pas je ne vais pas à sabel qui doit un cocinal.
COROMOTO. - Est-ce que nous apportons le bagages à la pièce?
Les MIRACLES. - Aucun muelta! Les lits sont faits et et les pièces propres. Mais valises du calgal jamais.
COROMOTO. - Vous aurez peler et hacher des pommes de terre également.
Les MIRACLES. - Pendant quelques temps et sans découvertes de la maman dehors.
Le NARRATEUR. - Coromoto, fins. la fenêtre et le she/he parle à lui avec plus de tranquillité à Coromoto. Ugueta ne peut pas continuer espionner et le she/he décide de laisser la place.
Les MIRACLES. - Pourquoi est-ce que nous ne nous changeons pas les noms?
COROMOTO. - Nous changer les noms? Et pour quelle raison?
Les MIRACLES. - Afin qu'ils ne nous reconnaissent pas, faites l'idiot, comme dans le radionovelas.
COROMOTO. - Ah! Bon oui!
Les MIRACLES. - Vous êtes des Mili qui sont diminutif de Miracles qui sont mon nom.
COROMOTO. - Et vous Chorale qui est Coromoto mais minuscule.
Les MIRACLES. - Nous prenons le soin cette santé de l'entrée, à titre de précaution
COROMOTO. - Oui, jeune dame. Aujourd'hui cela mange dans cette maison?
Les MIRACLES. - Pavillon Créole avec les rails.
COROMOTO. - Comment bon, parce que j'ai une famine!
Les MIRACLES. - Les bonnes mangent de últinmo, s'il est de la nourriture de que les you/they sont servis les messieurs. Ou ils sont cuits séparé.
COROMOTO. - Quelle malchance! Esclave et muelta de faim. Dieu qui veut quelques pitiés vaillantes de mon sufirimiento.
Est-ce que le she/he est capable à dalme un curumbeta ou un PTT avec quel fuelza va à coleto du pasal? Comment est-ce que je vais à arreglal du podel le cualto aux jeunesses?
Le NARRATEUR. - Et le she/he truque pour pleurer. Feinte des miracles qu'il est déplacé. Avec nos actrices Murine ils ont larme des héroïnes. Si le she/he veut pleurer, Murine dans leur maison.
Les MIRACLES. - Vous m'avez convaincu, mujel.
COROMOTO. - Une pitance au moins?
Les MIRACLES. - Je n'ai pas dit cela. J'ai dit que vous m'avez convaincu.
COROMOTO. - Pour-esclavage. Le Nazi.
Les MIRACLES. - Ce que vous voulez... Bien que si vous m'aidez à borne de l'arreglal la nourriture au mejol que je plains.
COROMOTO. - Il est cela il y a ce recibil au rorines aimez ils méritent.
Le NARRATEUR. - Ils font le mutis vers la cuisine. Soudainement et avec beaucoup de prudence Ugueta revient à l'intérieur de la maison.
UGUETA. - Avec que cela a. Ils prendront un sorprecita. J'ai pour intercepter les garçons avant les ceux clownesques les voit seulement. Coromoto veut être vivant.
Je crois que tout en amusera de plus qu'ils ils attendent.
Le NARRATEUR. - Les garçons arrivent.
RENÉ. - Bon.
UGUETA. - Bon.
SAUL. - Autorisation.
UGUETA. - Oui?
RENÉ. - Vous Mme Ugueta Meneses is?
UGUETA. - Je crois.
SAUL. - She/he est votre tante, votre she/he allaite she/he dit qu'il était ainsi les she/he sont allés à she/he vous répondra.
RENÉ. - Je suis Renato, le fils d'Alfredo et M.E., mais René peut m'appeler
UGUETA. - Alors vous êtes mon neveu. Et si je ne fais pas d'erreur ces she/he du serveur attirants devraient être le fils de H.E. et Chaurita.
SAUL. - Ils m'appellent Saúl.
UGUETA. - Quel plaisir si grand avoir des hommes si beau dans cette maison!
RENÉ. - Remerciez-vous, tante Ugueta.
UGUETA. - Vous pouvez m'appeler Ugueta. Je trouve la tante trop cérémonieux.
RENÉ. - Aimez dites.
UGUETA. - Mais maintenant ne parle pas très haut.
SAUL. - Et que pourquoi?
UGUETA. - Je ne veux pas qu'ils écoutent que vous êtes déjà dans la maison. René, Saúl, je suis une dame dans malchance, on tue et j'ai besoin que quelqu'un je d'une aide être capable de venir annulé d'un problème sérieux que j'ai.
RENÉ. - Est-ce qu'il est très sérieux?
UGUETA. - Beaucoup.
SAUL. - Compte sur nous pour ce qui est.
UGUETA. - Il est bien, mais laissez-nous ne parler ici, le causer de mes problèmes pourrait paraître et je ne trouve pas commode cela est à l'ainsi beaucoup de ce que je veux les demander. Parce que c'est un grand secret et tout devrait rester ce chemin. Est-ce qu'il est bien?
LES DEUX. - Très bien
Le NARRATEUR. - Ils font le mutis, mais avant de partir, Ugueta laisse une lettre dans le seuil de la porte. Sombre. Dernier du deuxième carré de “UN amour aime de Walt Disney.”


Un amour aime de Walt Disney.
L'auteur: Caesar Eduardo Márquez Rouge.
III
LE DANGER D'UNE PLAISANTERIE.

Le NARRATEUR. - Peu de minutes plus tard. Miracles et Coromoto paraissent, avec beaucoup de soin. Ils sont remarqués apeuré. Ils laissent la cuisine qui utilise le balai comme protecteur.
Les MIRACLES. - N'importe quoi
COROMOTO. - Je vous assure que j'ai écouté bruits dans cette pièce.
Les MIRACLES. - Ne veuillez pas la conscience qu'est-ce que vous êtes traicio-nando soyez?
COROMOTO. - Permission le guarandinga, fille!
Le NARRATEUR. - Coromoto découvre la lettre qu'Ugueta a laissé.
COROMOTO. - Oh! Ah! Regardez! Une enveloppe! Est-ce qu'il est pour vous?
Le NARRATEUR. - Les miracles l'enlèvent et il le corrige.
Les MIRACLES. - Il appartient à maman.
COROMOTO. - De Mme Ugueta? Mais si elle était ici le she/he fait...
Les MIRACLES. - Nous le lirons... Je crois pour savoir que le she/he dit le contenu de cette lettre.
Le NARRATEUR. - Ugueta paraît et le she/he nous raconte ce qui dit la lettre pendant que les filles l'ont lu.
CONTENU DU CARTA D'UGUETA. - Chère fille. Les miracles, le she/he pardonne ce she/he n'a pas eu la valeur pour
Parler avec vous... expliquer à vous qu'il est trop dur pour je, admettre avant mon neveu et leur ami, ma fiche avec votre père. A celui qui continuera aimer jusqu'à la fin de l'éternité, quand le she/he nous joue pour partir de la planète pour continuer chercher le bonheur. Il est si dur d'être une femme seule. Maintenant je veux s'échapper, s'échapper comme un lâche, ranger mes idées et retrouver la confiance que j'ai toujours eu dans moi-même. J'ai besoin se préoccupe des docteurs. Dans ces moments je m'assieds la langue endormie et mes engarrotadas des mains sont pratiquement... Je vais à un she/he du docteur de l'ami se marie, afin que le she/he ne doit être il déplace et a engourdi par le repos de mon existence... Et peut-être, ce chemin, peut-être je peux arrêter avant le monde pour crier ma vérité... Bien que je ne croie pas que beaucoup de soin il, parce qu'ils pourraient le considérer un pasjuatada d'une existence faible, noble et cédé par la force de l'amour... Comment malheureux je suis! Je vous laisse seul pour le temps être. Dans la compagnie de votre cousin et leur ami Saúl et la chose seule que je vous demande est que vous ne partez pas ce she/he entre dans la maison le jour entier la fille du moscamuerta du Pollo Carlos Hernández, parce que s'il sort avec un ventre qui est dans un autre côté, parce que ma maison appartient aux gens bienséants. She/he essaie de ne pas l'entendre. Je sais que vous êtes une femme correcte, il serait et que vous vous donnerez votre place avant toute difficulté. She/he vous aime et je déteste celui mis. Vous pouponnez. Affichez il date: Si la fillette qui lit cette lettre, parce que je sais leurs inclinations, je vous remercie qu'avant de soulever toute insulte contre moi she/he pense à leur mère, parce que j'ai demandé à Père Noël Marta afin qu'il rend leur maman double ce qui veut pour moi. Votre maman Ugueta veuve Meneses de Chaffarder.
Le NARRATEUR. - Ugueta disparaît. Le miracle est frappé et est surpris. Coromoto qui avait été des boquia-bierta réagit.
COROMOTO. - Le destin nous a donné chance. Maintenant nous pouvons prendre à notre plan de la fin sans l'intervention du magicien qui est dire: votre maman.
Les MIRACLES. - maintenant je trouve dangereux. Principalement comprendre que nous ne savons pas comme ils sont ces garçons.
COROMOTO. - Ne soyez pas ridicule, femme! Comment est-ce qu'ils seront? Jeune, fort, viril, plein avec les hormones et avec une idée parmi front et il se détend.
Les MIRACLES. - Lequel?
COROMOTO. - Aimer.
Les MIRACLES. - Aimer?
COROMOTO. - Mais nous ne nous faisons pas illusions. Bien qu'il soit le même verbe le “aimer” pour les hommes il n'est pas la même chose qui nous arrête les femmes.
Les MIRACLES. - Vraiment?
COROMOTO. - She/he ouvre les yeux, fille. Nous nous avons montés à la montagne Russe juste
Le NARRATEUR. - Les coups sont écoutés à la porte.
Les MIRACLES. - Ils sont ils.
COROMOTO. - Toute la préparation?
Les MIRACLES. - Umjú.
COROMOTO. - Ouvert en haut!
Le NARRATEUR. - Les miracles vont s'ouvrir, pendant que Coromoto truque pour être très occupé avec le nettoyage de la maison. Saúl entre avec un faire tourner dans la main et apporter aux pistes à René qui tombe presque s'évanouit après être entré à la maison immédiatement. Les femmes sont terrifiées et ils crient.
Les MIRACLES. - Ce qui est ceci?
COROMOTO. - Qui est-ce que vous êtes?
SAUL. - Il aide... Aidez-moi, s'il vous plaît. Il est une urgence.
Nous avons besoin quelques-uns bande. Je ne sais pas ce qu'ils ont fait mon ami René. Je suis Saúl Villarino et ce she/he est mon ami René. Neveu du sra. Ugueta. Est-ce que vous devriez être leurs bonnes, vérité?
LES DEUX. - Oui.
SAUL. - Nous sommes arrivés pour peu d'heures de Timotes, et le voyage a été fait si long que nous arrivons affamer totalement...
COROMOTO. - Ne dit pas grossièreté dans cette maison!
Les MIRACLES. - Fille qui n'est pas une grossièreté!
COROMOTO. - J'ai lu dans les Sélections qu'ils l'ont appelé le sien dans un chemin très semblable.
Les MIRACLES. - L'affamer a faim!
COROMOTO. - Ah! Bon, mais soin avec une chose étrange!
SAUL. - Renato avait si faim que les she/he ont décidé que nous mangerons dans quelque taguara de ce qu'il y ont d'Angelitos à Jésus. La chose est que nous gauche, aimer du je trafique et la contamination de Caracas. Parce que là dans Timotes la chose n'est pas je mange ici... et soudainement il est parti de je ne sait pas où un homme aime de deux mètres et demi, et je le cloue un inyectadora à René.
COROMOTO. - Regarde, attend un moment que Renato est?
SAUL. - Le.
COROMOTO. - Et René?
SAUL. - Le.
COROMOTO. - Me fait la faveur et le she/he l'appelle pour un nom seul, parce qu'avec ce cambiadera des noms je finirai penser que vous êtes comme de dix mille hommes, quand il est un seul.
Le NARRATEUR. - Miracles qui prennent le mot et Saúl ont est captivé de la fille pendant que René prend l'avantage pour le mettre l'oeil à Coromoto.
Les MIRACLES. - Excuse.
SAUL. - Ce que vous voulez, jeune.
Le NARRATEUR. - Mensonge des miracles.
Les MIRACLES. - Je suis Chorale.
Le NARRATEUR. - Saúl ne le remarque pas.
SAUL. - Je Saúl.
Le MIRACLE. - Ce beau nom.
SAUL. - Ces belles lèvres.
Les MIRACLES. - Merci.
SAUL. - Son ce devrait être beaucoup.
Les MIRACLES. - Il est très vaillant.
SAUL. - Croyez-moi, je suis plutôt timide. Je suis perturbé avec leur présence.
Les MIRACLES. - Il me met nerveux.
SAUL. - Nous sommes deux.
COROMOTO. - Aucun; nous sommes trois. Est-ce que vous pouvez expliquer à moi le nombre, cette fille?
Le NARRATEUR. - Les miracles ne font pas attention à Coromoto.
COROMOTO. - Monsieur, Mme Ugueta is very strict with the treatment that we give to the strangers. Beaucoup plus quand ils apportent j'obtiens un il arme qu'il peut le causer la mort à qui le manque.
SAUL. - Mme Ugueta will understand perfectly that Choir calls me Saúl. Vous pouvez m'appeler M. Villarino.
Le NARRATEUR. - Saúl corrigera René. Coromoto veut frapper au garçon, mais Miracles il le met obstacle à à lui.
COROMOTO. - She/he est imbécile!
Les MIRACLES. - Il est adorable.
Le NARRATEUR. - Saúl écoute le commentaire des Miracles et quand les she/he viendront plus proche aux avis du she/he de la fille que René le putte l'oeil à Coromoto. Saúl lui donne un coup dans la tête et il le consterne.
SAUL. - Ils devraient m'indiquer la pièce disposée pour mon ami. Il est nécessaire du prendre pour se reposer. Il n'est pas sous conditions de rester sans she/he le voit un docteur.
Les MIRACLES. - Nous en appellerons un.
SAUL. - Nous avons apporté à un. Il arrête leur voiture basse le samán de Penichez.
COROMOTO. - Comment est-ce qu'ils l'auront su? Parce que les docteurs à maison sont chers.
SAUL. - Il était informel. Il est allé prendre à une dame qui est venue d'ici pour leur clinique de repos et nous l'aidons pour le mettre dans leur voiture et il l'a apporté à lui. Par hasard, quand cela de l'homme qui a injecté s'est passé à j'a Produit, il est venu de retour et il nous a aidés. Jusqu'à ce que les she/he nous aient prêté l'arme pour auyentar à l'étranger.
COROMOTO. - Et pour cette sélection de la raison qui pistolet dans la main?
SAUL. - Pour cette raison.
Les MIRACLES. - Vous avez habillé! Vous toujours de pensada!Traígalo mauvais ici, Saúl.
SAUL. - Ami votre si vous pesez!
Le NARRATEUR. - Ils font le mutis vers la pièce assignée aux jeunesses. Et alors le she/he fait leur entrée autoritaire Ugueta, a habillé comme le Dr. Dominguez Sisco. La musique.
UGUETA. - Oh, fille, ici je suis encore et vous jamais entrain qui est que je suis je. Nous verrons qui une surprise est prise!
Le NARRATEUR. - Sombre. Dernier du troisième carré de “UN amour aime de Walt Disney. Écrit et a dirigé par leur directeur auteur Red Caesar. She/he les raconte pour vous Je.

Un amour aime de Walt Disney.
L'eduardo Caesar marquez rouge -
IV
Souffrir d'amour.
Le NARRATEUR. - Nous continuons. Je rends carré le nombre quatre de “UN amour aime de Walt Disney” .Ugueta, vous faire pour aller par docteur et dans complicité avec ce récemment ceux arrivés, il laisse la pièce de Renato, accompagnée par les deux filles. She/he vient avec un aspect tout à fait inquiet.
Les MIRACLES. - Est-ce qu'il est très sérieux?
UGUETA. - Je devrais avoir les résultats des examens. Mais je les admets que je suis très inquiet. Ils sont les mêmes symptômes d'un malade qu'il a perdu la possibilité pour parler dû à leur carré télépathe et de déplacer les mains, pour ce qui est complètement isolé avec le monde externe. Comme l'est pour le temps qui est M. Renato.
COROMOTO. - Comment est-ce que c'est?
UGUETA. - La personne pauvre Chrétienne ne peut pas avoir toute attache avec le monde externe. Par le chemin que les she/he m'ont dit que, pour ce qui pourrait a l'intention communiquer, leur famille devrait vivre pour les alentours.
COROMOTO. - Pour ces côtés les femmes sont très saines. Il n'y a pas qui est malade.
UGUETA. - Parce que je l'assure que ce she/he vit ici. Leur dernier nom seul est Meneses. Comme cela du jeune Renato.
Les MIRACLES. - Meneses?
UGUETA. - Il est ce chemin... Et le she/he a un pas très commun mais nom très approprié au comportement de la femme.
Les MIRACLES. - Est-ce que les she/he se souviennent du nom de la femme?
UGUETA. - Dans ces moments je crois cela pas.
Les MIRACLES. - Est-ce qu'Ugueta sera?
UGUETA. - Le même. Ugueta. Comment est-ce que je pourrais l'oublier? Ugueta veuve Meneses de Chaffarder.
Les MIRACLES. - Ma mère!
COROMOTO. - Le magicien!
Le NARRATEUR. - Les miracles sentent ces she/he s'évanouiront, mais leur volonté le maintient de pied.
UGUETA. - Femme pauvre. She/he a les jours comptés, s'il ne laisse pas bientôt ce état. Maintenant je devrais revenir à l'hôpital.
Les MIRACLES. - Docteur, la femme de qui a mentionné juste est ma mère!
UGUETA. - Leur mère?
COROMOTO. - Oui, comme le she/he l'entend, la maman de cette jeunesse.
UGUETA. - Je pensais qu'à personne de leur famille il l'a intéressé l'état de la santé de cette dame. La personne pauvre a souffert si beaucoup.
Les MIRACLES. - Docteur, me croirait si je lui dis que j'ai ignoré l'état de la santé de ma mère totalement.
UGUETA. - Non entendu, mais je peux le croire.
COROMOTO. - Non, croyez-le. Cette dame se comporte dans un chemin étrange quelquefois... Je savais toujours qu'il était demi loquita.
Les MIRACLES. - Docteur, dites-moi comme je peux arriver à la place dans que ma mère est.
UGUETA. - Bon, elle ne peut pas recevoir de visites à ce temps et je ne vais pas au sanatorium dans qu'elle est, mais je peux les laisser dans route, afin qu'ils demandent.
Les MIRACLES. - She/he le remercieraient à lui dans l'âme.
Le NARRATEUR. - Miracles et Coromoto enlèvent l'habit du sirvientan
UGUETA. - Dans route.
Le NARRATEUR. - et ils font le mutis avec Ugueta. Saúl laisse la pièce. She/he obtient la suite Renato.
SAUL. - Ami, je suis amoureux avec Cori follement.
RENÉ. - Cori?
SAUL. - L'ami de vos Miracles du cousin.
RENÉ. - Deux jeunesses qui ont été présentées comme Mili et Cori seulement savaient. Mili est cela du picón.
SAUL. - C'est votre cousin.
RENÉ. - Mon cousin Mili est?
SAUL. - Très simple: Diminutif des Miracles?
RENÉ. - Je suppose ce Mili.
SAUL. - Diminutif de Coromoto?
RENÉ. - Je suppose cet Aori.
SAUL. - Vous supposez très bien. Cori, est une fille charmante.
RENÉ. - Beaucoup de soin, ma clef, ne sera pas que vous chercherez un désordre avec la tante.
SAUL. - Le soin doit vous avoir. Je vous ai vus le putter l'oeil au cousin.
RENÉ. - She/he ne savait pas que les she/he avaient le cousin, mais non plus répète que je le regardais l'âme. Est-ce que vous croyez que les filles mangeront l'histoire?
SAUL. - Dans Timotes la réalité et le rêve est une chose seule. Dans Caracas il ne devrait pas être très différent. Si mon papa dit que votre maman vole le you/he/she est parce qu'il l'a vu.
RENÉ. - C'est une histoire, Saúl.
SAUL. - Je compte ou pas, le she/he vous joue pour voler à vous aujourd'hui.
RENÉ. - C'est comme de cinéma.
SAUL. - Comme de cinéma il est ce qui se passe à moi avec Cori. Je veux le voir le visage; ce sourire; cela me regarde avec ces yeux; cela me fait sentir comme le prince qui vient la sauver.
RENÉ. - She/he regarde, je ne vous avais jamais parler ce chemin. Est-ce que vous mangez que vous êtes malade?
SAUL. - J'admets que je suis malade. D'amour.
RENÉ. - Qui est-ce que le papa de l'aforenamed un sera?
SAUL. - Qui? L'homme avec que je dois parler afin qu'il approuve mon rapport avec cette fille.
RENÉ. - Ils disent ces she/he ont fait ma maman souffrir beaucoup avant she/he connaissait mon père qui pour ce raison tante Ugueta l'a apporté à Timotes. Beaucoup croit qu'il est mort.
SAUL. - histoire natale. Elle est fille du Poulet célèbre.
RENÉ. - Il est ce chemin.
SAUL. - Il ne se soucie pas, je suis amoureux et l'amour vainc tout obstacle.
Le NARRATEUR. - Soudainement les jeunesses écoutent bruits. Ils sont Miracle-qui est fait la Chorale de l'appel - et Coromoto
• qui a adopté la devise de Mili -. Ils veulent écouter le sujet sur que les garçons discutent, sans suspecter ce René et Saúl ont un plan.
Saúl. - (Sotovoce)¡Son ils!
Le NARRATEUR. - Tous le ce les textes qui commencent de ce moment auront un cursilísimo ton théâtral.
SAUL. - René, qu'est-ce qu'il se passe vous? Pourquoi est-ce que vous vous comportez ce chemin?
RENÉ. - Où est-ce que Mili est?
SAUL. - Qui est Mili?
RENÉ. - Le sirvientica de tante Ugueta.
SAUL. - Qu'est-ce qu'il passe avec elle?
RENÉ. - Je le violerai!
Le NARRATEUR. - Coromoto criera, mais les Miracles le couvrent la bouche et il le persuade rester et continuer écouter.
SAUL. - Cela pourrait nous apporter des conséquences désastreuses avec Mme Ugueta!
RENÉ. - She/he est seulement bonne! Tout savent que les bonnes sont de la viande fraîche pour les hommes de la maison
SAUL. - Et si le she/he parle avec votre tante?
RENÉ. - L'assassin. A elle et leur partenaire. Et plus tard je lance leurs corps dans quelque vallée de la Colline de l'Avila.
Le NARRATEUR. - Coromoto essaie de crier et encore il est retenu par les Miracles. Les deux larme de peur, dans silence et avec Murine, le miracle de la larme artificielle.
SAUL. - A Chorale aussi?
RENÉ. - Et à combien ils sont traversés. Après qu'ils m'aient mis cette injection dans l'Avenue San Martin que j'ai senti que mes instincts animaux ont débordé. Je suis un animal...! et le Mili sentira ma force!
Le NARRATEUR. - Coromoto est publié des Miracles et il laisse s'échapper aussi rapidement que possible.
RENÉ. - Ce qui est cela? J'ai écouté un bruit.
Le NARRATEUR. - Les miracles s'échapperont, mais René ouvre la porte et signe sa présence.
RENÉ. - Vous nous espionniez!
SAUL. - Chorale!
Le NARRATEUR. - Poésie épique, de terreur.
Les MIRACLES. - Messieurs... She/he entrera et j'ai écouté voix et j'ai préféré attendre. She/he prendra l'avantage pour aller marchand de légumes du casel...
Quand vous avez ouvert au-dessus comme si j'étais un fouinant...
Le NARRATEUR. - She/he pleure de peur.
SAUL. - S'il vous plaît, ne pleure pas Chorale. Je vous crois.
Les MIRACLES. - Remerciez-vous, Monsieur Saúl.
SAUL. - Dites-moi Saúl, sécher.
Les MIRACLES. - Il est bien, Monsieur Saúl, sécher.
RENÉ. - Ne soyez pas ânesse! Ce que vous lui dites Saúl rien autrement!
Les MIRACLES. - Soyez bien autrement Monsieur Saúl rien!
SAUL. - Ne la crie pas.
RENÉ. - Chorale où est-ce que Mili est?
Les MIRACLES. - Je ne le sais pas, Monsieur. Aujourd'hui est son jour libre et je crois que les she/he sont allés visiter son papa.
RENÉ. - Et est-ce que le papa a?
Les MIRACLES. - Un monsieur très étrange qui donne la peur. Avec lui dire qu'il y a gens qui croient que ce monsieur est un sucer-sang du vampire.
RENÉ. - Et je la sucerai une autre chose!
Les MIRACLES. - Oh!
SAUL. - René, respects à Chorale!
RENÉ. - Cela entre à ma pièce dans ce qui arrive!
Le NARRATEUR. - She/he fait le mutis vers leur pièce.
Les MIRACLES. - Je crois que nous devrions appeler à la police.
SAUL. - Ne s'inquiète pas. Je suis ici. Avec vous.
Les MIRACLES. - S'il vous plaît, Monsieur Saúl-n'importe quoi-plus, ne me dit pas ces choses.
SAUL. - Est-ce que vous croyez dans l'amour?
Les MIRACLES. - Je suis très jeune pour penser de ces bolserías. Les jeunes dames bienséantes pensent des autres choses.
SAUL. - Pardonnez-moi, Chorale; vous avez raison. Je suis rêveur un.
Les MIRACLES. - Pourquoi?
SAUL. - Vous direz que je suis un fou. Ou que je veux prendre avantage de vous. Mais quelque chose de très étrange qu'il passe dans toute mon existence du moment que je vous ai vus. She/he ressemblera à l'un l'autre irréfléchi et prématuré... Sauf moi...
Les MIRACLES. - Vous?
SAUL. - Est-ce que vous ne vous moquerez pas de je, vérité?
Les MIRACLES. - Se moquer? Pourquoi?
SAUL. - Parce que je...
Les MIRACLES. - Si?
SAUL. - Je suis follement...
Le NARRATEUR. - Un criez de René interruptions la scène.
RENÉ. - Saúl, venu immédiatement!
SAUL. - Je devrais aller.
Les MIRACLES. - Je le sais.
SAUL. - Est-ce que vous m'attendrez?
Les MIRACLES. - Le temps qui est nécessaire.
SAUL. - Je reviens immédiatement.
Le NARRATEUR. - She/he fait le mutis.
Les MIRACLES. - Oh, M.! Qu'est-ce que je devrais faire? Je crois que je tombe amoureux comme un idiot de Saúl. Soudain. Comme ma mère de mon she/he du père tombez amoureux. Et la maman n'est pas fermez même afin qu'elle peut me donner un conseil. Où veuillez ma mère, Virgencita est? Aidez-moi pour le trouver avec puits où le she/he veut qu'il soit. Dieu qui veut mon cousin ne fait rien à Coromoto. Mon Dieu, qu'est-ce qu'il prouve ce qu'il est? Ce qui a commencé comme un jeu devient un cauchemar terrible. Aidez-nous pour laisser le bon chemin de ce à tout. Si les she/he savaient comment vous chanter les she/he offriraient ma voix... Saúl... Qu'est-ce qu'il passe dans moi? Pourquoi est-ce que je ne peux pas arrêter penser à Saúl? Ma tête me dit qu'il est une folie, mais mon coeur paraît que les she/he voulaient être gauche ma poitrine seulement en pensant à cet homme. Aucun; je ne devrais pas écouter ce qui m'aime. Il n'est pas bien.
Le NARRATEUR. - Les miracles s'échappent à leur pièce. Ugueta revient, a habillé comme Docteur Dominguez et le she/he ne remarque pas qu'après s'il est Coromoto avec un fusil de chasse et dans attitude de l'attaque. Le secret, il passe à la pièce d'Ugueta sans elle peut le découvrir.
UGUETA. - Il est heure qui Mme Ugueta returns to its home.
Le NARRATEUR. - Saúl, sort et il est surpris.
SAUL. - Docteur! Pourquoi est-ce que les she/he sont revenus?
UGUETA. - Parce qu'ici il y a quelque chose d'étrange et je veux savoir ce qu'il est. J'espère qu'ils aient l'auyentado au spectateur et ils l'ont mis peur à ma fille, afin qu'ils ne croient jamais qu'ils sont plus intelligents que leur mère.
SAUL. - Nous avons terrifié Mili, mais la Chorale continue encore pour ces côtés.
UGUETA. - Je dois prendre le yo,personalmente de la charge.
SAUL. - Si vous le dites.
UGUETA. - Je le dis.
Le NARRATEUR. - Sombre. Dernier du nombre carré quatre Saúl sera capable de déclarer son amour aux Miracles? Est-ce qu'elle l'acceptera? Est-ce que René complétera sa menace? Qu'est-ce que Coromoto feront avec l'arme que les she/he ont apporté? Est-ce qu'il attaquera Ugueta? Ceux-ci et autres réponses dans le prochain résultat carré –el - les de“Un aiment aimez de Walt Disney”, grâce à La maison de la Culture de Baruta, Le Poste de gouverneur de Baruta et Murine.




Un amour aime de Walt Disney.
L'auteur: Caesar Eduardo Márquez Rouge.
V
L'Amour

Le NARRATEUR. - Je rends carré Cinquièmement. Dans l'aube vous desli-za le chiffre de Saúl inquiet. She/he vient suivi par René.
SAUL. - Maintenant votre tante est revenue. Elle veut qu'il fasse du mal à Chorale... Et je ne suis pas capable à... Elle est si sucrée, il est si innocent. Je préfère partir à une autre place... et s'il est nécessaire je l'apporte à moi à elle.
RENÉ. - Vous êtes totalement fou, ma clef. A où est-ce que vous partirez? Vous ne connaissez pas Caracas.
SAUL. - Vous avait ne me vu jamais ce chemin, certain?
RENÉ. - Jamais.
SAUL. - Moi-même suis surpris de cet en bas que je m'assieds. Je pensais que je ne pourrais jamais dépenser.
RENÉ. - Qu'est-ce que les she/he dépensent, vieux?
SAUL. - Je suis amoureux avec Chorale.
RENÉ. - S'il vous plaît, Saúl, vous l'avez su juste.
SAUL. - Aimez à première vue.
RENÉ. - Ne soyez pas d'enfant. Vous vous élevez sortir la matière avec la femme du propriétaire du she/he du cochinera,que vous a faits jusqu'à pleurer - et vous plongerez dans ce ridicule.
SAUL. - Il n'est pas un ridicule... Je ne ferai pas du mal à Chorale, et si à vous vous vous êtes arrivés le mettre au-dessus d'un doigt vous les ferez avec moi.
RENÉ. - Est-ce que vous me menacez?
SAUL. - Vous le prenez comme manque.
Le NARRATEUR. - Saúl fera le mutis vers la rue.
RENÉ. - A où est-ce que vous allez à cette heure?
SAUL. - J'ai besoin de marcher.
RENÉ. - Ce n'est pas Timotes, ma clef.
SAUL. - Je le sais déjà.
Le NARRATEUR. - She/he fait le mutis. Une image masculine laisse la pièce d'Ugueta et il frappe dans la tête à René et le she/he le laisse inconscient. Il est Coromoto.
COROMOTO. - Avec moi on n'est pas capable d'aimer juste cela.
Le NARRATEUR. - La fille attache à René et le you/he/she le met
Un foulard dans la bouche. Alors il part et le she/he rend pointer à Ugueta qui est hundcuffed et aussi a plaisanté.
COROMOTO. - Nous allons. Marcher. Ainsi ils voulaient me donner un autre sustico afin que les she/he ne sont pas revenus.
UGUETA. - Umjú.
COROMOTO. - Nous espérerons que l'autre Chrétien arrive afin que nous clarifions ce guarandiga.
Le NARRATEUR. - Les miracles laissent leur pièce.
Les MIRACLES. - Ce que c'est!
COROMOTO. - Permission vous de “faramayerías” cela clarifiera déjà cette matière!
Les MIRACLES. - Quelle matière?
COROMOTO. - Cela de l'homme que les you/they ont injecté et ces she/he voulaient me violer! Je vous aime que tout c'est idée du doñita Ugueta, nous donner un “sustico” pour “brinconas.”
Les MIRACLES. - Pourquoi? La maman! Où est-ce que vous étiez? Ils nous ont dit que vous avez été hospitalisés.
COROMOTO. - She/he leur a dit à nous elle-même a habillé de docteur, sac.
Les MIRACLES. - Maman!
Le NARRATEUR. - Saúl revient, vous entrez à Coromoto avec l'arme dans la main, le she/he croit que le she/he est voleur et quand il jettera à la fille au-dessus, le she/he s'est échappé un coup et Ugueta qu'il est jeté dans le sol qui est fait le mort.
UGUETA. - Oh!
RENÉ. - Où est-ce que je suis?
SAUL. - Qu'est-ce que vous avez fait, la femme du démon?
Les MIRACLES. - Coromoto, vous avez tué ma mère!
RENÉ. - Pourquoi est-ce que je suis attaché...? Uff ma tête!
COROMOTO. - Il est certain. Je suis une meurtrière!
SAUL. - Je vais vous à...!
Les MIRACLES. - Non, Saúl, s'il vous plaît, tout cela a une explication.
SAUL. - Comme votre vous dites, mon amour.
Le NARRATEUR. - Ugueta incorpore.
UGUETA. - Maintenant ils écouteront je.
TOUT. - Ugueta!
COROMOTO. - Le mort!
UGUETA. - Ce désordre de la totalité je l'ai causé... Parce que les she/he ont dû dire à ma famille que je n'avais pas été seul définitivement, comme tout ils pensaient là, dans Timotes. Je me suis marié et du fruit de cet amour ma fille, les Miracles sont nés.
SAUL. - Chorale.
RENÉ. - Cette bonne tante des nouvelles.
UGUETA. - Pas si bon, parce que bientôt après de mon mariage, Caffarder est mort et j'ai dû élever à mon petit seul.
RENÉ. - Et alors nous et vous vous arrivez feutre découvert.
UGUETA. - Et je me suis rendu compte que ma fille et un voisin curieux, ils étaient très prises plaisir avec l'arrivée de vous.
Les MIRACLES. - Et alors nous décidons de nous faire aller par les bonnes.
COROMOTO. - Et jusqu'à ce que nous nous changions les noms, afin que tout était plus honnête et le magicien qui est dire Mme Ugueta, it didn't accuse us easily.
SAUL. - Je croyais ce chemin que vous étiez Coromoto, quand vous êtes des Miracles vraiment.
RENÉ. - C'est dire cela n'était pas mon cousin à qui je l'ai regardé les culottes.
COROMOTO. - Quelles culottes?
SAUL. - Ne paie pas beaucoup d'attention à René, il est très affectueux de plaisanter
RENÉ. - Tante Ugueta nous a demandé que nous les avons effrayés, afin qu'ils n'ont pas continué inventer et nous l'avons bien trouvé pendant que nous avons été utilisés à la vie de Caracas.
SAUL. - Et alors ce qu'aucun de nous ne pourrais suspecter s'est passé.
RENÉ. - L'amour est arrivé à cette maison.
UGUETA ET COROMOTO. - L'amour?
Les MIRACLES. - Oui, maman. Oui, Coromoto: L'amour.
UGUETA. - L'amour de qui avec qui?
SAUL. - L'amour de leurs Miracles de la fille, à qui je savais comme Chorale, avec ce domestique.
UGUETA. - Comment?
COROMOTO. - Avec raison vous étiez si ridicule.
Les MIRACLES. - Mère, je suis aussi amoureux.
Le NARRATEUR. - Les femmes sont déplacées et ils pleurent. Lacrimal Murine, pour la larme de la fin.
SAUL. - Et nous voulons que vous nous donniez leur autorisation.
UGUETA. - Mais si votre vous êtes arrivés juste, millet.
Les MIRACLES. - Mère, se souvient comme votre rapport était avec mon père.
UGUETA. - Il est vrai. Oui, j'accepte Saúl. Mais beaucoup de fondation que nous sommes tout dans la même maison.
Et je veux prendre l'avantage pour le demander vous excusez Coromoto pour le mauvais pendant que que je l'ai fait se passer.
COROMOTO. - Et je pour les arrogances.
RENÉ. - Aujourd'hui est un jour des célébrations. Parce qu'un autre temps nous avons l'occasion pour voir le bonheur venir plus proche à famille du nustra.
SAUL. - Et nous les aimons que bien qu'il puisse paraître ils difficile et confus. L'amour existe à première vue.
Les MIRACLES. - Et il est un amour...
TOUT. - “Un amour aime de Walt Disney.”
Le NARRATEUR. - Sombre. Dernier du morceau. Ils peuvent applaudir.
La fin.
Cesser l'eduardo rouge Márquez.

Le septembre 6 1998.


Un amour aime de Walt Disney.
L'auteur: Cesar rojas Eduardo Márquez.

Les CARACTÈRES:


Le NARRATEUR.
Les miracles CHAFFARDER MENESES.
SAÚL diaz VILLARINO.
RENÉ MENESES.
COROMOTO HERNÁNDEZ.
UGUETA MENESES VIUDA DE CHAFFARDER.



Ce morceau appartient à la trilogie “icônes du norteamerica” (latinoamerica-nas des aspirations), a composé pour:

1.-Como dans les cinémas de l'hollywood.
2.-Vampiros comme de broadway.
3.-Un amour aime du walt disney.


Je continue penser que nous avons voulu être comme de broadway, d'hollywood ou de disney du walt, et nous avons fini être une grimace, une imitation très défectueuse... un croquis.
A marquez du rojas de l'eduardo du cesar.